Cambios.

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WILLIAM

Amanece y es un enorme placer tener un ángel a tu lado. Sus cabellos desordenados tapan su cara, acaricio esos que caen sobre su boca y la beso con dulzura. ¿Que me has hecho, no soy así.? Me pregunto una y otra vez. He tenido relaciones con varias mujeres y nunca he tenido la sensación de paz que Silvia me da. Se mueve y me da una hermosa vista de su espalda. Tiene un antojo en la parte superior izquierda de su hermosa espalda . Es muy menudo pero se ve. Paso mis dedos dibujando estrellas con sus lunares. Parece que la desperté.

- ¿Que buscas por ahí?.
- Sabes, eres preciosa.
- No te rías de mí. Soy una cuarentona muy normal.
- Créeme, no eres para nada normal. Para mí eres especial. La edad es solo una fecha. Nuestro verdadero yo está en nuestro corazón.
- ¿Que hora es, amor?.
- Son las siete de la mañana, tengo que desayunar y tengo que ir a la reunión que nos espera para las nueve.

Da un salto de la cama y corre hasta el baño, puedo ver su cuerpo desnudo ir de puntillas. Me quedo hipnotizado con su hermoso cuerpo.

- ¡Mamá!

La voz de la pequeña Ángela suena cada vez más cerca, me levanto y corriendo me meto en el baño. Silvia está indispuesta, parece que algo le ha sentado mal.

- Silvia, ¿Que te ocurre, amor?.
- No es nada, seguro que algo que comí anoche. Voy a ver que es lo que quiere Ángela.
- No te preocupes, iré yo. Termina de ducharte y nos vamos. Si te encuentras bien.
- Gracias, sí me encuentro mejor. Tengo que correr y ponerme algo adecuado para la reunión.
- Te pongas lo que te pongas, estarás perfecta.

Ella sonríe y voy a ver a la pequeña. Está desayunando, tuve que contratar otra canguro. Pues la amiga de mi primo Albert estaba de viaje. Esta se llama Mayte y es Española. Es una chica muy buena con Ángela y tiene un hijo. Está casada y tiene la misma edad que Silvia.

- Will, ¿Donde está mamá?.
- Está en la ducha, cariño. Ahora tenemos que ir a trabajar, pero a la hora de comer estará de vuelta. Tu puedes ir con Mayte al parque de abajo, he oído que tiene una gran variedad de juegos.
- Pues no ves que no puedo mover mi pierna.
- Pero también hay otro tipo de juegos en los que no hace falta jugar con las piernas.

Se abraza a mí cuello y me da un beso muy fuerte en la cara. Después me mira y me dice.

- Ojalá fueras mi papá, eres muy bueno conmigo.
- El es bueno con todas.
Silvia hace su aparición, y me quedo con la boca abierta. Ángela se da cuenta y me la cierra con sus diminutas manitas. La miro y sonríe. Todos reímos.

Me levanto por inercia y voy hasta donde está ella, huele a moras y eso me vuelve loco. Me pongo de frente a ella y Le susurro.

- Soy el hombre más afortunado del mundo, tengo a la mujer más maravillosa de este planeta.

Ella sonríe y acerca sus labios a mis oídos.

- Si no te arreglas no llegaremos a la reunión.

- No me importa esa reunión, solo me importas tu.

Mayte coge a la pequeña y se la lleva para terminar de vestirla. Yo me voy a terminar de arreglarme. Suena el timbre de la puerta.

SILVIA

Voy a abrir la puerta y me quedo sin palabras al ver a esa persona allí delante.

- ¿Quién eres tú?.
- ¿Perdón?.
- No te conozco, ¿eres nueva empleada?.
- Señora, creo que me confunde con.....
- Madre, ¿Que haces aquí?.
- Hijo, ¿Como se llama tu criada?.

Inalcanzable Y BelloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora