El Pasado, Vuelve.

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OCHO AÑOS ANTES.

SILVIA.

Hace frío en esta casa tan vieja, Erick no pudo conseguir trabajo en esa empresa de vidrio y cuando eso sucede temo lo peor. Se emborracha y después me toca aguantar sus insultos, ya está por llegar así que voy hacer que duermo para que no me moleste. Escucho la puerta abrirse y se cae algo al suelo.

- ¡Silvia!, ¿Donde demonios te has metido.? Maldita estúpida, ni siquiera me ha hecho la cena.

Lo escucho despotricar como un caballo cuando lo acorralan. La puerta se abre de golpe y doy un salto de la cama. Lo veo venir hacia a mí, me agarra del brazo y tira de él.

- ¡Mírame, mujer!. ¿Cuando me vas a hacer la cena?. Eres una auténtica mierda de mujer. Cuando llegas de tu asqueroso trabajo deberías hacerme la comida.

- Estaba cansada, además la cena la tienes en el horno.

Me da tremenda cachetada y caigo al suelo. Cuando me ve allí tirada se va a la cocina y Oigo como saca algo del horno y lo coloca encima de la mesa.

- ¡Está frío,!, no sabes ni cocinar. Maldita sea. Me voy al bar, seguro que allí abra algo caliente para comer.

La cara me arde, me pongo de pie como puedo y voy a la nevera para coger hielo y colocarlo en ella para que no se hinche. El psiquiatra me dijo que las pastillas funcionaría y que su problema sería a menos cada día. Cuando me dijo que su enfermedad es nefasta incluso me dijo que lo internara, el border line es muy inestable.

Me tomo un par de valerianas para calmar mi ansiedad y poder descansar para que se note por la mañana mis ojeras.

Amanece y lo veo acostado a mi lado, aún lleva la ropa puesta, su peste a alcohol es repugnante, logro levantarme sin despertarlo. Me voy a la cocina y me hago un té. Me meto en la ducha y cuando voy a salir ahí está el. En cuanto ve de que estoy desnuda se acerca hasta a mi. Lo siento empalmado, pero me da asco hacerlo con esa peste que sale de su boca. Doy la vuelta a la cara y ve como la tengo de hinchada. Sus ojos se abren de asombro y después salen lágrimas de ellos.

- Lo siento mucho Silvia, no se que hacer para controlar mi genio.

- Tómate las pastillas, por favor. Si no tendré que irme y dejarte.

- No me vas a dejar, me las tomaré. Te lo prometo.

EN LA ACTUALIDAD.

SILVIA.

Estuve hablando con Will de mi pasado con Erick. No entiende que aguantara tanto tiempo y que tuviese un bebé con él. Le expliqué que después de un tiempo se puso mejor, no era un romántico empedernido, pero me respetaba. Seguía siendo un machista, pensé que teniendo un bebé podría cambiar y algo si cambió. Pero a mí me tenía en segundo lugar siempre. Era la criada de él. Solo me tenía para satisfacer sus deseos, nada más.

- Deberías haberlo internado cuando te lo recomendó el médico. Ese tipo no cambiaría con un tratamiento de pastillas.

- Will, necesito saber por qué tu madre lo conoce, ¿Acaso ella está detrás de todo esto?.

El asiente con la mirada y ya entiendo el porqué de su preocupación por quedarse conmigo.

- ¿Desde cuando lo sabes?.

- Eso no es lo que importa, lo que es verdaderamente importante es que no voy a dejarte sola ni un momento.

- Ven, vamos a dormir. Ya es muy tarde y hoy me siento un poco cansada.

Me coge como si fuera de papel y me lleva hasta el dormitorio,donde me posa y el se posa sobre mí sin tirar todo su peso en mí cuerpo. Me besa suavemente y después se levanta y se dirige al baño.

Inalcanzable Y BelloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora