𝐌𝐘 𝐅𝐈𝐑𝐒𝐓 𝐋𝐎𝐕𝐄

𝐓𝐇𝐈𝐑𝐓𝐄𝐄𝐍

𝗡𝗮𝗿𝗿𝗮 𝗦𝗮𝗻𝗵𝗮 ;

Me paralicé y siento que su madre también. La mujer colocó sus manos en su cabeza y se sentó en el sofá gritando que le llevaran un vaso de agua. Genial, no sólo me habría metido con su hijo, sino que ahora sería culpable si esta mujer iba al hospital.

— ¿Acaso estás loco? Nos arruinarás, tal y como tu primo Jackson hizo con sus padres. Ellos ya ni se aparecen en las reuniones familiares. — Dijo. Sus manos temblaban a más no poder.

— Al menos sus padres lo apoyaron, y honestamente me da igual lo que piensen todos. — Tomó mi brazo y me acercó a él.

— Hijo, ¿acaso no has pensado en los problemas que traerá esto? La familia de tu padre y él te tratarán de lo peor. — Suspiró para luego beber el agua que Jennie le había llevado.

— Ya te dije que no me importan, yo estaré con Sanha cueste lo que cueste... Realmente esperaba que me apoyaras, pero ya veo que fue estúpido tener esperanza.

— Hijo... Ash, no me queda de otra que apoyarte. Pero tu padre no dirá lo mismo, te sacará de ésta casa. — Comenzó a llorar. Yo sólo pensaba en que me alejarían de Eunwoo y eso era lo que menos quería.

— No llores mamá. Si me debo ir de esta casa conseguiré un trabajo mejor que en una pizzería. — Se sentó junto a la mujer y la abrazó.

— Tú... ¿De verdad quieres a mi hijo? — Se dirigió a mí.

— Sí señora, lo amo demasiado. — Afirmé, estaba realmente nervioso.

— Yo no diré más. Pero debes hablar con tu padre... Y ya veremos cómo termina todo esto. — Suspiró y subió las escaleras hacia su cuarto.

Eunwoo se dejó caer sobre el sofá y dio un largo suspiro. Yo sabía que su padre era un hombre duro que nunca daba el brazo a torser, no aceptaría nada fuera de sus normas en la casa. También sabía perfectamente que Eunwoo no podría subsistir con una simple pizzería, para pagar su universidad necesitaba ayuda de sus padres.

— Woonie... ¿Qué haremos? Sabes que no puedes pagar la universidad con lo que te pagan en la pizzería, es demasiado. — Me senté a su lado. Yo tampoco podría pagar la escuela a la que iba, debería empezar de cero en una común y eso significaba ya no ver a Yeo, Kai y Beomgyu por las mañanas, lo cual significaba no tener amigos.

— No importa, iré a una común aunque vayan más atrasados o lo que sea. — Se levantó y tomó mi mano. — Vamos a dormir.

Me llevó hasta su cuarto y allí se tiró sobre su cama para luego lanzarme un pijama. Siento nervios, miedo, dolor, tristeza, muchas cosas. No quiero que su padre nos aleje... Él no era para nada parecido al mío. No estaba seguro de nada, al menos el tener a Eunwoo a mi lado me calmaba, pero aún así no podía dormir.

— Bebé. — Susurró Eunwoo en mi oido, no me acostumbro a que me diga así. — ¿Qué te pasa?

— Tengo miedo... ¿Crees que quiera alejarnos? Ash. ¿Para qué pregunto? Es obvio que lo hará. — Hablé, mirando al techo.

— No quiero que sientas miedo, porque no me alejaré de ti. Nada ni nadie va a lograr que te deje. — Besó mi mejilla.

Lo abracé y me acurruqué a su lado.

Al despertar esta vez, Eunwoo estaba viéndome. Tenía una expresión algo triste, parecía preocupado.

— Hoy le diré a mi padre. Quiero que todo esto acabe de una vez, estoy cansado de tener que callarme y obedecer nada más. — Suspiró y besó mis labios.