NOTA: Reproduzcan la canción más adelante.
Me recoste en el marco de la puerta, me cruce de brazos y sonreí al ver a mi hermano intentando hacerle nudo a su corbata.
— ¡Diablos! — Suspiro.
— ¿Necesitas ayuda? — Camine hacia el.
— Estoy tan nervioso que no puedo hacer el nudo de mi corbata — Sonrió.
— Cualquiera lo estaría antes de su boda — Comencé a doblar la corbata.
— Te ves muy linda — Me miro de pies a cabeza.
— Gracias.
Termine de hacer el nudo y Nick se miro al espejo.
— Mucho mejor — Arreglo su saco.
— Iré con Sofia — Salí de la habitación.
Antes de llegar a la habitación donde esta Sofia, me encontré con Neels.
— He visto a algunas chicas lindas por aquí, pero ninguna se iguala a ti — Me tomo de la cintura.
— Te vez muy guapo — Mordí mi labio.
— Y tú muy sexy — Me beso.
Una de sus manos fue bajando poco a poco hasta llegar a mi trasero, lo apretó un poco haciéndome gemir.
— Tranquilo guapo.
— No puedo contenerme lindura — Beso mi mejilla — Ese vestido te queda fabuloso.
— Mejor me voy — Lo bese.
Camine hacia la habitación y entre. Sofie tenia el vestido puesto, su velo también. Se veía hermosa.
— Luces hermosa. El blanco te queda bien — Ella volteo a verme.
— Mis piernas tiemblan mucho, mis manos sudan horrible y siento que mi corazón esta apuntó de salirse de mi pecho — Soltó una risa nerviosa.
— Estoy segura que Nick también se siente igual.
Sofia se volteo a verme y me sonrió, se acerco un poco más a mi y me abrazo.
— Tengo a la dama de honor más hermosa — Me guiño el ojo.
— Gracias — Le sonreí. Mi vista fue a parar en el reloj que estaba en la pared — La hora llego. Olvida todo, solo concentraté en verte linda mientras caminas hacia el altar.
— Lo haré — Dio un largo respiro.
[···]
Neels y yo íbamos caminando hacia el altar. Adelante de nosotros iban dos pequeñas niñas tirando pétalos de rosas.
— Luego seras tú la que use un vestido blanco — Susurro Neels.
—Y tú estarás justo donde esta mi hermano.
— Eso seria genial — Me guiño el ojo.
Cuando llegamos al altar el se puso del lado en el que estaba Nick, y yo me puse en el lado en el que estaría la novia. La típica canción de las bodas se escuchó, todos miramos hacia atrás donde venia Sofia. Se veía tan feliz. Nick no aparto la mirada de ella en ningún momento.
[···]
— ¡Muchas felicidades! — Abrace a mi hermano y a su esposa.
— Gracias hermanita.
