Mensajería Iris

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Llegando a Denver, Percy seguía sin dirigirle la palabra a la insoportable rubia. Se había disculpado con Nico y Grover por casi causar un terremoto, pero también había dejado claro que no pensaba hablarle a la chica hasta que se disculpara por ser tan grosera. El sátiro le había asegurado que probablemente estaba celosa.

Después de todo, Percy no sólo era más poderoso, si no que también tenía la atención de su padre, cosa que la mayoría de semidioses no.

-Necesitamos llamar al campamento, y hablar con Quirón.

-¿Quien es Quirón?-preguntaron Percy y Nico al unísono.

-Es el jefe de actividades del campamento-explicó Grover.- es un centauro.

-Ah. Pues no tenemos teléfonos.

-Llamaremos por mensajería Iris-Annabeth señaló un sitio donde lavaban autos-andando.

A nadie le pareció raro que cuatro chavales se metieran en uno de los compartimientos sin llevar un auto, lo cual de por si era un tanto raro, pero mientras los dejasen en paz, todo bien.

Percy y Nico se alejaron de los dos mientras llamaban, el menor explicándole emocionado sobre su juego, enseñándole sus figuras. Afortunadamente todavía conservaba la mochila de la escuela, donde las llevaba. Los libros y cuadernos tiempo atrás habían acabado en la basura.

-Percy-llamó Grover de pronto, y les hizo un gesto.

Los dos guardaron las figuras y se asomaron para estar en el campo de visión de la llamada. El tal Quirón los observó atentamente a los dos.

-Un placer conocerte, Perseus Jackson, hijo de Poseidón. Y a ti también, Nico di Angelo.

Nico saludo con la mano, semi oculto detrás de Percy, quien no se molesto por eso.

-Hola. -saludó él por parte de ambos.

Alguien asomó por detrás de Quirón, un joven mayor que Percy y Annabeth, alto y de cabello rubio. La chica se ruborizó ligeramente al verlo.

-Luke-dijo, saludándolo con la mano.

-Hey-dijo el con una sonrisa resplandeciente- me alegra verlos en una pieza. Y este, ¿es el nuevo campista?

Percy frunció la nariz.

-Eso no lo sé todavía.

Annabeth le lanzó una mirada venenosa.

-Bueno. El niño rico todavía no decide si ir al campamento o no.

Percy le sacó la lengua, despectivo. El centauro se aclaró la garganta para luego empezar a hablar, pero fue interrumpido por otro campista.

-Parece que ha habido una pelea-suspiró- Luke, encárgate de esto.

Se alejó de su rango de vista y sólo el otro semidiós quedó ahí. El rubio les sonrió de nuevo, pero Percy no confiaba en él. Para empezar... tenía una extraña sensación, no lo conocía, y además había ignorado deliberadamente a Nico.

-Últimamente hay mucha tensión en el campamento-les explicó- se corrió el rumor del robo y ahora todos están discutiendo... nadie sabe quien abrió la boca, pero se ha armado una bronca. Algunos dicen que Poseidón robó el rayo y ya se están formando bandos...

-Mi papá no robó nada-saltó Percy automáticamente.

Luke se sorprendió. Al parecer nadie sabía que era hijo de Poseidón.

-Vaya— ¿tu eres su hijo? Lo siento, no era mi intención. Sólo repito los rumores.

-El ladrón tiene que ser Hades-afirmó Annabeth- Es el único que tiene razones.

Percy Jackson y el regalo de PoseidónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora