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Luego de que Tony había aceptado que no había otra persona que amara más que a Stephen y que no deseaba que no hubiera otra persona a su lado aprovecharon que esa misma noche Pepper había tenido que pasarla en otra ciudad, al fin y al cabo, el mundo seguía rodando alrededor del sol y ella aún tenía que dirigir la empresa Stark. Aquella noche realmente no había pasado mucho entre ellos, estaban bastante cansados y no tenían muchas energías para hacer mucho más, y ya que era la primera vez que podían pasar la noche juntos prefirieron aprovechar la oportunidad y disfrutar de su compañía, sin necesidad de agregar ningún otro tipo de atenciones para ambos.

Antes de dormirse Tony había programado una alarma, sabía que Pepper llegaría temprano y de todas formas no quería arriesgarse de que cualquier otra persona los pudiera ver dormir juntos, acción de lo que Stephen no estaba enterado.

- Stephen, despierta – dijo dando leves besos en su rostro – deberías levantarte o nos podrían ver

- Dijiste que me elegirías a mi – a pesar de que los besos que recibía le dibujaban una sonrisa en el rostro el saber que lo estaba echando de su cama lo entristecía

- Si, y lo haré, pero no quiero que ella se entere de esta forma, te elegí a ti, pero aún la quiero a ella, me ha acompañado toda mi vida, y no sólo como mi pareja, se merece que se lo diga de la forma adecuada – Stephen suspiró y lo besó en los labios, estaba de acuerdo con él en eso

- Está bien – lo abrazó por la cintura y le sonrió – pero no te demores

- No lo haré

Después de meses de trabajo ayudando a las personas que los necesitaban y luego de días en los que no había llegado ninguna persona para solicitar su ayuda, finalmente los vengadores habían decidido tomarse unos días de descanso, Natasha con Bruce habían decidido tener un cita, estaban conscientes de que la ciudad no era más que escombros y edificios derrumbados y que no encontrarían un lugar bello al que ir, pero habían pasado tanto tiempo trabajando juntos pero sin poder actuar del todo como una pareja que creían que se merecían al menos unos días para ellos dos sin que nadie molestara, Rogers también decidió salir, aunque él solo quería hacer una caminata en solidario y poder ver en persona los daños que toda la batalla había causado, probablemente recorrer la ciudad entera para saber todo lo que había pasado, Stephen por su parte sabía que si los vengadores se tomaban uno o todo los días libes que quisieran el trabajo que él tenía no iba a acabar, ya que si los vengadores no lo necesitaban habían muchas personas y hechiceros que sí.

- Tony – suspiró, estaban Pepper y Peter presentes y él se moría de ganas de poder despedirse de una forma más cariñosa, pero no podía, aún no era el momento, no quería arruinar las cosas – ya que los vengadores no me necesitan yo voy a volver al templo, allá seguramente aún necesitan ayuda – le estiró la mano para que la estrechara, necesitaba al menos un pequeño de contacto físico antes de irte, Tony correspondió al gesto – para cualquier cosa que necesites no dudes en contactarme

- Está bien – dijo mientras asentía, lo pensó unos segundos mientras aún sostenía la mano de él con la suya – ¿me acompañarías?, hay algo que debo decirte – Pepper lo vio completamente extrañada, pero no vio porque debía desconfiar de eso

- Claro

Tony le soltó la mano e hizo que lo siguiera hasta la habitación que estaba más cerca, una pequeña sala de reuniones, Tony cerró la puerta detrás de ellos y en un rápido movimiento se sentó sobre la mesa, estirando los brazos en dirección a Stephen.

- Vamos, no vas a creer que realmente te iba a dejar ir solo con eso – Stephen acortó la distancia y se perdió en sus labios – prométeme que volverás pronto

Inevitable (Ironstrange) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora