Inevitable (Ironstrange)

Amenaza

Stephen se encontraba en su habitación leyendo uno de sus libros, o al menos eso era lo que intentaba hacer, ya que él no podía hacer otra cosa además que pensar en los problemas que estaba teniendo con el santuario y su relación con la persona de la que se había enamorado, y los problemas que esa misma persona estaba teniendo en esos mismos momentos, problemas que estaba teniendo por estar con él, para Stephen todo ese problema lo había provocado él, si no se hubiera enamorado de Tony, él nunca le habría correspondido, no habría dejado a su esposa, o al menos futura esposa, no estaría en riesgo de perder a su hija que aún no había nacido, de no haberse enamorado de Tony él mismo no estaría teniendo problemas en esos momentos, estaría en el santuario, cuidando de él, sin darle problema a ninguna persona, cada vez que pensaba en eso se deprimía completamente, porque sabía que si eso fuera así todos serían felices, Tony lo sería, Pepper lo sería, todos los vengadores lo serían, todos los hechiceros lo serían, realmente todo el mundo lo sería, él lo sabía, sabía que en los futuros posibles en los que él y Tony no estaban juntos, todos eran felices y a pesar de haber perdido la mitad del universo seguían su vida lo mejor posible, todo y cada uno de ellos, menos Stephen, ya que por alguna razón del universo él siempre, todas la veces, terminaba enamorado de Tony y en la mayor parte de esos futuros solo terminaba sufriendo.

- Tony, ¿estás ahí? – la voz de Steve sonaba al otro lado de la puerta – necesito hablar contigo

Stephen se puso de pie sin decir una palabra, caminó hasta la puerta y la abrió, para ver la expresión seria que tanto le molestaba de Steve.

- ¿Qué necesitas? – la voz de Stephen sonaba completamente molesta

- De hecho, había algo importante que le quería decir a Tony – vio a un lado de Stephen, hasta dentro de la habitación, esperando ver a Tony, a quien no encontró, luego se alejó unos centímetros y miró con una leve expresión desafiante a Stephen – pero ya que estás aquí hay algo que quería hablar contigo, ¿puedo pasar?

- Estoy seguro de que si de todas formas te digo que no de todas formas vas a entrar

Stephen simplemente se hizo a un lado para que Steve pudiera pasar, el que caminó hasta la cama, inspeccionó por un segundo la habitación y sin esperar a que Stephen le dijera nada se sentó a los pies de la cama, mirándolo expectante, casi como queriendo decir que estando ahí era él quien marcaba el territorio y que en ese edificio era él quien mandaba, Stephen frustrado simplemente lo vio y se quedó a unos pies de él mirándolo directamente.

- ¿Qué es lo que necesitabas decirme? – Stephen se cruzó de brazos

- Estoy preocupado por Tony – se cruzó de piernas, escudriñando cada expresión de Stephen – lo conozco desde hace años, desde que lo conozco ha sido feliz con Pepper

- Steve – lo interrumpió, no podía seguir escuchándolo hablar así – estás siendo egoísta, realmente no sabes lo que está pasando

- No, Stephen, no sé lo que está pasando – se puso de pie y sus ojos se volvieron vidriosos - ¿Sabes por qué? Porque desde que ese maldito de Thanos chasqueó los dedos nada ha vuelto a ser normal, nada – se volvió a sentar y se frotó la cara intentando evitar que las lágrimas comenzaran a brotar de sus ojos – él era mi amigo y no ha vuelto a confiar en mi – Stephen lo pensó un segundo y se cruzó de brazos

- ¿Sabes lo que yo creo? – alzó la voz inevitablemente – lo que yo creo es que dejaste de ser su gran amigo, su mejor amigo, cuando Tony se dio cuenta de que el que realmente era tu mejor amigo había matado a sus padres y por alguna retorcida razón casi lo matas

- Tú no sabes lo que pasó

- Oh, por favor – exageró en la voz – Tony me lo contó todo, ¿crees que no confía en mí?, de la misma forma en la que confió en ti – lo golpeó en el pecho levemente con su dedo indice – pero tú diste tu vida por otro, debería pensar mejor en lo que me quieres decir