Inevitable (Ironstrange)

Pepper

Hace unos días Pepper había recibido la noticia de que estaba embarazada, apenas recibió la noticia tuvo miedo, de muchas cosas, desde la batalla de Thanos las cosas con Tony no eran las mismas, no era lo mismo hablar con él o pasar tiempo con él, desde que había regresado de la batalla no habían tenido vida de pareja y con todo eso ella no sabía como iba a reaccionar él con la noticia. Luego de unos días con la noticia sin poder comentársela a Tony, finalmente llegó un día donde la mayor parte de las personas que vivían en el edificio habían decidido salir por unos días, día en el que se quedaron Tony, Peter y ella, ese día decidió que era el momento para decírselo, esperó a que se quedaran los dos solos y finalmente le dio la noticia.

Pepper no se había sentido más alegre en la vida, sin contar en el momento en el que Tony había regresado de la batalla con Thanos, como cuando le dio la noticia y vio como se le iluminaban los ojos, como después de tanto tiempo nuevamente la había tratado con palabras de cariño y habían pasado el resto del tiempo como si nada hubiera pasado, como si esa batalla no hubiera pasado y podrían ser la familia que un día Tony había soñado, literalmente.

Esa misma noche Pepper se quedó dormida apenas se fue a recostar en la cama, estaba demasiado cansada y Tony por alguna razón se estaba demorando mucho, ella ya sabía como era él, en espacial en los momentos en los que era más feliz, así que simplemente lo dejó ser.

Al día siguiente cuando despertó a un lado de él, viéndolo como todavía estaba durmiendo profundamente, hizo que se le calentara un poco el corazón, podía pensar en que cuando se levantarían, irían a tomar desayuno, junto con Peter, lo que a ella le hacía sentir que ya eran una familia y que su nuevo bebé sería algo que los uniría aún más. Ella se acercó a él y lo besó con ternura intentando de no despertarlo.

- Te amo – le susurró sonriéndole

Luego de unos minutos finalmente despertó Tony y Pepper lo recibió con una sonrisa en el rostro.

- Buenos días – Tony se había sentado a su lado y Pepper no pudo evitar saludarlo con una sonrisa

- Debería levantarme – ella se extrañó de su forma de actuar, él siempre que despertaba intentaba de permanecer lo que más podía en la cama sin tener que levantarse

- Los demás aún están afuera, podríamos quedarnos un rato en la cama, descansando, uno al lado del otro

- Peter aún está aquí, deberíamos darle desayuno – Tony nunca había sido tan responsable y aunque Pepper estaba intentando con todas sus ganas no comenzar a desconfiar comenzaba a saber que había algo que no estaba bien

- ¿Desde cuándo te importa tanto el desayuno? – simplemente quería pensar en que estaba nervioso porque sabía que sería padre y recordó que solo anoche le había dado la gran noticia – llegaste tarde a dormir

- Si, es que me quedé pensando – Tony se recostó a su lado

Pepper se recostó a su lado, intentó de hablar con él acerca del tema, intentando de saber que era lo que realmente estaba pensando acerca de la noticia de que sería padre, aunque siempre con miedo a lo que podría decir y en ningún momento pudo verlo a los ojos mientras hablaban, le recodó a Tony el momento en el que se habían encontrado con Stephen por primera vez, le recodó ese sueño que tanto los había marcado, acerca de su hijo, de su posible hijo o hija, que en el presente era real, era Morgan, que sería mucho mejor que el hechicero nunca hubiera aparecido y ella pudo ser feliz en el momento en el que él le comentó que él sería feliz de nunca haber conocido al hechicero, pero de la forma en la que actuó a continuación hizo que finalmente Pepper comenzara a desconfiar cada vez más y se sintiera cada vez peor.