2Capítulo 1

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Eran las 7:00 y estaba durmiendo. Escuché ruidos escandalosos abajo en la sala de estar, me levanté, me puse mis vans, unos shorts vaqueros y una camisa amarilla, me lavé la cara y me peiné un poco el cabello ya que no hacía falta que me diera mucho porque lo tenía muy liso, me delineé los ojos y un poco de labial de fresa y salí corriendo a la sala de estar. Cuando ví lo que estaba pasando me quedé en shock.

Mis padres les están pegando a mi hermanito Pablo y él sin poder defenderse, y sí, nuestros padres nos pegan, sin motivo alguno, y algunos días llegan borrachos a las tres de la madrugada, nos despiertan y nos pegan o nos tiran cosas, esto es un caos. Por fin desperté del shock.

-¡Dejádlo ya por favor, dejádlo! No puedo verlo así...-dije llorando- ya estaba harta, pero hartísima que me salían humo por las orejas, no lo aguantaba más. Cogí a mi hermano en brazos y lo alejé de mis padres enfadada, mi hermano tenía la mejilla y la frente morada y una brecha en la cabeza, estaba harta de mentirle al doctor de que se había caído, porque ya se había caído supuestamente millones de veces.

-Tú, mocosilla, buena para nada, suelta al niño y vete a tu habitación, después hablamos-negué con la cabeza y el fue a pegarme una bofetada en la cara, -ni te atrevas Lucas, ya no sois mis padres de aquí en adelante, me dáis asco, ¿lo sabéis? -no te atrevas a hablarme así, Laura, sí somos tus padres, y somos los que te traímos a este mundo, por favor deja a tu hermano aquí y corre a tu habitación-me dijo mi padre enojado-, mi hermano me miraba con los ojos llorosos para que no lo dejará allí y no lo hice, ya no aguantaba más, lo iba a soltar todo, estaba harta de que mis padres arruinen nuestras vidas.

-¡No, no me voy a ir, nos dáis asco!, ¿no os da verguenza que vuestros hijos salgan todos los días a sus colegios y se rían de ellos porque creen que se han caído? Sois imbéciles, unos malos padres, estamos hartos de que nos peguéis. ¿A caso no os acordáis qué ustedes causasteis la muerte de nuestro otro hermano? Lo matásteis, ¡por favor! No puedo más, dejadnos en paz, queremos tener una familia feliz y unos padres que nos quieran, no que nos maltraten-por fin lo solté todo o casi todo, estaba aliviada pero todavía seguía con mis ojos llenos de furia hacia mis padres.

-Pues niñita, si estáis hartos de nosotros, ya podéis hacer vuestras putas maletas e iros de aquí, ¡ya!, no sois buenos para nada...-me enojé por lo que dijo y sí, me iba a ir de esta casa lo más pronto posible -Pues claro que nos vamos Lucas y Noelia, mañana nos iremos, aunque sea debajo de un puente para no soportaros más- cogí a mi hermano y fuimos a mi habitación -Hermanito, no te preocupes, te lo voy a curar el daño que te han echo -le sonreí, el me dedicó una sonrisa pero llena de tristeza a la vez.

-Hermana, déjalo, no me cures, yo lo que quiero es irme de aquí, no aguanto que me peguen más, me están matando -dijo llorando, yo no podía verlo así, por dios, me daba mucha pena -tranquilo Pablo, mañana nos iremos de esta casa, te daré una sorpresa, venga, ve a tu recámara que te voy a traer un bocadillo de chopped y brick de zumo de naranja y te cuando termines te me vas a dormir, ¿vale amorcito mío? - el asintió con la cabeza y me abrazó, yo al segundo le correspondí el abrazo, y se fue a su habitación.

Bajé con cuidado las escaleras para que mis padres no se dieran cuenta de que estaba bajando, pero cuando bajé no había nadie, los ví por la ventana salir y reírse -malvados, pensé- cogí un trozo de pan de sandwich y cogí unas lonchas de jamón york y le hice el bocadillo, lo calenté en la tostadora y cogí el zumo de naranja. Agarré una bandeja del fregadero y pusé todo encima de ella, apagué la luz, subí las escaleras y me dirigí a la habitación de Pablo, ahí estaba él tumbado en la cama jugando con su consola, le dejé el desayuno en la mesa -Pablo, cuando termines de comértelo todito dejas la bandeja en el escritorio detrás del tocador que yo ya la recogeré, mañana te alegrarás de adonde vamos y no querrás venir aquí más. Adiós hermanito, te quiero- le guiñé el ojo y salí de la habitación, escuché que el me dijo - vale, hermanita, adiós, yo también te amo- sonreí ante aquellas palabras, yo si que lo amaba con todas mis fuerzas.

Por fin llegué a mi habitación y me tumbé en la cama, de pronto, se me vinieron recuerdos a la mente de hace 6 años, cuando estaba con mi hermanito, mi tía y mis primos, a mis padres ni nombrarlos. Cuando nos poníamos a dibujar en la mesa de dormir y nos tumbábamos en el césped, cuando dormíamos en la cama de mis primos porque teníamos miedo de las películas que veíamos de terror, que recuerdos -pensé-.

Ya sabía, iba a llamar a mi tía, hace mucho que no hablaba con ella.

Marqué el número en mi celular y a los tres pitidos se escuchó una voz hablar, sonreí.

*Comienzo de la llamada telefónica*

-¿Hola, quién llama?- dijo mi tía confundida.

-Titaaaaaaaaaaa, soy yo, tu sobrina Laura- sonreí.

-Oh, ¡santo cielo! eres tú, por dios, mi queridísima sobrina Laurilla, te eché de menos, ¿cómo has estado? te extraño.

-Yo también te eché de menos tita, pues mal, nuestros padres no paran de pegarnos, nuestro hermano murió por culpa de ello aunque ya lo sabes, y hemos decidido irnos de esta casa pero no sabemos donde -puse cara triste, estaba mal.

-Por dios sobrina mía, veniros aquí a vivir para siempre, como en los viejos tiempos, ¿te presto dinero? Mañana cogéis el autobús y os venís, aquí os espero -sentí que sonrió, me puse contentísima.

-Claro que sí, tita, mañana voy para allá, no, no hace falta que me prestes dinero, yo tengo para mi hermano y para mí, adiós, mañana nos vemos, será un gran día, te quiero, un beso.

-Adios cariño -sonrió-

*Fin de la llamada telefónica*

Estaba contenta, le dije a mi hermano que nos íbamos con la tía Ángeles y se puso loco de contento dando brincos en la cama, sonreí, nunca lo había visto así de contento. Me dí un baño de agua caliente con espuma y me puse mi pijama, cogí y mis auriculares y me dormí escuchando música de Simple Plan.

Presiento que mañana va a ser un gran día.

Una nueva vida.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora