-Chicos, venga que se les va a enfriar la comida -dijo mi tía, fui la primera en entrar a la cocina con Elena ya que, Mario y Carlos estaban hablando sobre baloncesto -Tita, ¿qué has preparado para comer? -le pregunté- Oh cariño te va a encantar, he echo pollo asado -le sonreí porque no quería montar un escándalo de los míos con lo tímida que soy por una comida que me gustaba, simplemente sonreí, no pasó nada más-
Mi tía le sirvió primero a Carlos, obvio, era el invitado de hoy, después a Pablo y a mí y por último a Elena y después a Mario, que le tocó el trozo más pequeño, me vengué -dije hacia mis adentros-, pasaron cinco minutos y mi tía nos sirvió refresco de Uva, está delicioso, enserio, cuando estaba bebiendo mi refresco de Uva, mi tía habló: -Laura come más despacio, por favor -me sonrojé tanto que iba a estallar pero él me dedicó una sonrisa y habló, oh oh - Señora González, no pasa nada, el pollo se come así -rió amablemente, me encantaba esa sonrisa de NO-MUJERIEGO - Es verdad mamá mira -dijo Elena comiéndose el pollo con las manos y ensuciándose toda la boca -reímos todos hasta ella -Tampoco exageres Elena -reí-
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(NARRA CARLOS)
Esto no puede ser verdad, he visto de nuevo a Laura, es una chica encantadora y alegre pero es tímida y eso me gusta más, ¿pero que estás diciendo Carlos? Ya déjate de decir tonterías -me dije hacia mis adentros-
Terminamos de comer y al querer levantarme para llevar mi plato, Laura, lo cogió y lo llevó al fregadero, y después fui a lavarme las manos, Mario me acompañó porque la casa era muy grande. -Mario, ¿qué te toca de famiia Laura y ese pequeñín tan adorable? -sonreí y pregunté, quería que se viera que estaba preguntado por curiosidad-
- Pues Laura y Pablo, el chiquitín, son primos míos, ellos vivían aquí hace 6 años pero por un motivo que no sé, se fueron a vivir a Málaga y se han mudado aquí para rehacer su vida, han tenido unos 6 años muy duros -dijo Mario, a lo que yo me sorprendí-
-Amm... oh.. okey -sonreí y me lavé las manos-
-¿Por qué lo preguntabas? -me preguntó-
-Porque nunca los había visto en esta casa y me ha dado la curiosidad por saberlo -le dije-
Salimos del baño después de lavarnos las manos, nos sentamos todos en el sillón con forma de L, yo en la esquina, en la otra esquina Laura, al lado mío estaba sentado Mario y al lado de su prima Laura, Elena, Mario cogió una película de comedia, no se cuál era pero me daba igual, se estaba tan bien en este sofá.
-Mamá, mamá, ¿se puede quedar a dormir Carlos en casa? Por favor -le rogó Mario a su madre-
-Claro cariño, que se quede, iré a preparar la otra cama para que dentro de media hora se vayan a dormir, son las 2:00 de la mañana -que rápido han pasado estas 5 horas aquí-
Elena y Mario estaban dormidos pero Laura y yo no, no tenía sueño. -¿No tienes sueño Laura? -le pregunté bostezando falsamente-
-No... y ¿tú? -me preguntó-
-Pues no... oye lo siento si te molesté en el centro comercial, no era mi intención chocar contigo ¿me perdonas? -ella asintió y nos estrechamos la mano como pudimos para que sus primos no se despertaran y empezaran a gruñir.
-Chicos, dejad aquí a Mario y a Elena, no van a querer levantarse, iros a vuestras habitaciones, yo dormiré con Pablo y ustedes dormirán en el mismo cuarto, pero en camas separadas, no hagan groserías eh! -ella se sonrojó-
-¡Tita! -le rogó que se callara-
-Está bien, está bien, adiós, estoy cansada -le dió un beso de buenas noches a Laura y se despidió de mí guiñándome el ojo, era encantadora esa mujer, como la quiero-
Estábamos caminando por el pasillo y nos pusimos enfrente de la habitación donde íbamos a dormir. -Pasa Laura -le dije- No pasa tú, eres el invitado -sonrió- Que no pasa tú -le supliqué -Está bieen, paso yo -bufó-
Yo no me puse pijama pero ella se lo tenía que poner.
-Oye... Carlos... ¿puedes mirar hacia la pared? Es que me voy a poner el pijama -me preguntó sonrojada, como amaba esa cara-
-Sí tranquila -me dí la vuelta, no tenía ninguna intención en verla desnuda-
-Ya puedes voltearte, gracias -me agradeció- No hay de que -le guiñé el ojo, a lo que ella rodó los ojos-
-Buenas noches Laura, que descanses -ella me dijo lo mismo y como digo, yo caímos en los brazos del querido señor Morfeo-.
Era muy temprano, habrían pasado aproximadamente cuatro horas desde que nos dormimos, escuché un ruido del otro lado, vi a Laura llorando y gritando, tenía una pesadilla.
-¡No! ¡No puede estar muerto! ¡Tenía que estar allí yo, no él! Tenía novia por dios, lo quiero, es mi hermano... No puede estar muerto... Sois unos estúpidos Noelia y Lucas, unos gilipollas -ella estaba llorando y me levanté veloz de mi cama y la intenté despertar... -Laura, despierta, soy Carlos, has tenido una pesadilla -ella despertó llorando, tenía toda la cara sudando por la pesadilla, era un encanto aún así.
-Ay, lo siento Carlos -se secó las lágrimas- Lo siento por despertarte, ha sido una pesadilla horrible -la abracé y apoyó su cabeza en mi hombro, me sentía agusto así-
-Oye linda, sabes que en cualquier momento que necesites hablar con alguien, cuenta conmigo -ella intentó sonreír y asintío, seguía abrazada a mí-
Poco a poco se iba quedando dormida, estaba más relajada y con cuidado la solté de mi hombro y la dejé en la cama, le dí un beso en la frente y de nuevo me dormí
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Una nueva vida.
Roman pour AdolescentsElla se llama Laura González García, su pelo es castaño y le llega hasta los hombros, tiene los ojos azules fuertes y coloridos, tiene curvas. Es muy impulsiva, extrovertida, divertida, sarcástica y recuerdo, si se meten con algo muy preciado para e...