Secreto

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Ella no entendía porque ese demonio la estaba besando con tanta pasión, él dijo que no sentía nada por ella ya que el era un demonio pero ¿Qué demuestra lo que estaba sucediendo? Ella se separa abruptamente de el con molestia y confución ¿Acaso estaba jugando con ella?¿Se burlaba?¿Que hacía?

-Mabel... lo siento -le miró con algo de dolor, ¿Que mierda está sucediendo?

-Mabel, te estaba llamando y no me haces caso, estoy cansado de que siempre actúes así... -el se quedó pasmado, aún con la mano en la puerta dispuesta a cerrarla- ¿Quién es él?¿Por qué...?¿Qué?

-Hola Pino, hace tiempo que no charlaba contigo -sonrió pero no como siempre lo hacía.

-¡Tío Ford! -retrocedió del temor, sus sospechas dieron frutos pero no pensó que fueran tan pronto- ¡Tío Ford! -se alejó intentando correr.

-No puede estar pasando esto... tu solo te estás sentenciando -bajó la mirada la castaña, lágrimas amenazaban con salir.

-Lo siento, pero yo... -un disparo se olló, el rubio cayó al suelo.

-Esto lo mantendrá quieto y en silencio -dijo la voz seria de Ford- Mabel, aléjate.

La castaña veía al demonio en su forma humana tirado en el suelo, inconsciente. Lloraba en silencio, dirigió su mirada a sus tíos y hermano quién la miraban con preocupación.

-¿Por qué? -dijo en un susurro rasposo- ¿Está muerto?¿Qué le hicieron?

-Mabel, ven -extendió la mano su hermano mellizo.

-No... no..., no hasta que me digan -retrocedió mientras le temblaban las piernas- todo estaba casi bien, estaba cambiando gracias a él, el no hizo ningún daño, a ninguno de nosotros en todo este tiempo y ustedes atacan sin pensar...

Todos la miraban expectantes, sin creer lo que decía, si querer entender.

-...Yo... no sé que sucede, quién era esa mujer... no se nada... no -la chica cayó al suelo, su hermano y tíos corrieron para atraparla antes de que chocara con el suelo. Se había desmayado.

Horas después:

-Mabel, despierta -la castaña escuchaba un susurro familiar- Mabel, solo faltas tu, despierta...

Ella entreabría los ojos con dificultad, veía a su hermano acariciandole la cabeza. Ella se levantó con rapidez pero se detuvo al sentir un dolor punzante.

-Ah... ¿Donde está Bill? -dijo mirando a su hermano mientras se agarraba la frente.

-Está con el tío Ford y Stan, hay una horrible tensión además de que ya volvió a su forma triangular -tragó pesado al recordarlo- Mabel, el tío Ford está muy enojado contigo por no contarle sobre Bill, siente que no confías en nosotros.

-No es eso...

-Pero parece, se que los años en California no fueron para nada buenos... pero al estar aquí creí que podrías mejorar, y no creí mal, pero lo que jamás cruzó por mi mente es que ese demonio tuviera que ver en algo -bajó la mirada.

-Tuvo que ver mucho, desde mis sonrisas hasta mis lágrimas... me hizo tanto bien como mal -me levanté del sofá en donde estaba recostada- Dipper, debo ir con ellos ¿Dónde están?

-En la cocina, ten cuidado con Bill y los regaños del tío, Mabs -sonrió de forma triste.

-No hay problema -se encaminó hacia donde el castaño le había dicho.

El la observó irse, bajó la mirada mientras recordaba lo ocurrido en esos días. Había caído sin siquiera pensarlo, confió de nuevo en el ser equivocado.

Se recostó en el sofá- no pensé que esa mujer nos ocasionara tanto daño en tan poco tiempo... yo creí en ella.

Bueno eso fue todo, espero de que la historia haya sido de su agrado, cuidense byeeee 💖

Volver a ser Mabel PinesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora