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Su abordaje había marchado bien, no había nada extraño en sus maletas ni en ella, a pesar de estar exhausta de tantas revisiones no quería dormir en ninguna hora del vuelo, aún habiendo conducido un buen rato en silencio.

Había dejado a Roseanne a cargo de su mascota, cosa realmente extraña, pero ahora que eran casi amigas Jennie no sentía miedo de que le robase algo de su casa o algo por el estilo, así que le había dejado una copia de la llave a ella y a Lisa, por si acaso.

Se removió en su asiento, había tenido la suerte de tener el del lado de la ventana; a su lado una niña, y al lado de esta estaba su padre.

El vuelo había sido por demás tranquilo, serían solo 11 horas, y la pequeña familia a su lado era amigable, había cruzado algunas palabras con ese hombre acerca de lo hermosa que era Francia y algunas cosas relacionadas, con la niña a veces diciendo algo o sumida jugando en el celular de su padre.

Aunque cada que les miraba en silencio de repente, se sentía miserable, extrañaba a su padre.

¿Y si reencontrarse con JiSoo sólo era un capricho de su abrumadora soledad?

Negó rápidamente con la cabeza, no, JiSoo no era el motivo de su viaje.

¿Y si volver a Francia solo era una excusa para...?

Su pregunta se quedó incompleta, no, no tenía excusas para sus errores esta vez, estaba aterrada, ¿Qué le diría a su padre después de haber desaparecido por siete años? ¿Cómo iría con JiSoo de la nada a decirle "He venido a hacer todo bien esta vez, amor mío"? ¿JiSoo seguiría en Francia siquiera?

Suspiró y bajó su teléfono celular, de igual modo no le estaba prestando atención por estar pensando.

Recuerdos compartidos de ella y su padre pasaban por su cabeza una y otra vez cada vez que escuchaba al hombre y su hija hablar, ¿Por qué le parecía tan complicado volver con su padre? Sépase que él es un buen hombre y que su amor por su hija es incondicional a pesar de todo.

Las veces que le llevaba a la escuela, las caminatas junto a su madre, toda la vida que le había dedicado para hacer de ella una buena persona, todo para que ella le abandonara. ¿Por qué tenía que ser tan codiciosa?

Decidió parar y colocarse su almohada alrededor de su cuello e intentar dormir.

Un ligero movimiento le hizo abrir los ojos finalmente, justo como si estuviera en un tren, Miró desconcertada a sus lados encontrándose con unos pequeños ojos castaños mirándola.

"¿Por qué lloras?"

Una minúscula y aguda voz interrumpió su trance, haciéndola tener que acoplarse de nuevo a la realidad y al hecho de que ya no había marcha atrás.

"No lloraba, solo recordaba algo" Le respondió acomodándose sobre su asiento, ¿Donde estaba su almohada?.

"¿Cómo te llamas?" Le preguntó de nuevo la niña a su lado.

"Jennie, ¿Y tú?" Intentó suavizar su tono de voz, sintiendo que intimidaría a la pobre niña si hablaba como cuando se perdía en sus pensamientos y era sacada de estos abruptamente.

Y tal vez era cierto, tal vez incluso la gente pudiese ver su aura a través de ella, llena de preocupaciones y motivos para huir, tal vez algo de cobardía o miedo, o tal vez sólo esto último, miedo.

Miedo de sí misma, miedo a estar en un avión en un viaje sin sentido, miedo a perder su tiempo de nuevo, miedo a vivir el presente cuando aún se aferraba a su pasado.

¿Merecía su soledad? ¿Merecía sufrir por perderse en su pasado? ¿Merecía siquiera esta oportunidad de regresar?

"¿Por qué vienes sola en el avión?" Le preguntó inocentemente esa aguda voz.

Otro golpe en el sentimentalismo de Jennie.

"Ah. Vine a buscar a alguien" Sonrió, siendo correspondida por la niña de tal vez diez años.

"¡También yo! ¿Es por eso que estabas triste?" Le dijo.

Jennie parpadeó un par de veces, esa niña le recordaba a ella enormemente sin contar el parecido físico que tenía con ella, ¿Qué clase de broma le estaba jugando el Universo? ¿Quería que se diera cuenta de la mierda de persona que era hoy día? Esto debía ser un sueño.

"Sí, no puedo esperar para verla". La niña le dedicó una sonrisa.

"¿Tú también vienes a ver a tu mamá?".

...

Despertó aterrada, no por su sueño sino por su situación.
Con sus sentidos al tope y con el ruido de las personas y el avión arremetiendo contra sus oídos despiadadamente, podía sentir el cuello húmedo y sus manos temblando.

"¿Se encuentra bien Señorita?" Le dijo una sobrecargo.

"Sí, todo bien".

"¿Ya terminaste tu sándwich Anne?" Una grave voz le estremeció.

La niña a su lado asintió animadamente, era totalmente distinta a la de su sueño, tenía cabellos rubios atados en una coleta alta y ojos azules.

Jennie apartó la almohada de alrededor de su cuello y giró su cabeza hacia la ventana nuevamente para no parecer una loca mirando a esa niña con tanta curiosidad.

Las nubes parecían devorar las alas del avión cada vez que este las atravesaba, una vista totalmente conmovedora, parecía sacado de una película.

Decidió ignorar su sueño anterior, esperaba olvidarlo una vez tocase tierra, incluso algunos detalles ya se habían disipado de sus recuerdos, casi todos excepto la pregunta sobre su madre.

Había decidido no volver a esa etapa de su vida otra vez, y así iba a ser, era firme en esa decisión.

Se dejó llevar por el sueño otra vez cuando notó que prácticamente nadie seguía despierto en el avión, sin soñar nada en particular, ni querer despertar.







Canción: Paralyzed - NF (Instrumental)
Espero les haya gustado tanto como a mi me gustó escribirlo.

Paris | JensooDonde viven las historias. Descúbrelo ahora