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"Me encantaría formalizar este acuerdo con usted, Señorita Kim, ¿Le parece vernos mañana?".

"Por supuesto que sí JongIn, sería un gusto colaborar con usted".

Su tono de voz había cambiado una vez había colgado el teléfono.

¿Qué esperaba de toda esta locura?...

¿Que en cuanto JiSoo la viera perdida por la calle en su búsqueda fuera y corriera a abrazarla?. Era una soñadora.

O simplemente no quería despertar y aparecer en California de nuevo, sobre la silla de su oficina, sin tener excusas de por medio por su cobardía y sin haber tomado una decisión como esa, era más fácil equivocarse por culpa de factores externos que cuando uno toma una decisión independientemente, de ahí nace el miedo a perder.

Estaba ahora en su habitación, su padre había salido a trabajar y lo seguiría haciendo a pesar de que Jennie le hubiera dicho que no sería necesario, era un hombre tan terco como ella.

"Lisa, ya la he visto" Dijo en cuanto su segunda llamada fue respondida.

"¿Qué?".

"Ya la he visto, por la calle, iba con un hombre y la prensa la estaba persiguiendo" Le dijo.

"No me sorprende, últimamente quieren hacer de su vida su empleo, ¿No te has pasado por sus redes verdad?".

"No me gustan esas cosas".

"Te lo resumiré: Ella, de viaje por muchas partes, su aparición en programas de TV, y su reciente relación con un actor de su misma compañía".

"Mierda".

"Vocabulario por favor" Le reprendió.

La castaña arrugó su nariz en respuesta y miró hacia un lado repentinamente.

"Tranquila, aún no todo está perdido, tal vez sea una relación planeada para darle fama, justo como te dije, esta en un punto importante en su carrera como para arruinarlo".

"¿Y cómo se supone que le hable si siempre está siendo seguida por la prensa y sus guardaespaldas?" El error de la castaña fue creer que todo sería fácil una vez tocara tierra.

"Simple, amiga mía" Dijo con suficiencia la rubia. "JongIn trabajaba con Dior pero ahora lo hace con Balmain y es colega mío, me contactó preguntando si podrías ser modelo para su marca o como mínimo colaborar con ellos de alguna manera, e imagino que ya te habrá llamado".

Su amiga estaba demente. Y Jennie ahora agradecía esa demencia, tal vez podría ver a JiSoo si iba a las oficinas e intenter hablar con ella.

...

"Será algo sencillo, planeábamos usar su imagen para esta colaboración, junto con una de nuestras mejores modelos, tengo entendido que usted tiene experiencia en el modelaje" Le dijo en un tono de voz sofisticado.

"Sí, creo que aún la tengo".

"Maravilloso, porque no sabíamos que idea tomar si se negaba a modelar" Rió ligeramente. "Entonces supongo que es un acuerdo".

"Por supuesto" Asintió y unieron sus manos.

...

Tercer día en París, y aún seguía extrañándola, más que nunca.

Había decidido buscar a alguna de sus viejas amistades, fallando en el intento, pues la mayoría vivía en otras partes o simplemente parecian haber desaparecido de la faz de la Tierra.

"Felicidades Jennie, te has alejado de la mitad del mundo" Se dijo mientras andaba por la calle, antes de ser interceptada por un par de periodistas.

"¿Es cierto que usted colaborará con Balmain?".

Después de esa pregunta no pasó mucho tiempo hasta que se acercaran más periodistas hacia ella.

Se empezaba a sentir agobiada por tantas preguntas y micrófonos tan cerca, andando más rápido se subió a un taxi y se marchó de la plaza, tal vez necesitaría un guardaespaldas o algo.

Una vez regresó a la casa de su padre, encendió la televisión, apenas eran las siete, el tiempo avanzaba lento en Francia y aún no se acostumbraba a los diferentes horarios, aunque amaba que su vida fuera tan sencilla ahí.

Sin nada que hacer, ni papeles que firmar, tranquila y con tiempo libre, decidió que compraría una cámara, siempre había querido ser fotógrafa después de todo; junto a esa idea se planteó la idea de comprar una casa en Francia y no volver a alejarse por tanto tiempo, pero no fue más que eso, una idea, después de todo no conocía a nadie aquí, solo habían un par de amigas suyas que seguía sin saber dónde estaban, pero decidió guardar todo para más tarde, primero JiSoo, luego el resto de sus pendientes.

El anochecer se hacía presente en Francia, decidió salir a la calle a apreciar un poco su vida.

Se sentó en la acera, y sacó su teléfono celular para tomar una foto, las calles eran hermosas, habían faros de luz que recién habían encendido, todos a la vez, asustándola al principio y maravillándola después.

La noche cayó sin que siquiera se diera cuenta, y ella seguía ahí sentada, mirando a su alrededor, ningún auto pasaba por esas calles, al igual que casi ningún paseante, la mayoría de personas que vivían por ahí eran personas mayores, y esta calle no llevaba ni siquiera a una principal, se sentía feliz de poder encontrar algo de paz después de la tarde y los periodistas pisándole los talones.

Un alboroto del otro lado de la calle pasando la esquina, había llegado hasta oídos de la castaña, quien dudó antes de levantarse y asomarse para averiguar por si misma, pero al final lo terminó haciendo.

Había un grupo de personas encerrando algo, o para ser exactos, periodistas a alguien, apenas y podía distinguir cualquier cosa que intentaban decir entre cámaras, flashes y preguntas.

De entre todos, una familiar cabellera negra se abrió paso, Jennie casi podía oír a su corazón dar un vuelco, otra vez, con solo verla de lejos.

Estaba casi totalmente cubierta, tenía un gorro estilo cubeta negro, un cubre bocas negro, una camiseta blanca de los Beatles y un pants y saco enormes de color negro, sin contar que se había sacado unos lentes de sol apenas había salido de ahí.

En cuanto Jennie la vió no dudó un segundo en huir e intentar regresar a su casa, siendo seguida por unos apresurados pasos.

"¿Jennie?".

Su voz la había detenido, con duda plantada entre cada sílaba. Se giró para responderle por sí misma.

Los periodistas estaban por pasar a través de la esquina cuando Jennie, en un intento de salvar a la pelinegra y a si misma, fue hasta JiSoo y le tomó de la muñeca hasta llevarla dentro de la casa de su padre, esperando no ser vista por todos esas personas que también empezaban a aparecer debido al alboroto.

Y ahora ahí estaban ambas, respirando agitadas, en la sala de la casa, esperando alguna palabra la una de la otra.









Canción: Here without you - 3 Doors Down (Instrumental).
Espero les haya gustado tanto como a mi me gustó escribirlo.

Paris | JensooDonde viven las historias. Descúbrelo ahora