Y ahí se encontraba de nuevo.
A veces los recuerdos pueden ser la peor tortura para una mente vulnerable.
Esa mañana pudo contemplar eso más que nadie, recostada en el espaldar de su cama con sábanas blancas, que hacían relieves en las curvas de su cuerpo, su ventana abierta y el Sol acariciando un lado de su rostro con cortesía.
Duele cuando la persona que te dio los mejores recuerdos se vuelve uno de ellos.
Bufó, se encontraba enojada, no con nadie externo, sino que consigo misma.
Pero su enojo se volvió furia conforme se levantaba y andaba hasta el baño casi lanzando la puerta al abrirla.
Y la furia se convirtió en arrepentimiento en el momento que se sacó su ropa y se quedó quieta un momento con la mirada baja.
Y ese arrepentimiento de pronto era una enorme tristeza que presumía estar bañada en lágrimas, todo en cuanto abrió la llave y el agua caliente empezó a acariciar su piel con suma delicadeza, desapareciendo al precipitar en el suelo.
La necesitaba tan mal que le hacía falta, justo después de haber oído su nombre salir de sus hermosos labios, se sentía indefensa, y después de todo lo que le dijo, aún peor, sentía que había perdido todo lo que de verdad tenía, a pesar de nunca haberlo tenido en primer lugar.
Habló un buen rato con Roseanne después de salir de la ducha, con una toalla enredada en su cuerpo inclinado con cansancio hacia adelante, exaltándose al ver sus clavículas tan remarcadas, parecía haber perdido peso repentinamente o simplemente no se había dado cuenta hasta ahora de eso.
Tendría que ir con JongIn por la tarde, pero se sentía tan mal que la opción de cancelar el acuerdo o por lo menos posponerlo empezaba a ser contemplada a profundidad en su cabeza, al final ella tenía aún más proyectos pendientes en California gracias a Lisa, por rechazar una colaboración no perdería nada más que el tiempo que se vieron en la cafetería.
Pero su bucle divagante fue cortado por su tono de llamada que empezaba a darle mal augurio, era JongIn.
..
"¡JiSoo! ¿Si te dije sobre tu siguiente photoshoot?" Gritó desde el primer piso su manager.
La pelinegra bajó las escaleras apresurada, de nuevo estaba casi totalmente cubierta, no le gustaba vestirse tan extravagante.
"Sí, ¿Cuánto tiempo toma ir hasta el edificio de Balmain?" Agarró un bolso y se lo pasó por sobre la cabeza para ponérselo.
"Casi media hora" Le dijo la manager mientras miraba su teléfono celular y hacía un líne con sus labios.
"Shit" Susurró. "¿JongIn te llamó hoy no?" Volvió a preguntar mientras ahora ambas iban hacia la salida.
"Sí, será con la dueña de D'Kim, ex modelo y CEO de su propia marca, que mujer tan impresionante" Le dijo la de más baja estatura mirando el interior de su mochila.
"Vaya" La descripción le era familiar, pero no le dio más espacio en su cabeza, tenía muchas cosas que hacer ese día.
...
"Creí que la modelo que habían elegido era HyeJin".
"Eso me habían dicho, tuve que mover algunos de sus horarios, me temo que no podrás ir a visitar al señor Kim".
Una voz le gritó en el fondo y volteó al instante.
"¿No podemos mover algo para mañana?". Tenía esperanza de poder hablar con el padre de Jennie aún, sin que Jennie estuviera de por medio, quería verla, pero no se sentía preparada, después de todo ya eran ambas adultas, tal vez su conflicto se solucione y puedan ser amigas como mínimo.
WheeIn la miró y negó.
"Me temo que no, pero haré lo posible por dejarte al menos una hora libre mañana" le sonrió e hizo un puño con su mano, abrazando su cuaderno, JiSoo le sonrió.
"Gracias". Dijo y se fue a donde le llamaban.
Al entrar al set saludó a los presentes con un beso en ambas mejillas y esperó otra orden, hasta ahora lo único que oía eran luces y cables siendo acomodados a la par que JongIn discutía por teléfono.
Le anunciaron que la mujer no había llegado, nunca pudo haberse sentido más feliz, ahora tendría tiempo para poder hacerle a una visita al señor Kim y poder aclarar algunas cosas.
...
No. Debía dejarla ir si las cosas iban a ser así.
Pero si la dejaba ir estaba dejando un enorme vacío y tristeza en ella, sólo en ella misma, pues su trabajo ya apenas y le daba esa satisfacción momentánea para no sentirse tan sola, ahora no quería volver con JiSoo, sino que necesitaba volver con ella, porque la amaba.
Y sí, estaba tan ensimismada en sus propias penas que no consideraba si a JiSoo igual le afectaría su decisión, Jennie parecía una persona independiente tomando decisiones por el bien propio y en ocasiones ajeno cuando solo era alguien aterrado del entorno; que a cualquier mínimo cambio buscaba tener excusas y mejores razones para dejar todo detrás y considerarlo un progreso.
No había ido a la sesión por mera terquedad suya, no quería hacer nada en particular, estaba completamente desmotivada, la belleza de Francia poco le evocaba y sus ideales se estaban tirando por la borda después de que ella los empujara.
Se cubrió lo más que pudo por el cruel frío de la noche e intentó no llamar la atención de la prensa, iba desmaquillada y con cubrebocas junto a un gorrito Baker Boy negro, sus destinos eran alguna tienda de electrónicos donde vendiesen cámaras y alguna de ropa para no sentirse tan desanimada, tal vez le compraría algo a Roseanne y Lisa, o algún detalle a su padre, aunque apenas habían pasado cuatro días desde su llegada quería poder llevarles recuerdos a sus amistades de California.
Acomodó su abrigo y salió a paso tranquilo, suspirando vapor frío por su boca, sumida en su silencio, ignorando las pisadas detrás de ella hasta que cuatro toques a una puerta obligaron a su curiosidad a girarse.
Y apenas fue consciente de todo, Kim JiSoo llamaba a la puerta azul de la casa del señor Kim, había pasado apenas un mes desde su última visita, quería hablar un rato con él sobre todo lo que había estado pasando en su vida y sobretodo, si era consciente del regreso de su hija, a pesar de que su respuesta estuviese a algunos metros de ella.
Se miraron y eventualmente, Jennie apartó su mirada con cuidado de los heridos ojos de la pelinegra, que le observaba con la boca entreabierta, mientras esta seguía ahí, de pie frente a su puerta, sin decir nada y esperando oír algo de la boca de la castaña.
Jennie bajó la mirada y apretó sus labios para darse la vuelta y empezar a caminar para seguir su rumbo, intentando dar a entender que respetaba la decisión de su contraria de no querer verla, y dando el primer paso en no volver definitivamente, justo como la pregunta de JiSoo la noche anterior: "¿Por qué volviste Jennie?".
Sólo que ahora ella misma se preguntaba razones para quedarse en un lugar donde no era querida.
JiSoo se habría quedado perdida mirándola irse si el señor Kim no hubiese abierto la puerta para saludarla e invitarla a pasar, antes de atravesar completamente el umbral, dio un último vistazo y ella había desaparecido. Le habría gustado haberla perdonado esa noche.
Decirle que todo estaba bien, que su inicio había sido un mal paso. Que olvidaran al mundo y se mudaran a alguna parte, dejando su ahora presente detrás, yendo en un auto espacioso con botellas de vino y una cámara en la guantera, viajando por el mundo y enamorándose otra vez.
Estuvieron a punto de decir todo esa noche, pero el tiempo aún no las dejaría.
Canción: I Don't Wanna Love You Anymore - LANY.
Espero les haya gustado tanto como a mi me gustó escribirlo.
ESTÁS LEYENDO
Paris | Jensoo
FanficPara cualquier persona le puede ser demasiado fácil equivocarse durante sus años de adolescente, y Jennie Kim no se salva de este caso en particular. Siete años han pasado desde que dejó a su primer y único amor verdadero en París, ante una hórrida...