Paris | Jensoo

14

Su destino era el bar "Mr. Ambiguos", su ubicación no era exactamente una segura y habían registros de crímenes cometidos por sus calles cercanas, vio que eran ya las dos de la mañana y todo lo que pudo hacer fue suponer lo peor, ¿Cómo estaría?, ¿Le habría hecho algo alguien? ¿Habría intentado regresar en auto y habría tenido un accidente?. Preguntas que solo le causaban ira a la pelinegra al recordar la promesa que había compartido con el Señor Kim.

La fiesta seguía dentro del bar, no estaba segura si entrar era buena idea, pero al final empujó las puertas con una mano y la buscó con la mirada, las luces de colores del lugar y la música que desde afuera era apreciable ahora le estaban intentando dejar sorda y tal vez ciega, los miles de colores de los reflectores bailaban sobre su rostro una y otra vez.

Miró por todos lados mientras caminaba entre las personas y finalmente la encontró, tal vez en la peor situación posible.

Un hombre tal vez algunos años mayor en una esquina vacía del bar le tenía acorralada a la pared mientras le decía cosas extrañas que la hacían sonreír avergonzada, Joy y el resto parecían haber desaparecido ahora que observaba todo con más claridad, malditas locas.

Ando a grandes pasos hasta ellos y logró apartar la mano del hombre de la cintura de la castaña, lo hizo tan bruscamente que incluso le había rasgado con las uñas, el tipo la miró desconcertado y enojado, JiSoo sentía un horrible miedo apropiarse de su cuerpo cuando vio que estaba por levantar la mano.

Y así lo hizo, le dio una bofetada en el rostro, casi un puñetazo, su piel ardía como el fuego en el lugar afectado y la zona no tardó en ponerse roja debido al roce entre la tela y el puño del hombre, tal vez tendría un moretón cerca del ojo gracias al anillo que tenía el tipo, estaba sudando frío mientras Jennie observaba todo sin saber cómo reaccionar, mirando lágrimas en los ojos de su contraria que seguía con su rostro en la dirección a la que la mano del tipo la había mandado.

Con la poca coordinación que le quedaba lo empujó y lo golpeó en la entrepierna, el hombre se lanzó de espaldas contra la pared debido al dolor mientras que Jennie iba hasta él a propinarle un buen golpe en el rostro en compensación, recibiendo algunos empujones y golpes del tipo en cuestión también.

"¡Jennie, para!" Le tomó por la espalda pero la castaña echó su hombro hacia atrás para que no le tocara, JiSoo se sentía como lo peor del universo.

Jennie finalmente paró después de otro par de golpes y se quedó frente al hombre que se estaba cubriendo el rostro con los brazos, bajándolos lentamente y después llamando a seguridad, diciéndole todos los insultos misóginos que a un enfermo se le podrían ocurrir intentando parecer la víctima.

Iba a seguir pero entonces llegó un guardia, JiSoo por un momento creyó que iría contra ellas pero en su lugar tomó al hombre por los brazos y lo empujó para que se fuera, dejando a ambas chicas solas, en un rincón, al parecer el resto del bar apenas y se había enterado de algo, ni siquiera habian intentado verlas, estaban demasiado ocupados en sus asuntos que poco era un desorden ahí como siempre

Jennie se acercó al rostro de JiSoo tambaleante y con honesta preocupación en su mirada, entrecerrando los ojos para poder verla con claridad.

Puso una mano en su mejilla afectada y acarició con cuidado con su pulgar, pronto bajó la mirada, apartó su mano y siseó por lo bajo, mirando ahora entre la gente como el hombre cruzaba la puerta siendo empujado por un guardia.

"Ve a curarte eso" Le dijo para después andar hacia la barra sosteniéndose en la pared.

"No te voy a dejar aquí". Dijo la pelinegra a la espalda de su contraria, esta sólo le miró por encima de su hombro.