Paris | Jensoo

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"La prensa de Francia esta loca estos días" Dijo sin más la pelinegra, bajando su cubrebocas, dándole a Jennie el lujo de ver esos labios tan familiares de forma tan hermosamente peculiar por un momento.

Jennie no sabía que decir, se encontraba casi de espaldas con su contraria.

"Había venido a ver a tu padre" JiSoo volvió a romper el silencio.

Jennie frunció el ceño, ¿Por qué querría ver a su padre?

"¿Por qué?" Le preguntó finalmente.

"¿Por qué volviste Jennie?".

El silencio volvió a hacerse presente entre ellas dos.

"Creí que en todos estos años no te volvería a ver y regresas de la nada" Volvió a decir.

Jennie era incapaz de entender que estaba pasando en ella en esos momentos, había estado cada día esperando verla para poder hablarle, o como mínimo oír su voz, y ahora que la tenía tan cerca las palabras parecían haber sido silenciadas por su propia culpa y vergüenza.

La pelinegra bajó la mirada y apretó sus labios que casi se curvaban hacia abajo, el silencio de la castaña le dolía, parecía como si no quisiera verla.

"Si no quieres verme está bien" Dijo. "Vendré otro día".

Jennie se giró finalmente y le miró, después de siete años estaban cara a cara.

"Te estuve buscando" Confesó.

JiSoo le miró con un gesto de sorpresa.

"El hombre con el que ibas por la calle, ¿De verdad...?".

"¿Por qué lo preguntas tan de repente?" Encaró la más baja.

"¿Tu relación con él es falsa no?".

"¿Por qué supones todo tan fácil? Han pasado años Jennie".

"No estabas sonriendo honestamente" Apartó la mirada de los mordaces ojos negros que le miraban.

JiSoo bufó, estaba enojada, sin saber con exactitud la razón, pero lo estaba.

Y todo partía de el hecho de que Jennie hubiera regresado a su vida cuando todo parecía ir de maravilla, y que ahora le recriminara haber avanzado en su ausencia, ¿Quién se quería creer? Ella fue la que se alejó, la culpa era suya.

"Han pasado años Jennie, ya no estamos en secundaria, ¿Qué quieres que te diga, eh? ¿Que sin importar estos siete años te sigo amando con locura como esa noche en esa habitación?" Se acercó hasta su contraria. "Y todo ¿Para qué? ¿Para que sólo te quedes callada y mires hacia otra parte?".

"Nunca dije algo como eso-"

"Fue un error Jennie" Mintió, y la castaña no tardó en darse cuenta de esto.

"Me estas mintiendo JiSoo".

"¿Qué te hace pensar que sigo siendo la misma persona que hace siete años?".

Jennie guardó silencio otra vez y buscó una distracción que ver en todo el lugar que no fuera JiSoo, le dio la razón con ese sencillo gesto, era una ingenua. Aún lo era.

De nuevo le permitieron al silencio tomar la palabra.

Se miraron, otra vez, en ese momento Jennie pudo solventar sus dudas, sabía que la mirada que ahora le daba JiSoo era honesta, sabía que había miedo en sus ojos, pero también estaban todas las respuestas que quería en ese momento.

"No quiero pelear contigo JiSoo" Le dijo.

"Yo no quería que te fueras" Habían lágrimas bajando por sus mejillas, ni siquiera respondían lo que decía la otra, eran tantas cosas que decir que ni siquiera podían ser respondidas con coherencia. Estaban sobre un salvaje mar, perdidas en su oleaje, intentando salvarse de forma propia sin saber que su único soporte era la otra, pero no lo querían hacer así.

Jennie bajó la mirada, le habría gustado decirle que ella no quería irse, pero ella había tomado esa decisión completamente consciente de todo, qué hipocresía tan grande había cometido.

Sí, le habría gustado mentirle , golpeando su consciencia con la furia de un amante censurado para que mintiera, que dijera lo que ella quería oír y todo se arreglase con un beso en los labios y ambas despertaran.

Todo esto mientras JiSoo también era un terrible enredo emocional, luchando contra sus ganas de ir y besar a la castaña una última vez antes de dejar su propia pesadilla y cruzar la puerta como un punto final a su tragedia.

"Perdóname" Fue lo único que pudo salir de sus labios.

"Eso no resuelve nada Jennie".

"No vine hasta aquí solo a pedir disculpas. Quiero arreglar todo. Hacer las cosas bien" Le miró. "Vine a verte, vine por ti, porque no soportaba todo este tiempo sin saber nada sobre ti sin sentirme mal y querer verte de nuevo aunque yo haya puesto la distancia primero" Confesó.

Aunque no lo quisiera admitir a ojos del mundo, cada día pensaba en JiSoo, en qué estaría haciendo, en dónde estaría, si estaría bien o mal, si también estaba pensando en ella. Habían ocasiones en las que podía incluso oír en eco palabras que nunca había escuchado salir de la boca de esta durante los años que compartieron, a la par con emociones que le golpeaban repentinamente, sin aparente razón, como si a pesar de la distancia supiera qué estaba haciendo y qué estaba sintiendo, compartiendo parte de esto con ella, como si sus almas estuviesen unidas.

"¿Y te tomó siete años tomar un vuelo de regreso?" Alzó la voz.

Jennie asintió y desvió la mirada, su coraje había callado, ahora sólo quería echarse a llorar y que le dijeran que todo estaba bien.

"Siempre esperaba que me dijeras cómo te sentías conmigo, pero siempre era yo la de las palabras, ¿Como crees que me sentí cuando me enteré de que te habías ido sin siquiera despedirte?" Sollozó. "Me sentí como la peor persona del mundo, como si no fuera suficiente, mientras tú tenías éxito en California yo me quedé aquí, esperándote durante años, viniendo a esta casa esperando que tu ida fuera momentánea o una pesadilla y que de repente te viera aquí de pie". Y justo como  había dicho, ahora la tenía frente a ella, de pie, de la peor forma posible.

Jennie bufó, estaba furiosa consigo misma en ese momento.

"Irme siempre fue mi error JiSoo".

"Duele que hasta ahora te des cuenta" Le dijo y suspiró pesadamente, apartándose algunos pasos, ahora cerca de la puerta.

Sacó su gorra y echó su cabello hacia atrás para después volvérsela a colocar, sin apartar la mirada de la castaña que no se dignaba a mentirle, siempre había sido honesta con ella y con como se sentía, las palabras nunca habían sido cosa suya, sólo sus acciones demostraban quién era realmente.

Como aquella noche, cuando fue su primer beso provocado por la castaña que era incapaz de poderle decir un "Te amo" a la pelinegra sin sentir miedo, y hasta tal vez vergüenza,  mientras que esta acostumbraba soltar esas palabras hacia ella con suma facilidad, todo lo que le hacía pensar que nada era mutuo.

"Te amo JiSoo, todo este tiempo lo hice" La miró fijamente a los ojos, teniendo los propios a punto de llorar.

Esta vez, sin filtro, se sinceró frente a la mujer que ahora le miraba con total sorpresa.

Sin una palabra más, JiSoo abrió la puerta y se fue con dos hombres que habían estado esperando en un auto que incluso ella desconocía, al parecer había salido sin permiso.

Y de nuevo, silencio.

Jennie lloraba desconsoladamente, recargada contra la pared, cubriendo su rostro, avergonzada de si misma, y asustada de perder al amor de su vida cuando creía por fin haberlo encontrado.

Canción: Silhouette - Aquilo (Instrumental).
Espero les haya gustado este capítulo tanto como a mi me gustó escribirlo.

Gracias por los 100 votos <3