➥ Stranger Things 3 ¦ Will y tú

➯ Capítulo 09彡

Lizzie

El camino se me estaba haciendo largo. Había logrado que el ruso dejara de lastimarme sujetándome del cuello como lo hacía. Ahora ya sólo caminaba junto a él, me agarraba del brazo "por prevención" a salir corriendo. Pero, vamos, ¿Qué estúpida correría sabiendo que le están apuntando con un arma?

Las demás personas que nos encontrábamos sólo nos miraban... Corrijo, me miraban. Pues se preguntaban el por qué su compañero de trabajo tenía amenazada a una simple niña.

Juré haber escuchado el grito de mi hermano, por lo que me detuve. Pero, inmediatamente, el ruso puso más presión en mi brazo y me empezó a jalar para seguir caminando.

"Esto es maltrato. Te voy a denunciar."
"Steve te va a partir la maizer cuando se entere."
"Ya quita tu asquerosa sucia mano de mí"

Todo aquello lo decía en mi mente.

Después de un rato nos detuvimos frente a una puerta. El hombre me soltó para poder abrir pero aún me seguía apuntando con su otra mano.
Al abrir la puerta volvió a tomar bruscamente mi brazo y se metió conmigo, pero sin cerrar la puerta aún.

Parecía ser un cuarto médico, pero muy extraño. Habían unas mesas de metal donde sobre ellas se encontraban tijeras, navajas, jeringas y todas esas cosas de un doctor.
Miré dichas mesitas con miedo.

A los otros rincones del lugar habían más cosas, pero a decir verdad... No sabría explicarlas. Creo que eran típicas cosas que almacenarían los rusos para su protección o... Experimentos.

Me sentó sobre una silla que se encontraba distanciada de cualquier cosa. Posteriormente, me empezó a atar las manos detrás de la silla. Luego procedió a hacer lo mismo con mis pies. Y, por si fuera poco, comenzó a atarme totalmente a la silla con una cuerda más resistente que las otras de mis manos y pies.

Esto me traía malos recuerdos. Sí, me hacía recordar la vez que el doctor Brenner me había secuestrado para su beneficio con Once. Al menos esa vez ya sabía a qué se debía mi "secuestro", pero en estos momentos estaba en blanco. No había hecho nada malo para que me trataran así. Es decir, me habían infiltrado en sus instalaciones pero... También Dustin y Érica. ¿Por qué no nos llevó a los tres? ¿Estará planeando algo?

Tomó una venda y la empezó a colocar sobre mi boca hasta amarrarla. ¿Esto era en serio? Como sea no podía hablar, no sé ruso.

Él salió del cuarto, pero nuevamente no cerró. Cortos segundos después entró otro hombre, el cual sí cerró la puerta por detrás de él.
Dió unos pocos pasos para acercase a mí, seguido de eso se agachó un poco para estar mejor a mi altura.

-Hola.

Lo miré algo sorprendida. Pues, hablaba mi mismo idioma.

-¿Sabes por qué estás aquí?

¿En serio planeaba que le respondiera? Estúpido, tenía mi boca cubierta. Lo único que iba a obtener de mí era una mirada amenazante.

-Te lo haré entender.-Dijo mientras dejaba de agacharse.-Mi compañero, el que acaba de salir, dijo que lo estabas vigilando un día en el centro comercial.