Donde Hyunjin es un idol famoso con una carrera muy reciente, la cual pende de un hilo de irse a la basura.
O donde Dispatch revela pruebas de la homosexualidad de Hwang.
También donde Yang Rosé se vuelve loca ante esos rumores y arrastra consigo a...
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Esa mañana en específico Jeongin se había levantado más temprano de lo común, emocionado de que las vacaciones hayan terminado y tenga que volver a la escuela y dejar su casa.
Mientras terminaba de aplicarse la base en su rostro, y un bálsamo de cereza en los labios se miró contento del resultado en el espejo. Se veía bonito, él sabía que lo era.
Aunque no era un secreto para su familia que solía maquillarse un poco, su padre todavía rechazaba la idea, siendo un poco ilógico ya que tenía más que clara y aceptada su homosexualidad.
Él no iba a perder el tiempo escondiéndose y perdiéndose la diversión de ser libre, si sus padres no lo hubiesen aceptado, recurrir a ese hombre en cuestión que le paga por favores que el encantado hacía era una opción.
A sus 18 años era tan jodidamente adicto al placer, que si sus padres se enterarán, un ataque al corazón seguro. Era un adorable chico inocente y de bonitas sonrisas puras a sus ojos, y no tenía planeado decirles nunca de su vida privada.
"El desayuno está listo, date prisa" su mamá avisó del otro lado de la puerta.
"Ya voy mamá" grita agarrando su mochila y acomodándose un poco su cabello, y por que no, guiñándose el ojo a sí mismo.
Altanero.
Y tan temprano comenzó a escuchar los alaridos de su hermana Rosé en su cuarto reclamando a los medios por sus noticias falsas que solían publicar para dañar la imagen de los idols, aunque solamente lo hacía por su ídolo; Hwang Hwang Hyunjin.
Él chico era como fuego, caliente, peligroso y a la vez atrayente, no podía negarlo, su talento tampoco, pero no le atraía como idol, como persona, un grande y llamativo como anuncio de espectáculo, SÍ.
Bufo negando cuando los gritos no paraban, escuchándose incluso en el comedor.
"¿Qué pasó esta vez?" preguntó a sus padres comenzando a degustar su delicioso desayuno.
Amaba a su madre.
"Ya sabes, esta completamente loca por ese chico que es cantante" comienza su madre.
"Y parece que esa página que acosa a los ídolos publico una nota acerca de la aparente homosexualidad de Hwang" terminó su padre sin quitar sus ojos del periódico. "Realmente no comprendo porqué de acosar tanto a esos pobres chicos, si fuera ellos dejaría mi carrera y los mandaría a todos a volar."
"Sabes que muchos de ellos están cumpliendo sus sueños de ser famosos y de que la gente los reconozca."
"Papá baja la voz, Rosé noona va a escucharlos y repetirá el discurso de como ellos deben y aguantan todos esos rumores de ellos" Jeongin rueda sus ojos y termina su desayuno, agradece a su madre y lava lo usado.
"¡Mamá, papá, necesitó un favor!" grito su hermana entrando como loca en el comedor. "¡Ustedes no me dejan ir sola y no tengo con quién más ir!"
