Capítulo 7.

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*KOOK POV*


Notaba la adrenalina recorriendo todo mi cuerpo, como una sacudida de electricidad. Llevábamos corriendo unos diez minutos, ni siquiera nos habíamos parado a comprobar si los Hounds realmente nos seguían, estábamos más centrados en llegar a la zona Riser, allí estaríamos a salvo. Nos metíamos por callejuelas que conocíamos como la palma de nuestra mano, buscando la vieja tienda de artificios, cerrada por Fanthom cuando comenzó la revolución, era nuestra entrada a los túneles y de estos, a casa.


Iba a dar un último sprint para entrar por la puerta trasera cuando algo me frenó, haciéndome girar, no recordaba que tenía cogida de la mano a May, aquella chica era tan ligera que con la emoción del momento ni noté que iba detrás de mi. La miré cuando se paró, colocando las manos sobre sus rodillas para coger aire, se la veía realmente exhausta, sus mejillas estaban vivamente coloradas y brillaban con algo de sudor, debía reconocer que hasta con esa pinta de estar a punto de un paro cardíaco, la estirada era guapa.


-No te pares ahora, ya estamos en la puerta... -cogí aire y me acerqué para volver a tomar su mano, a lo que ella apartó el brazo, mirándome con cara de pocos amigos, todavía recomponiéndose de la carrera.


-¿Por qué lo has hecho? -se levantó del todo y se acercó a hacia mi, hasta tenerme justo en frente. La miré extrañado sin entender muy bien a qué se refería.


-¿Hecho el qué?-


-¡Golpearlo! -alzó la voz y me dedicó una mirada asesina tan típica suya.


-Estás de coña ¿no May? -tenía que ser una broma, acababa de salvarle el culo, otra vez- Te recuerdo que el primero que se puso tonto fue "tu novio" agarrándote de malas maneras e insultándote -escupí las palabras de mi boca, ¿cómo podía ser tan desagradecida?.-¡No es mi novio! -podía notar como apretaba los dientes- ¿No tienes otra forma de solucionar las cosas que liándote a puñetazos?


Lo cierto era que no, era un Riser, estábamos acostumbrados a luchar hasta el final con tal de no dejar que nos pisaran y si a eso le sumabas que era una persona temperamental, de mecha corta, ya tenías la pelea montada. Aún así ese Thomas se lo merecía, había tratado a May como si fuera basura, se había puesto agresivo con ella y encima no sabía distinguir un chino de un coreano, era rematadamente tonto. Seguramente si no le hubiera pegado yo, alguien más lo habría hecho aquella noche, tenía cara de querer recibir un puñetazo en cualquier momento.Escuché como los demás se acercaban despacio, queriéndose enterar de lo que estaba ocurriendo, pero sin entrometerse, después de todo, la discusión en ese momento era entre May y yo, aún así mis amigos no podía evitar ser unos cotillas de mierda en la mayoría de las ocasiones.


-Cuando un estúpido Redcoat se me pone delante, no -conforme acabé de decirlo pude darme cuenta de la cara que puso, me había expresado mal y la había cagado. Con ella estaba teniendo una paciencia infinita, a pesar de habernos visto únicamente dos veces, pero en ese momento no podía reprimirme más.


-Te recuerdo que ese es mi rango Kook, ¿también me golpearías si te enfadara? -se veía algo dolida por mi comentario, tal vez no debí decir aquello, pero no entendía la situación, ni a ella, sólo había intentado protegerla, como su hermana me pidió.


Me quedé pensativo, en parte estaba empezando a ponerme furioso, Keira quería que me acercara a May, que la cuidara, pero no era tan fácil como se creía, y más cuando la pelirroja era una completa testaruda. Le di la espalda, girándome hacia los chicos, los cuales se lanzaban miradas entre ellos, igual de sorprendidos que yo con esa estúpida pelea.


-Puedes volver corriendo a sus brazos si quieres...estás demostrando ser igual de idiota que tu novio, o lo que mierdas sea...maldita desagradecida -caminé con decisión hacia la puerta trasera de la tienda de artificio, esperando que los demás me siguieran, pero seguían ahí, parados como pasmarotes -Vamos, la Redcoat se queda aquí -les ordené, haciendo que se giraran.


-¡Eres un idiota Kook! -la voz de May resonó en el pequeño callejón, provocando que soltara una pequeña sonrisa, era exactamente igual que su hermana, esperaba que algún día también abriera los ojos y tomara la misma decisión que ella.


El trayecto durante los túneles transcurrió la mayor parte en silencio, eso me molestaba, sólo conseguía que le diera vueltas a la cabeza, en parte arrepentido por las duras palabras que le había dedicado a May y por otra terriblemente enfadado por su reacción.


-¿Se puede saber qué os pasa? No habéis soltado ni una sola palabra desde que hemos entrado -quise saber soltando un largo suspiro de molestia.


-Creo que a Maxx y a Keira no les va a gustar nada lo que ha pasado esta noche -contestó Felix con desaprobación- Podían habernos pillado, y encima hemos puesto en peligro a la hermana de...-


-¿Qué más os da la chica? Ni que fuera uno de los nuestros, joder -alcé más la voz, empezando a notar como la rabia poco a poco se hacía conmigo, al parecer esa noche nadie estaba de mi parte.


-Eh, relájate Jeon -contestó Kim provocando que perdiera los nervios del todo al llamarme por mi apellido. Me volví hacia ellos con cara de pocos amigos y caminé en dirección contraria, dándole un golpe en el hombro al pasar por su lado- ¿Dónde diablos vas? -preguntó girándose y alzando un poco la voz cuando ya estaba a unos metros de distancia.


-¡Lejos de vosotros, sois unos putos pesados! -aceleré el paso y los perdí volviendo por el camino que acabábamos de hacer.



Risers. // JK Fanfic.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora