Capítulo 12.

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Arrugué la nariz soltando un gruñido cuando el cuarto chupito de whisky rozó mi garganta, provocándome un leve ardor en la garganta y por todo lo que tocaba a su paso. Como la última vez que estuvimos en el Kanpai, la noche se estaba alargando, ya llevábamos unas cuantas cervezas y los chupitos cada vez empezaban a pasarme más ligeros, me encontraba en un estado de felicidad plena. Cara y yo seguíamos acompañadas por su, ya oficial, novio Erick, Kim y Felix, los cuales habían bebido mucho más que nosotras pero parecían más acostumbrados al alcohol de lo que hubiéramos imaginado, era imposible tumbarlos.

El muchacho del pelo fuego y la bandana me rodeo por el hombro con su brazo, acercándome a él entre risas mientras Felix pedía otra cerveza a la camarera. Mi amiga, por otra parte, no paraba de reír con Erick, el cual estaba emocionadísimo contándole una de sus anécdotas, ver a Cara mirar con aquella devoción al muchacho conseguía derretirme el corazón y olvidar por un momento que los que nos encontrábamos esa noche en el Kanpai pertenecíamos a rangos distintos.

-May, tengo que admitir que pensé que con el segundo chupito caerías redonda -me confesó Kim mientras se apoyaba con su otro brazo en la barra. El local se había llenado en cuestión de una hora y poco y cada vez quedaba menos sitio para sentarse y era más difícil hablar sin la necesidad de gritar, debido al elevado sonido de la música.

-Tengo más aguante del que parece -le contesté golpeando su pecho con el dedo índice con diversión, provocando que este alzara una ceja y sus rasgados y castaños ojos me analizaran.

-¿En todos los sentidos? -preguntó con picardía, a lo que contesté zafándome de su brazo y empujándolo soltando un suspiro de indignación.

-Por favor Taehyung, no seas enfermo -reí alcanzando la cerveza que había dejado en la barra y dándole un trago negando con la cabeza.

-Me encanta que sepas decir mi nombre -se carcajeó acercándose un poco hacia mi oído para que lo entendiera, le clavé el codo en las costillas, fingiendo una falsa mirada de enfado, a lo que él levantó las manos a modo de rendición- Eres de ese diez por ciento de gente que conozco que lo sabe decir, no pienses otras cosas, enferma -me guiño el ojo a la vez que se humedecía los labios con la lengua rápidamente. Ese maldito pelirojo sabía que era atractivo y sabía como usar sus encantos, no debía tener problema con las chicas.

-Eres un flipado, Kim Taehyung -me mordí el labio negando con la cabeza, divertida, provocando que este se llevara una mano al pecho, haciendo como si se derritiera al escuchar como lo llamaba por su nombre completo.

-Lo sé -volvió a guiñarme un ojo, con una sonrisa socarrona, me quitó la cerveza de los labios y le dio un largo sorbo, acabándola- Debería pedirte otro chupito, estás más simpática cuando bebes.

-Si crees que vas a emborracharme para luego aprovecharte de mi, la llevas clara -vi como comenzaba a reír hasta que su vista fue a parar hacia un punto detrás mío, su expresión se tornó en una mezcla de seriedad y pánico en cuestión de segundos, era como si hubiera visto un fantasma.

Me giré instintivamente para ver qué o quien había provocado que Kim cambiara tan de repente cuando me topé de narices con el pecho de alguien. Froté mi tabique nasal con dos dedos, algo dolorida, y me alejé un paso para observar con quien había chocado. Sus pies calzaban unas negras y pesadas Dr. Martens, unos pantalones tejanos de color oscuro y rajados por las rodillas se ceñían a sus atléticas piernas, alcé algo más la vista, una larga camiseta negra y una bomber del mismo color cubrían su torso ancho, casi no me hacía falta seguír observando para saber de quien se trataba. Sus rasgados y oscuros ojos me miraron con fiereza, asomando por su castaño y despeinado flequillo, podía notar como tenía los dientes apretados, por la forma en la que su definida mandíbula se ensanchaba, tenía cara de pocos amigos.

Risers. // JK Fanfic.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora