Capítulo 13.

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-De verdad que puedo volver sola a casa...-gruñí tambaleándome mientras el brazo firme de Kook me tenía sujeta por la cintura, evitando que cayera al suelo debido a la borrachera que llevaba encima.

-May, te has subido con Cara a bailar a la barra y te has quedado encajada en una de lámparas del techo, casi te quedas encerrada en el baño de los chicos creyendo que era el de las chicas y has pedido que te pusieran "God Save The Queen" por lo menos once jodidas veces, así que no, no puedes volver sola a casa -me regañó el moreno que parecía ser el único sobrio del grupo.

Eran las cuatro de la mañana, y habíamos cerrado, literalmente, el Kanpai, en la puerta se juntaban varios grupos de personas mientras acababan sus últimas cervezas y charlaban, o al menos, trataban de formar una frase con sentido. Taehyung y Felix se sujetaban por los hombros, tarareando una canción en un idioma que en ese momento no pude descifrar pero que supuse que sería coreano, mientras Cara y Erick se dedicaban arrumacos juntando sus frentes y admirándose como si fuera a ser la última vez que se veían, en su caso la borrachera se camuflaba con sus tiernas, y cursis, demostraciones de amor.

-El amor ajeno me da alergia -suspiré colocando mi melena hacia un lado con dificultad, apoyando mi cabeza en el hombro de Kook.

-Necesitas urgentemente dormir la mona, te acompañaré a casa -añadió Kook entre risas. Negué con la cabeza, cerrando los ojos y aplastando mi cara en su pecho- No pienso dejarte ir sola May...

-Si te pillan estás muerto -musité recargando mi peso sobre él, notando como cada vez estaba más mareada y cansada. A pesar de la borrachera, lo decía absolutamente en serio, prefería dormir en la calle con tal de evitar que alguien lo encontrara y acabara en El Tribunal.

-No me pillaran, no es la primera vez que paseo por Londres ¿sabes? -Kook me incorporó un poco, tratando de mantenerme de pie. Me eché el pelo hacía atrás y lo miré molesta, si ya de por sí era cabezota, con alcohol en el cuerpo era el doble.

-He dicho que no Kook, puedo dormir en cassssa de Cara -dije hablando con dificultad para después girarme a mirar a mi amiga, la cual estaba ocupada en un pasional y calenturiento beso, hice una leve mueca de asco y volví a mirarlo- Mejor allí no...Pero en cualquier banco del parque puedo dormir perfectamente -expliqué como si esa idea fuera la más maravillosa del mundo, cruzándome de brazos y notando como al soltarme del agarre de Kook el cuerpo volvía a fallarme.

-Joder, si no me vas a dejar que te acompañe a casa, entonces te llevaré a la mía -noté como me resbalaba un poco al escuchar aquello, me agarré con fuerza a sus brazos abriendo mucho los ojos- No voy a dejarte durmiendo en un puto banco del parque May -pude ver como me miraba sonriendo de lado.

En esos momentos, después de todos los acercamientos que habíamos tenido Kook y yo aquella noche, la idea de pasar la noche en su casa se me hacía entre una locura y a su vez la cosa más excitante y que más deseaba en ese momento, ni siquiera había vuelto a pensar en que él era un Riser y que seguramente tuviera que ir a su zona. El alcohol se apoderaba de mi rápidamente, deseaba no vomitar por los nervios. Mi yo borracha y calenturienta empezó a imaginar a toda velocidad la de cosas que podrían pasar con los dos juntos, una misma casa, misma habitación, misma cama, casi agradecí tener la cara roja por todo lo que había bebido, así no se notaría tanto que estaba empezando a avergonzarme por mis lascivos pensamientos.

-¿T-tu cassa? No creo que sssea buena idea...-fruncí el ceño hipando ridículamente después.

-Ya, pero cómo no se nos ocurren más ideas y ahora mismo la única persona de aquí que tiene capacidad de pensar soy yo, te vienes conmigo -y dicho esto me alzó con facilidad entre sus brazos, quedando abrazada a su cuello, notándome cada vez más cansada.

Risers. // JK Fanfic.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora