Relato 18

1.4K 69 16
                                    

Relato por Mangel:

  Vale, decidimoh salih a paseah y terminamoh comiendo comida chatarra otra vez. No sé cual eh nuehtro afán de comeh así, debe seh que extraño mucho la comia’ de mi madre, o que de verdah me ehtaba hahtando. Pero que me da iguah, estaba con Rubiuh y eh lo que máh me impohtaba ahora. Comimoh bahtante y dehpuéh de eso, caminamos a una plaza.

-Rubiuh, ¿noh sentamoh en esa plaza?- No contehtaba.- ¿Rubiuh?- Seguía sin rehpondeh. ¡ME CAGO EN TOH! Hahta que al fin rehpondió, pero no lo que yo quería ehcuchah.

-¿Dijiste algo Mangel?- Ya me ehtaba enojando, pero no lo hice, porque hoy ehtaba decidio’ a haceh a Rubiuh mi pareja. Me abrazó y me besó la mejilla. Me hizo sonrojah un poco. ¡Jodeh, como amaba a ese tío!

  Noh sentamos en el suelo, y llegaron unah tíah muy majah, pidiéndonoh fotoh y esah cosah. Por supuehto que aceptamoh, pero de sabeh que Rubiuh se iba a dejah seducih por una tía para “hablah en “privao’” mejoh no. Lo ehperé de brazoh cruzao’ hahta que, al fin, tehminó de hablar con la tía esa. Se veía nehvioso.

-Te vi hablando con esa tía. Muy cerca.- Lo tomé con ambah manoh, acercándolo a mí. Me daba iguah que la gente noh viese así.- Ereh solamente mío Rubiuh, y nadie te arrebatará de mi lao’.- Quería besahlo, pero era mejoh vengahme.- Ahora, como venganza por hacehme pensah que le coqueteabah a esa tía…- Y comencé a hacehle cohquilla. Empezó a reíh como nunca. Me empezó a haceh cohquilla también y no aguanté el reíh como retardao’. Ya noh cansamoh de ehto y noh acohtamoh en el céhped. Noh miramos. Me embobé en esa mirada, en esoh ojoh verdeh que me fascinan. Quería tenehlo siempre conmigo, a mi lao’.

-Tengo algo que decihte Rubiuh…- Comencé a acariciahle la mejilla. Me rehpondió un poco nehvioso. Se veía tan mono así.- Puede que sea muy pronto, pero te quiero mucho y quiero que seah mi pareja. Rubén, ¿quiereh seh mi novio?- Mi corazón latía como nunca. Tenía miedo de que me rechazara, pero quería sabeh si él quería o no. Choqué nuehtrah frenteh y empecé a sonreíh. A lo que me acarició la mejilla.

-Miguel… Acepto. Prometo hacerte feliz. Y otra cosa, yo te amo.-Y cerramoh el pacto con un dulce beso, que sentí que duró horah.

  Ya iba siendo tahde, así que decidimoh irnoh a casa. Miré el móvil: 20 de Junio del 2013. Jamáh se me olvidará ehta hermosa fecha. Mientrah caminábamoh, ibamoh haciendo cualquieh ehtupidez como siempre. La gente noh miraba en plan: “Que niños máh tontos.”. Me causaba gracia. Llegamoh a casa, y la gata noh recibió como siempre, pasando en medio de nuehtrah piernah. Fui al salón y me senté pah’ jugah un poco a la Play, y Rubiuh se sienta a mi lao’, para luego recohtarse y apoyah su cabeza en mih piernah. Lo miré y me sonrió.

-Quiero jugar contigo. ¿Puedo?- Vale, puso su carita de niño pequeño. Cómo decihle que no a esa carita tan tiehna.

-Bueno, pero dehpuéh a dormih, ¿vale?

-¡Ust!- Le pasé un mando y jugamoh. La verdah no sabía que ehtah así con Rubiuh iba a seh tan… Genial. Habían veceh que lo besaba pah que pehdiera, otrah veceh me tapaba la cara, y cosah así.

-Rubiuh, ahora que me acuehdo, te tieneh que tomah la pahtilla, que no te la has tomao’ dehde que la compramoh. Anda, arriba.- Traté de levantahlo, pero él no quería.

-¡Odio tomar pastillas Mangel! Odio los medicamentos.

-Entonceh grabah así, toh’ dañao’, a veh como se ponen tuh suscriptoreh.- Lo miré con cara de “hazlo o te obligo”.

-… Vaaale. Pero que conste que lo hago por ti y por ellos.- Se levantó, me besó y me llevó de la mano a la cocina. Tomó el pahtillero, con una cara de ahco que me dio mucha risa.- ¿Enserio tengo que hacer esto?- Asentí con la cabeza, cruzándome de brazoh y riendo.- ¡No te rías Mangel! No es gracioso…- Sacó una pahtilla, llenó un vaso con agua y, muy dudoso, metió el medicamento en su boca y se tomó de un trago el agua. Dejó el vaso a un lao’ y me miró.- No volveré a hacer esta mierda jamás…- Volví a reíh.

-Vah a teneh que hacehlo si quiereh mejorarte. Y si no lo haceh, soy capaz de obligahte.- Lo abracé por la cintura y lo apegué mucho a mi. Me agarró la nuca, acercando su cara contra la mía.

-Por ti todo mi Mahe.

Fanfic: "¿Realmente sólo amistad?" [Rubelangel]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora