Fanfic: "¿Realmente sólo amistad?" [Rubelangel]

Relato 24

Relato por Mangel:

  Dehpuéh de leeh la nota, me dediqué a jugah un poco de GTA V con Alexby pah’ nuehtra serie de loh “Polloh Primoh”. Noh conectamoh a Skype e hicimoh el lío pah podeh grabah, pero anteh de empezah…

-¿Es cierto eso que dijisteis vosotros ayer?- Y el tema que menoh quería hablah ahora.

-Sí, eh ciehto… ¿Por?

-Pues nada, tú tranquilo. Es que… Encontré un poco irrespetuoso ese chico o chica que publico esa foto vuestra. De verdad lo lamento, sé que queríais tomarse su tiempo  para estar más seguros de hablar este tema tanto con nosotros, y luego hacerlo público.

-No tieneh de qué dihculpahte Alex, pero graciah.- Se me vino una pequeña sonrisa al sabeh que él noh comprendía.

-Ya sabes que puedes confiar en mi Mengel.- Y Empezamoh a reíh.

-Lo sé Alexba, lo sé.- Y dehpuéh de ehto, Empezamoh a grabah una divehtia’ pahtia’ del juego.

  Ya habíamoh grabao’ mucho por hoy, asique tehminamoh la partia’ y decidimoh que él subiría ese vídeo. Noh dehpedimoh y se fue a editah. Vi la hora y pensé que Rubiuh llegaría en cualquieh momento, por lo que me fui a cocinah unoh fideoh marvaoh’. Ya iban a seh lah 2 de la tahde y Rubiuh aún no llegaba. ¿Le habrá pasao’ algo? Tehminé de cocinah y me fui a sentah al salón. ¡Jodeh! Hace un caloh que te cagah entero. En eso, ehcuché una voz.

-¡He llegado!- Me levanté enseguia’ pah’ abrazahlo y saludahle.

-¡Rubiuh! Te he extrañao’ coño, ¿Por qué tahdahte tanto?

-P-Porque, pasé a comprar unos parlantes. Mira.- Sonó algo nehvioso, pero no le tomé mucha impohtancia. Debe seh el cómo le recibí o algo así. Me mohtró la bolsa y vi los pahlanteh nuevo.

-Se ven bien. ¿Tieneh hambre?

-¡Oh sí! Ya me comía un brazo, enserio.- Reí y camine a la cocina, pah’ veh si se habían enfriao’ o no loh fideoh. - ¿Qué preparaste?

-Unoh fideoh marvaoh’. ¿Ehtá bien así?

-¡Claro! Huele delicioso. Iré a dejar los parlantes y ya vengo, ¿sí?- Se iba a ir. No sin anteh…

-Ehpera.- Lo abracé poh la cintura y le di un beso. Como lo extrañaba a ehte ioputa. Me abrazó por el cuello, pero al instante se separó, como asuhtao’ o yo que sé.- ¿Pasa algo?

-E-Es que estoy que me meo, lo siento.- Y se fue corriendo al baño. La vehda’ es que no sabía qué cojoneh le pasaba pero no le tomé mucha impohtancia, que debe seh el hambre. Fui a buhcah loh plato y lah demás cosas y lah llevé al salón pah’ por fin comeh. Luego llegó Rubiuh, que se veía un poco máh tranquilo, se sentó y comenzamoh a comeh. Aún Rubiuh no me decía con quién había salio’. ¿Será que se la olvidao’? Tampoco sabía si preguntahle o no, o sea, somoh pareja y toh’ pero tampoco era que me sintiese celoso. Pero de toah’ fohmh quería sabeh.

-¿Y con quién te juntahte?- Al ehcuchah eso, se ahogó con el jugo y empezó a toseh.- ¡Rubiuh! ¿Ehtáh bien?- Me acehqué a él, pah’ ayudahle.

-S-Sí… S-Sólo que creo que me estoy resfriando…- Se empezó a secah la cara con una sehvilleta y empezó a sonah mu móvil.

-Voy a hablah y vuelvo.- Me levanté y salí al pasillo.- ¿Aló?

-Hola hijo.- Era mi madre.

-Hola mamá, ¿cómo ehtán lah cosah por allá?

-Pues bien. Te llamaba para preguntarte si podrías cuidar de Isa el fin de semana, Lorena se va a la casa de una amiga, asique de ella no te preocupes.

-¿Ha pasao’ algo?- me ehtaba preocupando un poco. ¿Será algo grave?

-No nada, sólo que debo acompañar a tu padre a una reunión de trabajo fuera de la ciudad. ¿Nos harías ese favor?

-Claro, no hay problema.-Dehpuéh de eso, Hablamoh un poco máh de cómo ehtaban lah cosa en Madrid.

-Que bien que esté todo tranquilo por allá.

-Sí… M-Mamá… E-Ehtoy en una relación.- Claro, mi madre nunca se enteró de lo mío con Sofía. No era por la falta de confianza, sino que nunca salió el tema.

-¿Enserio hijo? Qué lindo. ¿Y cómo se llama?

-S-Se llama… Rubén…- Mih nehvioh ehtaban a floh de piel. Jodeh…

-¿Hablas de Rubén, tu mejor amigo? Woh…

-Ehpero que no me juzgueh, por favoh.

-No hijo, me alegra que sea alguien a quien le tienes mucha confianza y que te hace feliz. Sólo espero que sean felices así como están. No hagan caso a lo que las otras personas digan, ¿sí? Bueno Miguel, te debo dejar. Cuídate mucho hijo. Te quiero.

-Yo también te quiero mamá.

-¡Mis saludos a Rubén!- Y colgó la llamah’. Por lo menoh mi madre se lo ha tomao’ bien el tema ehte de mi relación con Rubiuh. Volví al salón y a Rubiuh con cara muy pensativa.

-¿Rubiuh?- Y se exaltó. No sé qué cojoneh le ha ehtao’ pasando últimamente.

-¡Oh! M-Mangel… L-Lo siento, quedé en la nada.- Me senté en mi silla y lo miré.

-Le he contao’ a mi madre lo nuehtro…- Abrió loh ojoh en pah. Parecía como si se le fuesen a salih y rodarían por el suelo.

-¿Y qué dijo al respecto?- Sonó nehvioso. Era de ehperahse.

-Le ha parecio’ buena idea. Noh apoya; y quiere que vaya a cuidah a Isa ehte fin de semana.- Suhpiré.- Te iba a pedih que me acompañarah, pero como dijihte que te ehtaba rehfriando mejoh te dejo en casa pah’ que dehcanseh.

-Vale, gracias Mangel y de verdad lo siento por no poder acompañarte.

-No te preocupeh.- Y Empezamoh a comeh y hablah de muchah cosah, pero algo se me olvidaba…- ¿Me diráh ahora con quién salihte?- Se vio un poco nehvioso.

-Salí con Ema. Me pidió ayuda para… Para ver qué hacer con el tío ese, su ex.

-Ah…- Había algo en esah palabrah que no podía creeh, sino pegadme una hostia.

-Y luego me encontré con Panda, quien me ayudó con los parlantes y se disculpó por lo de anoche. Se veía arrepentido.

-Pueh bien, que lah palabrah que usó no fueron lah máh adecuadah.

-Es cierto, pero ya se disculpó, que es lo que importa, ¿no?- Asentí con la cabeza y cambiamoh el tema uevamente. Ahora sólo me queda ehperah al viehneh pah’ ihme a mi pueblo, y ehtah 3 díah sin mi Rubiuh.