Capítulo 4

28 1 0
                                    

Llegan corriendo y entran por la puerta.

- ¡MAMÁ! ¡AYUDA! ¡LE DUELE MUCHO!- Dice Leia llorando.
- Tranquila cielo, estará bien. Mira, la madre de Laira es médico. Nos va a ayudar, tranquila.
- Sí... Gracias Laira... Perdón por todo lo que te he hecho...
- Ya lo hablamos luego. ¡HAN!

Laura va corriendo y las dos se sorprenden al ver que sabe quién vive. Laira abre la puerta corriendo y pone la cabeza del pequeño en su mano.

- ¡ESTOY AQUÍ HAN! ¡TRANQUILO!
- Laira...
- No te voy a dejar. Estoy aquí ¿eh? ¿Me ves? ¿Me oyes?
- Sí... Sí...
- Bien, tranquilo, no pasa nada. Estás bien, tranquilo, piensa que no pasa nada.
- No pasa nada...
- Eso, muy bien, tranquilo, ¿has llamado a Marie?
- Sí, la he llamado y me ha dicho que le clave este aparato para que no sienta el estómago...
- Has hecho bien, solo que muy dentro ¿no?... Bueno, no pasa nada. Han ya ha pasado por esto ¿a que sí?
- Sí...
- Y no fue nada ¿verdad?
- Nada...
- Bien. Ahora viene mamá precioso.

Han sonríe.

- Pero... ¿Por qué es especial?
- Porque este aparato consigue curarle un poco. Mira, tócale la tripa.
- ¿Yo?...
- Sí, no muerde. Mira ven.

Leia se acerca y le pone la mano en el estómago.

- ¿Qué tiene?...
- Nada, el cacharro le está metiendo líquido. ¿Ves? Tranquila, estos mareos son por el olor a tabaco, pero como toda la casa huele a esto muy amenudo pues no pasa nada, a papá se le habrá olvidado apagar algún cigarro.
- Sí... Eso...
- ¿Le conoces?- Pregunta Breha, la madre de Leia.
- Este pequeñín que veis aquí, es mi hermanito Han. ¿A que sí guapo?
- Sí...

Le empieza a mover lentamente y Han se ríe, el líquido le está durmiendo.

- Qué guapo eres.
- ¿¡QUÉ!? Entonces Laira...
- Laira Solo, 20 años, hermana mayor de Han e hija de Marie y Erick Solo.
- Oh, pues sí le llevas años sí.

Laira mira a Han, está dormido.

- Perfecto. Sí, se emborracharon, acabaron en la cama y... Bueno, llegó Han. De bebé era súper gracioso, no paraba quieto. Y ahora es un pan, yo no entiendo cómo la gente le hace daño.
- Ya... Ni yo...- Contesta Leia muy triste pensando en lo que le ha hecho.
- Ay... Miradle, si parece un bebé...
- ¿A ver?

Leia se acerca y le mira, está dormido y acurrucado en los brazos de su hermana.

- Ay... ¡Qué bonito!
- ¿A que sí?
- Bueno, pues nos vamos. Laira, tienes el día libre. Vamos Leia, tenemos que irnos.
- Vale, ¿cuando despierte puedes darle esto?- Saca una nota de su bolsillo.
- Claro.- Sonríe.
- Vamos Leia, ¡adiós!
- ¡Adiós!
- ¡Adiós chicas!

Cierran la puerta.

- Ay... ¿Y qué hago yo con este niño? ¿Lo vendo? ¿Lo regalo?

Han se ríe levemente.

- ¡Jajajajajaja!- Se ríe Laira al ver que la ha escuchado.

Te amo, no lo olvides- HanLeiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora