Secret love | Adrien Agreste | ✔

"Uncomfortable outings and encounters II"

Capítulo dedicado a: miraaculoouss

Rogaba que el mundo se la tragara y la escupiera en Alaska, bien lejos de ahí. Giro encontrándose a la japonesa la cual portaba un hermoso vestido rojo hasta la pantorrilla en corte de corazón.

- ¡Oh, Hola Adrien! - saludo la japonesa al rubio que la trajo loca un tiempo hasta descubrir que verdaderamente le gustaban las mujeres. Reía al recordar su obsesión por el, de jóvenes.

- Hola Kagami, cuanto tiempo - respondió el de cabellos dorados.

La Martín sentía que desfalleceria en cualquier momento, lo que faltaba era que en ese preciso momento se apareciese la azabache para caer de largo a largo en el suelo.

- No sabía que ustedes se conocían- dijo el rubio abrazando a la castaña la cual se soltó disimuladamente de sus brazos dejando al rubio aún más confundido.

- ¿Ustedes tienen algo? ¿Tu no estás con Luka _____? - cuestiono la japonesa en reproche.

- Si - soltó el rubio mientras la antes mencionada decía que no, haciendo que el rubio se molestará.

- Si tenemos algo, pero es complicado - respondió la de cabello corto desviando su mirada al suelo.

- Tranquila, los apoyó. Tienes suerte con que Adrien este soltero - trato de animar la japonesa haciendo que el rubio se incomodara - ¿Tú también tienes novia Agreste? - pregunto sorprendida y lo vio asentir - ¿Cómo se llama?

- Mari... ¡Oh, ahí viene! - señaló a la oji azul que se acercaba sin percatarse de que Adrien estaba ahí.

La de cabello corto sentía que se le iba el aire, definitivamente se iba a morir en cualquier momento. Kagami lo observó confundida y vio hacia donde apuntaba el rubio topandose con la sorpresa de que señalaba a Marinette, su novia.

- Ella es mi novia Adrien - dijo confundida la japonesa.

Adrien observó a Kagami la cual lo veía con el ceño fruncido y luego volteó a mirar a su amada que se encontraba con la mirada en el suelo. Marinette llegó a donde estaban y miro con notoria sorpresa al rubio el cual con tan sólo verla pedía una explicación al respecto.

- Ya que Adrien no hablará, yo lo haré - dijo Kagami volteado a ver a la oji azul - ¿Por qué Adrien dice ser tu novio?

(...)

Una peli negra estaba comprando un boleto de avión aún confundida por la llamada de su hermano, la cual le intrigada demasiado; no le dio motivos del porque tenía que ir haciendola preocupar , además de porque era tan urgente.

Y a pesar de eso ella igualmente iría pues podría haber ocurrido algo malo estando su hermano sólo allá en Italia, esperaba que ni hubiera sido un accidente o algo por el estilo que requerirá su presencia de manera inmediata.

- Tenga su boleto Señorita Stone - habló el hombre de uniforme que se hacía frente a ella mientras le entregaba dicho objeto.

- Muchísimas gracias - observó la hora y su vuelo salía en una hora, debía llegar a casa rápido para arreglar la maleta y venir nuevamente a realizar el chequeo.

Esperaba que valiera la pena ir allá porque tampoco perdía la idea de lo fastidioso que podía ser su hermano haciéndola correr a todos lados por tonterías.

Emprendió camino a su casa para llegar y empezar a arreglar la maleta que se llevaría y su bolso de mano. Regreso al aeropuerto un poco mas calmada para ir a registrarse. Ya dentro del area de abordaje tomo su teléfono y marcó.

- Aaron, ya voy camino a Italia más te vale y sea importante - dijo mientras levantaba sus gafas de sol y las colocaba sobre su cabeza.

- Valdrá mucho la pena hermanita, ya verás- y colgó nuevamente.

(...)

Una morena de ojos aceitunados se encontraba arreglandose para el siguiente encuentro con el músico, se puso una de sus mejores lencerías pero antes de salir del baño del cuarto de hotel en donde estaba, recibió una llamada haciéndola sonreír.

- ¿Está listo? - habló la italiana viéndose al espejo mientras acariciaba su propio cuerpo.

- Ya el sistema está instalado - explicaron a través de la línea.

- Maravilloso, tu sabrás cuando empezar y a penas este listo lo subes - río maliciosa la oji verde.

- Esta bien, así será - respondieron y ella después de unos segundos colgó la llamada.

- Ya verás Luka, me las pagarás muy caro - dijo la castaña para luego salir del baño para acostarse con el de puntas azules.