Capítulo VII

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Llegamos a mi apartamento.
Toqué el timbre ya que no tenía nada encima, mi cartera, celular, todo había quedado en la casa de Yoongi.
Jin abrió con cara extrañada y los pelos algo revueltos. Me vió la cara y miró a Yoongi que venía tomado de mí mano con una capucha que le cubría la mitad de su rostro para que no lo reconocieran.

- ¿Qué significa esto Soomin?

- Ya te lo explicaré - dije entrando y tirando de Yoongi detrás de mí - Solo... Solo no me juzgues.

- ¿Qué pasó Soo??

Me senté en el sillón y traté de explicarle a Seokjin todo lo mejor que pude.
No sé qué fue lo que me dió el valor de hacerlo. Quizá, porque la persona a la que amaba estaba a mi lado en ese momento tomándome la mano. Pero solté todo.
Cómo era de esperar soltó toda su ira golpeando cosas.

- Por favor no te pongas así - dije poniéndome de pie.

- ¿Y COMO SE SUPONE QUE ME PONGA!? - luego me abrazo y simplemente se lanzó a llorar conmigo - ¿Por qué no me lo dijiste antes?

- Porque sabía como te pondrias.

- Siento que te estoy fallando como hermano mayor....

- Tú eres el mejor hermano mayor del mundo.

- No lo soy si temes contarme estas cosas por como me voy a poner.

- Jin te amo por como eres ok? Y no sé lo conté a nadie porque me sentí culpable por todo lo que pasó.

Tocaron el timbre.
Jin fue a abrir. Limpiandose las lágrimas.

- ¿Pero que se supone que es éste circo?

- A mi no me preguntes, mi amiga me llamó, aquí estoy... - Stella pasó delante de él y vino directo a mi.

- ¿Ya le contaste? - me preguntó al oído.

Asentí.

- Mmm bien...

Antes de salir del Hotel llamé a Stella para que viniera a mi casa. No sabía cómo reaccionaria Jin y seguro yo sola no podría con él. Tenía miedo que saliera corriendo a matar a Choo. Mi hermanito era una hermosa persona, completamente pacifista, pero si alguien le hacía daño a alguien que amaba era capaz de cualquier cosa.
Recuerdo que una vez le arrancó un diente de un golpe a un niño por levantarme la pollera en la secundaria.
Era uno de los chicos más populares y yo odiaba ser la hermana de "el lindo de Jin", la mitad de las chicas solo querían ser mis amigas para acercarse a él. Por eso Stella y yo siempre estábamos del lado de las nerds que se apartaban de todos.
No nos gustaban las mismas cosas que a todo el mundo, ni la misma música ni la ropa de moda.
Stella estaba enamorada de él, pero nunca me lo dijo, por el contrario, decía que lo odiaba y vivían peleando.
Hasta el día que entramos en la universidad.
La pubertad me jugó una mala pasada . Siempre fui muy delgada, y ahora era una tabla, pero no le paso lo mismo a ella, su cuerpo se lleno de curvas y yo no fuí la única que lo notó.
Stella y Jin comenzaron a salir cuando ella estaba saliendo de los 17.
Me sorprendió la noticia, pero me alegró mucho, no podía creer, ¡¡mi mejor amiga y mi hermano!!!
Eran la pareja más adorable de todas, estudiaban juntos, jugaban videojuegos, miraban partidos de fútbol y lloraban con los dramas juntos.
Lo único malo de esa época fue que ya no pasaba tanto tiempo conmigo. Comencé a frecuentar otros círculos, hice nuevas amigas y en una de esas ocaciones conocí al único chico con el que salí en mi vida y que rompió mi corazón.
Cuando Jin y Stella rompieron, hacia un año ya, vivían juntos en el mismo apartamentos que hoy ocupabamos con mi hermano. Quizá la convivencia se convirtió en rutina quizá solo fue un momento de debilidad.
Ella le contó que en su fiesta de cumpleaños había estado con otro chico. "Estaba muy borracha " se justificó una y otra vez, pero mi hermano era demasiado orgulloso para perdonar una infidelidad, aunque por dentro estaba muriendo. También intenté hablar con él, pero su corazón, y su ego heridos pudieron más.
Ella aceptó que había roto el corazón de una personita muy especial, y aceptó su culpa sin más. Jamás vi a ninguno de los dos en pareja otravez.

Ebony & IvoryDonde viven las historias. Descúbrelo ahora