ᴇʟ ɪɴᴛᴇʀɴᴀᴅᴏ

~ 05 ~

–¡NO! ¡SUELTENME! -gritaba una chica de aproximadamente 10 años. –¡P-PROMETO POR-PORTARME BIEN PERO NO ME LLEVEN ALLÍ! ¡NO!

–¡Cállate! -habla la directora. –¡Tu decidiste escapar! ¿A caso crees que iba a ser fácil? -dijo al ver las lágrimas de la niña. –No creas mi niña, acá nadie sale en buenas condiciones. -hablaba mientras entraba a una habitación donde había una silla y unos objetos más.

–¿Q-qué? ¿Q-qué es este lugar? ¿Q-que me ha-haran? -pregunta la niña asustada.

–Ahí lo verás... -dice con una sonrisa traviesa.

°°°

–¡CELESTE BROOKS VEN PARA ACÁ EN ESTE MOMENTO! -gritaba Carolina mientras iba detrás de Celeste.

–¡NO! -contestó riendo. –¡Y POR SI NO SABES... YO ME LO COMÍ!

–¡NOO! ¡SABIAS QUE ERA MÍO!

–¡ME VALE! -dijo mostrando su dedo de al medio. –¡ESTABA TAN RICO!

Carolina con Celeste se compraron algo en el quiosco para que se las coman en clases, pero cuando se separaron para buscar unas cosas, celeste a escondidas se comió el chocolate y Carolina se enojó y la persiguió por todo el internado.

Todas las miraban, algunas miradas eran de ternura, otras de odio o asco.

Pero a lo lejos, bien oculta, Janne estaba entre la multitud, viendo la forma de correr de Carolina, no va a negar que es muy rápida, pero sí la falda que tuviera no fuera tan corta sería más rápida.

–Mmmm, presa difícil...

–¿Qué hablas? -habla Emily que llegaba con unas bebidas.

–Mmm no nada. -la otra le da una bebida. –Gracias.

–Ufff... -se sienta a su lado. –Oye... -la otra la mira. –Siento algo raro...

–¿Estás embarazada? -dice Janne en broma.

–Oye no... -dice riendo. -Solo como que mi cuerpo me pide adrenalina...

–¡JANNE!

Poleth buscaba como loca a Janne ya que la profesora de inglés las había mandado hacer un trabajo y no pillaba nunca a su compañera.

–¡¿LUNA?! -grito y un grupo de chicas la ven. –¿Que miran?

–Pues a ti, bonita. -una de ella le guiña el ojo y va hacia ella

–¡SOY PAPA CASADA! -dicho eso se fue corriendo.

Pasó un largo rato, corriendo y buscando a Janne y no la pilló nunca. Ya cansada se apoya en una de las paredes y toma un poco de aire.

–Ohh, hola mi niña. -habla una voz que Poleth odia con toda su alma.

Martina Miller.

–¿Qué quieres? -dice firme.

–No solo vengo a saber de ti, ¿Qué hiciste en vacaciones primita? -dice acercándose y abrazándola por los hombros.

–Nada que a ti te importé. -dice mientras de nuevo va en busca de Janne.

–Ay vamos... Algo interesante debiste hacer, como viajes nuevos, Comidas nuevas, Personas nuevas, ¿O no es de tu estilo? -dice sonriendo.

Pero Poleth se da vuelta y se acerca a ella.

–Pues si, viajé y fuí al cementerio, donde están tu padres, muertos, mientras nos comíamos unos fetos y conocí a una niñita, tenía seis años, ¿sabes qué pasó? -se quedó callada cuando notó vio el rostro de las demás era arrepentimiento. –Uhhh, ¿Me pasé? Perdón. Ahora déjame tranquila, primita. -dicho eso se fue.