CAPÍTULO 1

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Los chicos reían con fuertes carcajadas al tiempo que conducían a toda velocidad aquella motocicleta. El conductor se detuvo junto a la acera al tiempo que se quitaba el casco y llamaba la atención de las personas que estaban por allí cerca. ¿Y cómo no? Alexander Lightwood era todo un ejemplar, con su 1,82 de estatura, un cuerpo delgado pero fornido, sus bellos ojos color zafiro y su cabello negro que ondeaba desordenado como siempre. Su piel era pálida, casi albina... bueno, aquel chico era simplemente atractivo, tanto para hombres como mujeres. Su compañero también se quitó el casco dejando revelar su belleza. Jonathan Morgenstern. Con un cabello casi platinado y profundos ojos color esmeralda, su piel, al igual que la de su novio, era pálida, aunque no tan clara como la de Alec, pero eso sí, era un poco más ancho que el contrario.

- ¿Ya te he dicho que adoro tu nueva motocicleta? –Inquirió Jonathan riendo fuertemente. Las personas que por allí se encontraban, miraban con irritación a los chicos, puesto que los dos estaban totalmente ebrios–. Aunque debes tener más cuidado Alec, por poco y me haces caer –señaló el ojiverde–. Aunque tenemos que darnos prisa. La fiesta es pronto y si nos tardamos más, no llegaremos para encontrarnos con Jace. Si eso pasa él se enojará.

-No te preocupes, vamos bien de tiempo –indicó Alec apoyado en su motocicleta.

-Lo sé, pero quiero llegar temprano. Quiero ver la cara de envidia de todos cuando miren la motocicleta que tu padre te ha comprado. Es perfecta.

- ¡Lo sé! Me encanta, es fascinante pero ahora hablando en serio, ¿dónde estamos? Hemos estado dando vueltas y ya quiero llegar a la fiesta.

-Relájate –indicó Jonathan sacando su teléfono–. Yo tengo la dirección guardada –señaló mientras la buscaba.

Alec asintió bajándose de la motocicleta para estirar sus músculos.

- ¿La encontraste?

-Sí, sí, ya la hallé –anunció el rubio–. Yo conduzco. Llegaremos pronto –señaló mirando su teléfono antes de ponerse el casco.

Alec arqueó una ceja.

-Espera, ¿qué? ¿Vas a conducir con el teléfono en la mano? –Inquirió un tanto preocupado.

Who are you? (MALEC)Where stories live. Discover now