•°Capítulo 9°•

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Faltaba poco para que la clase se terminará, pero no quería tenía miedo, miedo era lo que su cuerpo sentía y más cuando sabía que su profesor lo estaría esperando a la hora de la salida, esto era un completa locura, locura que le estaba comenzando a gustar más de lo normal.

—JiMin...— Murmuré despacio el peliazul, tan siquiera le diría a su amigo que no se podría ir con él a la casa.

—¿Que pasa, Tae?— Miro a su amigo con el ceño levemente fruncido, mientras trataba de no ser pillado por el profesor.

Kim solto un suspiro tratando de tranquilizarse tan siquiera un poco, esto ya era demasiado para él como para no poder controlarse un poco.

—No me puedo ir contigo a la casa.— Murmuré despacio, mientras que el pelinegro lo miraba confundido, no lograba entender. Taehyung se dio cuenta y soltó otro suspiro más para poder explicarle.

—El profesor me pidió ayuda para calificar los exámenes de otro grupo, dijo que me daría dos puntos adicionales y sabes bien que los necesito.— Lo miro con tranquilidad para que no sospechara nada.

JiMin soltó un suspiro entendiendo a su amigo, sabía que Taehyung no podía darse el lujo de roprobar a cada rato.— Está bien, Taetae, me voy, pero cuando te vayas a ir me mandas un mensaje o algo por el estilo, ¿De acuerdo?— Kim sonrió satisfecho y asintió ante el acuerdo.

El timbre sonó y eso hizo que a Taehyung se le bajara la sangre por completo, mientras que Jeon lo miraba desde el escritorio con una sonrisa ladina, ya estaba pensando en que hacer con el delgado cuerpo de su alumno preferido.

Cuando el salón quedó vacío quedando solo el profesor Jeon y Kim se hizo un ambiente un poco tenso por el simple hecho de que Taehyung no sabía cómo actuar cuando está sólo con él.

—¿No dirás nada, Kim?— Murmuró el castaño haciendo como que acomodaba sus cosas tranquilamente solo para relajar sus músculos un poco o más bien para contenerse de ir a besar como lo hizo en el baño.

—¿Que es lo que puedo decir, profesor Jeon?— Atacó Kim colgándose su mochila y caminar hasta al frente del escritorio.— Oh sí, ya recordé que puedo decirle.— Guardo silencio mirando como Jeon lo miraba con atención.— Lo espero en el estacionamiento.— Guiño un ojo y salió del salón dejando solo a Jungkook.

Taehyung camino apresuradamente hasta el estacionamiento esperando a que Jeon llegará rápido y vaya que si. El castaño le indico su auto y ambos subieron rápidamente saliendo del colegio lo más pronto posible para que nadie sospechara algo.

—¿A qué hora entras a trabajar?— Preguntó el mayor teniendo la mirada fija en la carretera, pero sabía que el menos quería huir, huir de esto, pero también sabía que el menor no era tan tonto como para dejar ir esto.

—Hoy descanso, descanso dos veces a la semana, pero suele cambiar los días.— Murmuré el menor mirando el perfil del hombre que iba conduciendo con tranquilidad.

El mayor pensó por unos segundos hasta que paro en un semáforo en rojo. Se giró un poco para encontrarse con la mirada del menor, el cual se sonrojo cuando descubrió que lo estaba viendo. Jungkook sin pensarlo tomo el mentón de Taehyung acercándolo a su rostro.

Ambos se miraron a los ojos sin decir palabra alguna y sin siquiera esperarlo Taehyung cortó la distancia que había entre ellos besando esos delgados labios. Sus labios se entrelazaban tan malditamente bien que ningún se quería separar, pero los colapson de los otros autos comenzaban a sonar.

Se separaron sonrientes, Taehyung miro por la ventana completamente sonrojado mordiéndose su labio inferior, mientras que Jeon sonreía como tonto tocándose los labios con la yema de sus dedos.

Después de unos minutos llegaron a la casa de Jeon, el menor miro la casa con una pequeña hasta que decidió hablar.— Su casa muy bonita profesor Jeon.— Murmuro suavemente giro a verlo, pero su sorpresa fue que Jungkook ya lo estaba viendo.

Después de unas mirada intensas bajaron del auto caminando al interior de la casa y una vez que se cerró la puerta Jeon no pudo contenerse más y se acercó al menor tomándolo por sorpresa y besarlo. El menor se sorprendió, pero sin reprochar correspondió pasando sus brazos por su cuello y acercarlo más para profundizar ese beso que cada vez subía de intensidad.

El mayor bajo sus manos a su trasero y con un poco de impulso logro cargar al menor haciendo que sus piernas quedarán al costado de las caderas del mayor. Comenzó a caminar escaleras arriba tratando de no caer, hasta que por fin llegó a su habitación dejando al peliazul en la cama, separándose de él y quitar su saco dejándolo en algún lugar de la habitación.

Se volvió acercar al menor metiéndose entre sus piernas y alzar una volviéndolo a besar, mientras sus grandes manos tocaban los muslos con lentitud por encima de la tela de su pantalón. Los besos pasaron a su cuello dando leves mordiscos, haciendo que el menor soltara jodeos en el oído del castaño.

La ropa comenzaba a estorbar haciendo que Jeon lograr sacar la camisa de Kim y arrojarla a alguna parte. Siguió con sus besos por el cuello bajando a sus clavículas y hombros. Beso su pecho sin dejar de escuchar esos jodeos que lo estaban poniendo más que duró. Jugueteó con sus pezones hasta dejarlos rojos e hinchados de tantas chupadas y mordidas.

La ropa ya había desaparecido, ahora sólo se encontraban en bóxer ambos cuerpos, sintiendo como sus erecciones se rozaban logrando sacar más de un gemido a ambos. El mayor ataca los labios del menor, haciendo un sonido morboso con aquel beso lujorioso.

Jeon bajo la última prenda que le quedaba al menor y lo miró desde arriba, mordiendo su labio inferior de sólo pensar que estaría en la estrecha entrada del menor. Separó bien sus piernas y se acomodo una vez que ambos estuvieran desnudos. En su mano tomo su miembro y lo alineó en la entrada del menor.

Di paso a la entrada estrecha del menor sujetando su cintura mirando como Kim soltaba un fuerte gemido al sentir su entrada ser llenada por el miembro de su amante-profesor Jeon.

—¡A-aah!— Gimoteo de placer cuando Jeon comenzó a moverse después de unos minutos. Embestidas lentas y profundas para llegar hasta lo más profundo de su ser. Las embestidas comenzaron a subir lentamente, escuchando los gemidos agudos de pequeño que tenía debajo de él.

Pero tan pronto como iniciaba la acción se escuchó la puerta principal ser abierta, para después escuchar una voz afeminada.

Jungkook, cariños, ¿Estas aquí?.—














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¡TARAN!🤭
Ok, no quiero que se alteren y tampoco me odien🥺
Por cierto ya somos ¡3K, QUE EMOCIOOOOON!
Lo siento, me surgió algo de último momento y no me dejó publicarlo el día de ayer, pero aquí está, espero que les guste, por favor voten, haganlo para que yo siga dándoles bonitas joyas7u7...
Ahora, ¿Les gustaría otro libro en colaboración de los 3k?, Si es así dígame en los comentarios, acepto sugerencias 💕

♡【Prostibulo】♡ ||KookV/ VKook||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora