Capítulo 66 : El Pokémon De Los Deseos

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Era ya muy tarde, de madrugada. Magno y Aquiles aún seguían buscando a Dylan, caminaron durante horas  estaban agotados y hambrientos.

- No puedo más - el pelirrojo se desplomó en el suelo como un peso muerto - necesito descansar un poco...

- Tenemos que encontrar a mi padre.

- lo se , lo se, pero ¿ no podemos descansar solo unos minutos? Llevamos horas caminando, por favor...

- vale, pero solo 5 minutos - el líder del equipo aqua se sentó sobre una roca que había en el lugar y comenzó a pensar en todo lo que dijo aquel hombre ¿tanto importaba la descendencia propia? Él no lo creía así. Dio un suspiro de cansancio y miró hacía el cielo, ¿porque le tenía que pasar esto a él? ¿Que tenía de malo el ser gay? ¿Es porque era tonto o algo bruto? Estaba confuso, pero digan lo que digan, nunca dejaría a Magno por nada en el mundo, realmente lo amaba y estaba dispuesto a hacer cualquier cosa solo por ver una sonrisa en el rostro del pelirrojo.

- Aquiles ¿Porque estas conmigo? Quiero decir... ¿Porque te enamoraste de mi?

- Que pregunta más tonta me estas haciendo, ya sabes la respuesta Magni.

- No, no la sé, ¿porque demonios decidiste defenderme aquella vez sin apenas conocerme? ¿Por qué...?

- Lo que te estaban haciendo era horrible, no era justo por eso te defendí, además, te amo porque eres la persona más tierna y buena del mundo, nunca me has llamado tonto o bruto - sonrió - siempre fuiste parte de mi familia ¿sabes? - lo abrazo con ternura y beso su mejilla - no entiendo esa pregunta ¿es por lo de tu abuelo?

Asintió cabizbajo, se aferro al pecho del pirata y hundio la cabeza en este, el cual, a Aquiles le pareció un gesto muy tierno.

- ¿de verdad soy una deshonra? Ahora... Ahora entiendo lo que me dijo mi padre hace tiempo.... Él no tenía la culpa, la forma de hablar del abuelo...ahora he notado que la imitaba... No se como sentirme Aquiles... Estoy... Dandole tantas vueltas a todo esto... - el líder del equipo magma noto unas caricias en su espalda, lo calmaron lentamente, quedándose tan tranquilo.

- Yo no le daría tantas vueltas a esa mierda, no eres un crío, ni estás bajo las órdenes de nadie, yo que tú vivía mi vida y que le den a los demás - soltó una carcajada - aún nos queda mucha vida por delante y la voy a vivir a tope, además, aun tenemos que casarnos, buscar una casa y...

- Tener hijos ¿no? - se sonrojo.

El moreno asintió con una gran sonrisa. Magno le daba la razón, pero no quería ver a su familia contra él como le pasaba a Aquiles, y que llegarán hasta el punto de querer matarle.

- No quiero problemas Aquiles.

- No los vas a tener Magni, además, estoy aquí para protegerte - revolvió su cabello lentamente - no te preocupes.

- si tu lo dices, en fin, sigamos.

- Si.

Se levantaron y siguieron con la búsqueda del oji ámbar. El cielo estaba lleno de estrellas, más que nunca, Magno miró hace este y sonrió levemente, en cambio, a Aquiles le recordaba a aquella noche de tanabata donde conoció a Silvina y a un pokémon la mar de extraño.

- Es una noche bonita.

- Sí, me trae muchos recuerdos de mi niñez, ¿haz ido alguna vez al tanabata?

El pelirrojo asintió, fue alguna que otra vez, pero no tenía muy buenos recuerdos de esa fiesta, ya que el pokémon Jirachi nunca le consedio el mismo deseo que colgaba en aquel bambu.

- Conocí a Silvina en esa fiesta, cuando los separamos de nuestros padres.... Nos asustamos, lloramos durante horas, esa noche nuestro único deseo era volver con ellos, entonces Jirachi apareció y nos concedió ese deseo, aun tengo una foto de nosotros tres de ese día, nos llevamos una buena bronca pero que más da -

- oh... Ya veo, a mi no me gustaba mucho esa fiesta... Mi abuela me decía que a los niños buenos siempre se les consedian los deseos si estos no eran egoístas.

- ahora entiendo porque nunca me dejaron la videoconsola que quería.... ¿Y cual era ese deseo?

- Que mi padre me quisiera.... - miro hacía otro lado cabizbajo - suena algo triste pero era así...

- Magno...

- Deje de creer el tercer año de la fiesta...supongo que eso también influye en los deseos...

- si que lo hace...

Aquiles lo abrazó con ternura y beso su frente, realmente sentía pena por él, ese deseo no se había cumplido hasta hace poco... Aunque ¿y si nunca se lo concedio porque el realmente lo quería? Si... Era por eso y el nunca se dio cuanta de ello.

- ¿ y cual es tu deseo ahora?

- vivir tranquilo junto a ti - sonrió de oreja a oreja - ¿y el tuyo?- lo miro con curiosidad.

- Tener un hijo realmente nuestro, así se resolvería el problema con tu abuelo, ¿no es un deseo inteligente? - acerco al pelirrojo a él - ojalá Jirachi pudiera concederme ese deseo...

- a mi también me gustaría - rió- pero sinceramente... No creo que nada así ocurra.

- Si no crees, claro que no sucederá.

Magno se quedó en silencio y siguieron con la búsqueda durante horas, decidieron volver a descansar en lo alto de una colina. Magno se tumbo en el suelo mirando aquel cielo estrellado, mientras, Aquiles apuntaba su deseo en un papel de color azul pastel, en cuanto lo termino, una fuerte brisa se lo llevo.

- Nooooo, mi deseo... - suspiro cansado y se tumbo en la hierba junto a su pareja, abrazandole y acercando al pelirrojo a su pecho.
Se quedaron así durante un rato, incluso Magno empezaba a caer en un largo sueño. El moreno vio algo regresar hacía el, era el papel con su deseo  lo cual lo dejó extrañado ya que se movía de forma muy extraña, no iba con la dirección del viento.

Un pequeño pokemon descendió lentamente, uno que reconoció al instante, era Jirachi. El pirata sacudió al líder del equipo magma para despertarlo y señaló el pokémon que estaba en frente de ellos.

- ¡¿Q-que?! Esto debe de ser un sueño... Debe de....- el de lentes no podía creer lo que veía, nunca había visto a ese pokémon en persona, era lindo, pequeño pero aún así poderoso.

- ¿Te... Te acuerdas de mi...? - enseño aquella foto donde salían ellos dos junto a Silvina, el pequeño asintió con una sonrisa y le entregó aquel papel- Me alegro de verte, nunca te agradecí lo que hiciste por nosotros aquella noche... Gra... - antes de terminar la palabra, Jirachi cumplió su deseo, en el lugar donde estaba el papel apareció un bebé de cabello bicolor, por una parte morena y por otra pelirroja, piel clara y ojos negros iguales a los de Magno, era hermoso.

Ambos jefes estaban paralizados, eran lo que querían pero ¿así tan derrepente? En el momento que le quitaron el ojo a él nuevo pequeño, se percataron de que Jirachi había desaparecido del lugar.

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Hola a todos, ya que me he retrasado mucho en publicar he decidido hacer un capitulo doble para compensar nwn

Aquí tenéis al pequeño Aquiles Magno Junior o mejor dicho AMJ

Espero que os haya gustado el capitulo nwn

Chao <3

Hardenshipping ( Magno/Maxie  x Aquiles/Archie )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora