VENENO Y TÉ-MORE (SEVMIONE)

VENGA CONMIGO - 2DA Parte 🔞

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—Granger —acercó su rostro al oído de ella con respeto y delicadeza porque no quería asustarla y sobre todo ese día no tenía ganas de lucirse para decirle que era una tonta delante de los demás —mire aquí a estas manchas sobre el lomo, es importante que se guíe de las que están en el centro, intente ser más ingeniosa. A veces debemos saber tocar, siento que no se quiere ensuciar las manos —la paciencia en la voz del mago la descolocó, era recta como siempre pero tenía un rastro de preocupación que jamás había escuchado antes.

Lo hace, me avergüenza pero los demás no lo escuchan. Qué extraño está hoy. Se dijo así misma en la mente levemente conflictuada por la cercanía.

Ella se atrevió a voltear y subir levemente la mirada para verle el rostro, quería ver la expresión que ponía cuando le contestara en el siguiente comentario pero estaba demasiado cerca a él.

Snape miraba atento al pez.

—Es muy resbaloso, Señor. Además de tener la piel muy oscura, casi no puedo distinguir las manchas en el lomo —su tono era preocupado, era una sigilosa forma de hablarle con cuidado.

Él alzó una ceja sin soltarle la mano.

—Aquí Granger —se impacientó un poco—, mire aquí, no pierda la concentración —el mago se dio cuenta que ella posaba su mirada a veces sobre sus labios y luego subía a sus ojos negros, él no pudo evitar también hacer lo mismo pues al notar la obviedad de ella se dio permiso automáticamente para estudiar sus gestos, observar los ojos cafés claros más allá de la superficie.

Pasó algo muy inquietante en esos milisegundos por lo que se dio autoridad de ordenar con más energía.

—¡Mire aquí, Granger! Debe tener cuidado, no sabe cuándo algo la puede lastimar, ponga atención en el pez no en mis palabras —él presentía algo extraño en ese ambiente mientras hablaba en voz baja.

En cambio Hermione era sincera, la piel del pez era muy oscura y por los nervios era más difícil distinguir las manchas en cambio él ya tenía experiencia y por eso sabía dónde por las distancia en vez de lo que él ojo podía percibir.

—No veo el lugar exacto —susurró tímida casi en un susurro.

Snape empezaba a sonar como su profesor.

—Maldición cómo me molesta —renegó en susurro sin notar que ella se había sonrojado sin razón.

Los demás tenían tanto temor de cortarse o equivocarse que no estaban enterados de lo que sucedía. Murmuraban, en todo el aula había ruido por conversaciones bajas y opiniones cambiadas entre alumnos.

Él pegó mucho los labios a aquella oreja delicada pero no se esperaba el accidente que en menos de un segundo hizo que ella se mueva hacia su izquierda con brusque dad. El alumno de lado derecho de Hermione, uno de sexto, apretó el cuerpo del pez y este se infló explotando repentinamente escapándose de sus manos. Su reacción con susto y sorpresa fue natural, soltó el cuchillo manoteando hacia atrás, ella se asustó por el objeto en el aire.

Snape se vio atacado por la cabellera de esa joven, la oreja se pegó a sus labios y ese cuerpo delicado lo golpeó de seco en toda la parte delantera del estómago, el cuchillo alcanzó el brazo de ella que desnudo por tener mangas cortas recibió un rasguño profundo de al menos dos centímetros de largo, y medio de profundidad. La reacción rápida de Snape fue sujetarla bajando su mano derecha que reposaba en el hombro de ella hasta su cintura para atraparla y jalarla contra él de forma que no golpeara la mesa de los que estaban detrás pues el aula no era muy grande y como habían muchos alumnos estaban literalmente apretados.