De la A a la Z. 2 °Solangelo°

U de Uva

Nico no podía estar de más mal humor, de todos los campistas que había en el campamento mestizo le había tocado a él cumplir con una misión que había mandado nada más y nada menos que el propio director del campamento, el dios Dionisio.

Era algo estúpido, pero claro, tenía que hacerlo. Conseguir la última uva mágica. ¿Que era? No tenía ni idea pero ahí estaba, de camino al Norte en un estúpido camión con Will y Katie, sus compañeros.

Se sabía que en cada misión habían de ser 3 semidióses los que participarán , y como Nico era el líder y podía elegir, no tardó mucho en hacer su elección.

Cabe decir que gracias a Katie no tardaron mucho en dar con la uva mágica, cosas de Demeter.

Aunque eso los llevo hasta un gran campo lleno de uvas.

Will nada más verlo pensó en el campamento, se parecía al campo de fresas. Sonrió por inercia, pero se borro de su cara un segundo después al escuchar a su novio.

- ¿Tenemos que encontrar una uva entre miles?

-Yo diría que incluso en un millón de uvas, si.

Contestó Katie.

A pesar de todos los encontronazos con monstruos que ya habían pasado de camino hasta allí, decidieron separatse para terminar antes.

Quirón les había dado una pequeña descripción de la uva y aunque no era gran cosa, era lo único que tenían.

Ya llevaban un par de horas y ninguno había encontrado la uva mágica, y aunque lo hubieran hecho, volver a encontrarse hubiera sido difícil, porque estaban bastante perdidos.

Will ya estaba cansado de andar pero seguía adelante, buscando. Nico por otro lado esta tan arto que decidió viajar por las sombras con la esperanza de que intuitivamente le llevará hasta lo que más quería, la uva.

Pero no fue así, pues su viaje le llevó hasta lo que deseaba de verdad y aunque creyera que ese momento era una uva, no lo era.

El viaje sombra lo expulsó a varios metros del suelo, y cayo encima de Will quien se sorprendió, tropezó y cayó al suelo encima de varias parras de uvas con Nico encima.

Nico se puso rojo y bajo la vista.

-Hola

Susurró.

Will rió abiertamente apretando las mejillas de Nico, ambos estaban llenos de líquido y trozos de uvas, pero a Will le daba igual, hacia un rato estaba cansado y aburrido y ahora estaba abrazando a su novio.

Ambos llenos de pringue se pusieron en pie y siguieron la búsqueda de la uva mágica.

No fue hasta la puesta de sol que la uva mágica brilló en la oscuridad y pudieron encontrarla. Aunque Katie se sorprendió de ver a ambos chicos sucios y pegasos, no dijo nada, pues sabía que los momentos que compartían sus amigos eran secretos bien guardados entre ellos.