~ Seres Diferentes ~ (GOLDDY)

"Sonrisa"

- Mamá, quisiera hacerte una pregunta.

- claro cariño, ¿que deseas saber?

La mujer que iba caminando de un lado a otro por la simple razón de que se encontrase preparando la cena para ambos. Aquella mujer que lucía una cálida sonrisa en su rostro en lo que hacía.

- bueno... ¿Que pasaría si, en el caso de que llegase a ocurrir, mis alas se expusieran al sol?

Cuando lo mencionó tenía la mirada sobre los párrafos del libro que estaba leyendo. No pudo ver la reacción de la mayor hasta que está se acercó a él en son de preocupación.

- ¿Que ocurrió Freddy?¿No me digas que expusiste tus alas al sol?¿Lo hiciste por accidente?¿Está todo en orden?

Ella solo empezá a hacer preguntas sin parar mientras revisaba el rostro de su hijo en busca de quemaduras graves.

- Tranquila mamá, estoy bien y ellas también lo estan- este señaló con la mirada a sus alas, estaba en su casa así que podía andar sin su capa.

- ¿Que fue lo que pasó?- pronunció ya un poco más tranquila.

- Lo siento mamá, la curiosidad me ganó- mencionó cabizbajo- yo, tuve curiosidad por el asunto de mis alas, sabía que así rompía las indicaciones que me habías dado, algo saldría mal pero aún así, lo hise. Hoy cuando me quede solo en la biblioteca, aproveche que no había nadie por los alrededores y... Al ver un rayo de luz entrar por las ventanas del lugar quise ver, y por ello lo hise.

- ¿Acaso no te dije lo peligroso que puede ser?, Freddy, ¡tus alas se pudieron haber quemado!

- pero no lo hicieron, más, cuando hice contacto con aquel rayo de sol. Solo tome contacto con una pequeña parte de mis alas y de estas salió un brillo, creí que se había quemado, me alarme y de inmediato acudí a la enfermería pero, al revisarlas no vi rastro de quemaduras por lo cual me alivie.

La mujer solo soltó un suspiro para después tomar asiento al lado de su pequeño, sabia muy bien que su hijo algún día se iba a cuestionar aquello y que le daría curiosidad más no pensó, que lo hubiera fuese a poner en práctica. Solo se dedicó a observarlo, viendo con el sostenía el libro en sus manos para después llevárselas a la mesa. "Mí pequeño bebé" pronunció en su mente para llevar su cuerpo a la cercanía del castaño y brindarle un cálido abrazo; envolviendo su ser, acariciando sus delicados y suaves cabellos castaños.

- Tranquilo mí niño, no estoy enfadada contigo. Solo no lo vuelvas a hacer, tal vez en esta tuviste suerte pero, quizás en la próxima no la tengas, ¿de acuerdo cariño?

Su voz dulce y cálida, la voz de madre suavizó la inquietud el contrario ganándose el asentimiento de este.

- lo haré mamá.

Sin más que decir se apartaron del abrazo para continuar cada uno en lo que estaban haciendo.

En la mañana todo transcurría como todos los días, normal.

Caminaba tranquilamente por los pasillos, era temprano, por alguna razón se sentida extraño, tal vez era por la conversación con su madre la noche anterior, o por los sueños que había tenido últimamente. Antes eran sueños que sucedían cada dos o tres meses pero, estás se estaban volviendo constantes.

¿Soñar con alguien igual a ti esta mal? Bueno no tan igual, ya que está aparición tenía características ajenas a la suya pero, si las quitabas eran como dos gotas de agua. Ambos parados de frente separados por un espejo. ¿Quizás era su reflejo? No, aquella figura era diferente, ¿por qué? Solo bastaba a que te fijaras en sus alas y ver las bellas alas azules que nacían de su espalda. Si, él para nada tenía unas alas así. Eso recuerda de aquella figura, unas alas que de alguna forma le causaba un poco de envidia, él en cambio, tenía unas alas que ni siquiera deberían ser comparadas con ellas. ¿Todas las hadas de las sombras tendrán unas alas así?¿O solo él salió con aquellas pobres alas? Así nunca conseguiría pareja, aunque aquello no le importaba demasiado pero, le inquietaba. Quizás su imaginación quería que aquel ¿reflejo? fuera de alas así. Quizás por ello se la pasaba leyendo libros sobre la tierra prohibida o mejor dicho, la tierra de hielo. Las leía pero no parecía que lo hacia por él, sentía como si algo lo llamase hacia aquel tema, como si algo le estuve diciendo, estoy aquí.