"Happy Pills" || Afterdeath

7

Mamá fue a mi habitación, Error le había dicho lo de las jeringas.
Tocó la puerta furiosa y yo le abrí.

–¿Qué mierda significa esto? –Preguntó casi en forma de grito.

–¿Qué te importa? –estaba a punto de cerrar la puerta en su cara, pero ella me detuvo y entró a mi habitación.

–¡No vengas a hablarme así!, ¡Eres un asco!

–¿Ah sí?, ¡Entonces deja que me mate!

–No hables estupideces...

–Claro. Es muy tarde para venir a ser buena madre, no sirves para tener hijos, no puedes ni siquiera mantener una familia. –Mi odio al hablar incrementaba. –¡si no hubieses andado de zorra y no nos hubieses tenido no tendrías estos problemas! –Apenas terminé la frase me cacheteó y salió del lugar con lágrimas en los ojos.

No sé cuánto rato ha pasado desde entonces, llevo toda la mañana tendido en el suelo de mi habitación, nadie de mi familia -si es que así puede llamarse- había notado que no fui a la escuela.

Estuve un largo rato viendo el techo hasta que escuché golpes en mi ventana.
Me asomé y me sorprendió encontrar a Dust lanzando pequeñas rocas desde el patio.

Abrí la ventana esperando que no me llegara una piedra en el ojo.

–Dust, ¿qué estás haciendo aquí?, ¿cómo llegaste a mi casa? –Me asustaba que Dust supiera donde estaba mi casa, pero de cierta forma me alegraba.

–yia ken fue, ¿tan volao' 'tabai que no te acordai'?, me mandaste tu dirección en la madrugada. Cuando vi tu mensaje creí que algo te había pasado y vine. –De seguro mandé la ubicación por accidente cuando intenté cerrar las aplicaciones torpemente para que nadie me hablase.

–Qué wea, en verdad no recuerdo...

–¿Tabai' haciendo tus weas enfermas de cortes?, la raja, jaja, ¿sabes algo enfermo pero que es más genial? –Dust se acercó y me puso contra la pared rozando su pierna con mi parte baja.

–¡¿DUST?!, ¿E-ESTÁS DROGADO? –Quería que saliera de encima, pero Dust al parecer no se movería.

–Sorpresivamente, no. –Procedió a besarme, yo no me opuse.

... ... ...

Aún no logro asimilar que me gusta Dust y que incluso sin estar drogado o ebrio me gusta tener sexo con él, pero bueno.

Nadie de mi familia aún llegaba y Dust seguía en mi casa.
Tocaron la puerta y fui a ver quien era.
Me asomé por la ventana, era Ink, así que corrí a abrirle.

Abrí la puerta, pero Ink no estaba, solo, estaba con Reaper, me irritó un poco, pero creo que ignorando su existencia estaría bien.

–¡Geno!, ¿estás bien? –dijo Ink abrazándome. –¿Por qué no fuiste hoy a clases?

–Oh, bueno, me siento un poco enfermo, pero mañana iré, no es nada de qué preocuparse. –sonreí para dejar tranquilo a Ink.

–Hehe, bueno Geno, te traje tus libros para que estudies, si quieres puedo ayudarte y cuidarte.

–Heh, gracias Ink, pero estoy bien. –Recibí mis libros.

–Hey, ¿qué pasa aquí? –Ese era Dust, quien llegó desde arriba sin camisa.

–D-Dust... –Me sonrojé demasiado.

–¿Dust, qué haces aquí? –Preguntó Reaper.

–Estaba "cuidando" de Geno. –procedió a darme un beso.

–O-oh... Heh, no quería molestarte en tu momento Geno, hehe, creo que... Mejor te dejo. –Dijo Ink con la mirada baja retirándose a paso rápido.

Iba a detenerlo, pero las palabras de Reaper me detuvieron: –Si de verdad lo quieres, no lo vas a ir a buscar. –Dirigió su mirada hacia mí, una mirada de odio. –¿Sabes hacer algo más que cagarla? –Después de esto de retiró en busca de Ink.

Reaper tenía razón, soy experto cagándola.

Y todo esto es otra marca en mi piel.

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