Capítulo 20, "Cuando te conocí, sentí, todo, por ti."

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Narra Lauren

Caminé por el muelle, hasta llegar donde se encontraba Alejandro.

-¡Hola, hija! -nos dimos un abrazo. -¿Qué haces por aquí? 

-Pensé que te gustaría. -le entregué una bolsa, que contenía una hamburguesa y una cerveza.-

-¡Gracias, cariño! -besó mi mejilla.-

-¿Cómo estás? No fuerces mucho. -dije acariciando su brazo. Todavía estaba reciente lo de su accidente.-

-No te preocupes, cielo. Los compañeros siempre me echan una mano. -sonrió. -¡Por cierto! Tu hermana se encuentra en el barco. Va a dar una vuelta por los alrededores. ¿Por qué no la acompañas?

-¡Papi! ¡Yo ya me voy! -Camila se acercó. -¿Lauren?

-Cariño, le estaba contando a Lauren, que ibas a dar una vuelta en el barco. ¿Por qué no van juntas? -sonrió mientras lo decía.-

-Otro día mejor, Ale.

-¿Cómo que otro día? Naveguen un rato, y así pasan tiempo juntas. ¡Háganlo, por mi! -sonrió enormemente. -

.........................

Camila y yo, nos encontrábamos en el barco.

Al cabo de unos minutos, me acerqué a la cubierta del barco, donde se encontraba. Estaba sacando varias cosas de un maletín poniéndolo en la mesa.

-¿Qué es todo esto? -ella levantó la mirada, para después seguir a lo que estaba haciendo.-

-Lauren, no quiero preguntas. -fruncí el ceño.-

Me acerqué a ella cogiendo su brazo, y haciendo que me volviera a mirar.

-Suéltame, Lauren.

-No. No hasta que me digas que es todo esto. -miré en la mesa, y había un pequeño telescopio. -Te lo vuelvo a repetir. ¿Qué es todo esto, Camila?

-Está bien. -la solté del brazo, sentándonos una en frente de la otra. -Estoy haciendo mis prácticas en el acuario del municipio. Sobre biología marina. -pasó una mano por cuello nerviosa, para seguir. -No sé si te has enterado, pero han encontrado en el muelle, La Cruz, tres fallecidos.

-Si, me he enterado. 

-En ese mismo día que encontraron los cuerpos, llegaron varios peces intoxicados del mismo lugar. Esos cadáveres, fueron asesinados, Lauren. No fue por ahogamiento.

-Eso no lo han dicho. -añadí.-

-Quiero ir hacia ese muelle, y coger varias muestras. Quiero saber que está ocurriendo. -se levantó. -Amo el mar. Es mi vida. Y no voy a tolerar, que alguien lo siga masacrando. -me levanté.-

-Te entiendo. -me miró. -Pero por lo que me has dicho, el asusto es más complicado y peligroso de lo que pensaba. 

-Tengo pensado tomar las muestra esta noche, con el cambio de guardia. Iré buceando. 

-Lo haré yo. -ella negó rápidamente.-

-Lauren, te lo he contado. Pero no voy a permitir que te involucres. 

-¿Piensas qué me voy a quedar de brazos cruzados? No lo voy hacer. Ahora sentémonos, y dime que tienes pensado.

...............................

Eran las cuatro de la madrugada, cuando Camila había regresado al barco. Había tomado varias muestras, y ahora se encontraba investigándolas. 

Miré el reloj, y eran las seis. Dentro de un rato amanecería. 

Sin duda, la admiro cada día más. Arriesgo mucho haciendo esto. Pero lo hizo, para saber la verdad y lo que estaba pasando. 

-Dentro de unos minutos llegamos a puerto. -dije mientras me acercaba a ella.-

-Yo llevaré las muestras que he cogido, hasta el laboratorio del acuario. -miró mis manos. -¿Y esa manta?

-Para ti. -la coloqué sobre sus hombros mientras se acurrucaba en ella. -Está haciendo bastante frio.-

-Gracias, Lauren. -fruncí el ceño. -Por todo. Sin tu ayuda, no lo habría conseguido. Sé que entre nosotras, las cosas no han sido fáciles. En realidad, no las he hecho fáciles. -negué.-

-¿Por qué me fuiste buscar aquella vez al aeropuerto? -ella desvió la mirada. -Y las cosas, la hemos hecho difícil las dos.-

-En ese momento no me importó nada. Solo quería que no te fueras. 

-Todo este tiempo, he tenido el corazón y mis pensamientos dormidos. -me miró. -Y estaba bien así. Pero, te veo y... ¡Maldita sea! Comienza a latir como un loco. -cogí su mano poniéndola en mi pecho. -¡Eres la única que atormenta mi pasión hasta dejarme sin aire! 

Se levantó rápidamente, haciendo que la manta callera al suelo de la cubierta.

-Cuando te conocí, sentí, todo, por ti. -me miró cayendo lágrimas por sus mejillas.-

Me acerqué a ella, abrazándola contra mi. 

Es aquí, entre sus brazos, donde quiero estar siempre.

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¡Nos leemos pronto, gente! :)

PD: Quiero decir que, no sé para nada escribir, ni relatar. Solo escribo porque me gusta y me apasiona imaginar y relatar las historias. ¡Pero no soy para nada buena en ello! Así que, muchas gracias por leer y comentar. :)




Cianuro y Miel (CAMREN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora