No podía dejar de mirarse en aquél espejo, habían pasado ya algunos años desde que no utilizaba ese color. Recuerdos terribles invadían su mente en ese momento, como flashes recordándole el porqué había decidido cambiar de look, porqué se escondía en un solo color que renovaba cada vez que las raíces en la hebras de su cabello aparecía.
Se sentía en el pasado, sentía la ansiedad devorándose lentamente todo dentro de él, tenía miedo de salir de su habitación pero no tenía opción ya que le tocaba chequeo en ese instante.
«Te ves horrible, muy vulnerable, patético diría yo. ¿Ya entiendes porqué debes consultarme todo primero?»
Replicó la voz de su cabeza, haciendo que el ahora pelinegro se golpeara levemente en el cráneo.
— Debo tener este color por mí bien, con este color no significa que voy a volver a pasar por lo mismo. Solo debo tenerlo durante mi estadía aquí. –decia ante cada golpe recordando las palabras del doctor Jung antes de que las enfermeras le colocarán el tinte– no te debo prestar atención tú no tienes poder sobre mí. –expresó apretando ahora sus puños hasta que una voz externa lo hizo salir de sus pensamientos.–
— Joven Jung, ya es su turno para el chequeo semanal. –anuncio la enfermera con una sonrisa en su rostro– ¿Está todo bien? –interrogo dando a entender a Hoseok que había durado más tiempo de lo debido en el baño.–
— E-Estoy bien, solo no me acostumbro. –apunto a sus cabellos con una sonrisa apretando sus labios.–
— Se ve muy bien joven Jung, el sábado cuando vengan sus visitas de seguro los dejará sin palabras por lo guapo que se ve.
Dicho esto, Hoseok se dirigió a la puerta con un poco más de confianza, ya tenía dos semanas en aquella clínica y solo faltaban tres días para su primer sábado de visitas. Las ganas de ver a su hyung favorito o a sus mejores amigos aumentaban al paso de los días, esperaba que pudieran visitarlo así sea por cinco minutos.
Esas dos semanas para Hoseok fueron entre extrañas y las peores de su vida, no hubo día que la voz no le dejase en paz, un paciente casi lo golpea por su llamativo color de cabello –motivo por el cual le hicieron teñir a negro–, y el extrañar a sus amigos hizo de esos días más caóticos.
Pero tenía a Seunghee que nunca le abandonó, y hasta ahora seguía siendo su 'amiga defectuosa' tal como ella se había catalogado.
— Hoseok ya es hora de empezar la primera dosis de medicamentos, estarás en revisión estos días para poder saber que resultados han generado en tí. Por favor, necesito que me informes de todo en cuanto a tu salud.
— Pero aquí hay cámaras hasta en el baño doctor Jung...
— Lo sé, pero también necesito que me digas sino te causan algún efecto negativo los fármacos que te daremos. Recuerda que la comunicación es lo más importante aquí. –recalco el doctor Jung recostándose sobre su silla.–
— Está bien, lo mantendré informado. –asintió con la cabeza forzando una pequeña sonrisa.–
— Ten paciencia Hoseok, este es el comienzo y verás que tendrás un buen resultado.
— Eso espero doctor Jung... Eso espero.
....
— Extraño la comida de afuera, una hamburguesa con papas fritas y una gaseosa. –expreso Seunghee mirando el pan tostado y jugo que les dieron de cena–
— Eso suena muy americano, yo extraño comer fideos de frijol negro con brochetas de cordero. –continuo el pelinegro tomando un sorbo de jugo– a Yoongi hyung le encantan las brochetas de cordero.
— De tanto que hablas de "Yoongi hyung" –expreso con burla– me haces querer conocerlo ya. –la fémina proporcionó una mordida a su pan– el sábado estaré contigo para que me presentes al gran Yoongi. –la menor infló sus mejillas como toda niña berrinchuda haciendo estallar de ternura al mayor–
— ¡Ya! Deja tus celos Seunghee, te presentaré a Yoongi hyung y luego nos dejaras solos porque a nadie le gustan los metiches. –añadió el mayor limpiando las mejillas llenas de migajas de pan de la contraria–
— Voy a golpearte sino me lo presentas. –sentencio con la mirada para luego reír y así contagiar al pelinegro con su risa–
Al terminar su cena, a cada joven le dieron su dosis de medicina que les tocaba para así llevarlos a cada quien a su habitación.
Hoseok se sentía bien, no sintió nada del otro mundo al paso de los minutos todo seguía tranquilo en él. En cambio para Seunghee, su energía iba disminuyendo ya que las pastillas de la noche la dejaban con muchísimo sueño.
Hoseok no sabía si era efecto del medicamento o el ver a su amiga en esas condiciones, pero el sueño se apoderó de él, tanto que no podía mantener sus ojos abiertos. Así que apenas lo dejaron en su habitación se acostó en la camilla y no supo más de él por esa noche.
....
¡HOLA! cuanto tiempo, extrañaba venir por acá y dejarles otro capítulo. Tal vez no sea muy bueno, pero es necesario.
Disculpen, en serio disculpen el que haya dejado la fic tanto tiempo... Es que, mi vida a cambiado tanto estos últimos meses (tanto pero tANTO) que la inspiración, las ganas no me venían y prefería tomarme mi tiempo a traerles algo asqueroso.
Y bueno hoy aproveche que me volvió la inspiración y todo todo todo así que aquí me tienen bebés \0/
Nos vemos pronto, muchas gracias por leer, votar y comentar. Los amo mucho.♡
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Personality ⇨•YoonSeok•
FanfictionEl trastorno de identidad disociativo es un diagnóstico controvertido descrito como la existencia de dos o más identidades o personalidades en una persona, cada una con su propio patrón de percibir y actuar con el ambiente. Hoseok sufría de trastor...
