•Perdóname Jon• -Eduarjon- (Eddsworld) EDITANDO

Capítulo 12

- Casa de los padres de Jon - 

- ¿sí? ¿Quién habla? 

- ¡H-hola! Señora, Ska, soy Mark, ¿se acuerda de mí? 

- ¡Ay, claro que sí! Que gusto escucharte Mark, ¿qué pasa, cariño? ¿Y Eduardo? 

- Él está bie- 

- ¡Aquí estoy, señora! ¡¿Cómo le va?! 

- Ay lindos, todo bien por aquí, que gusto escucharlos de verdad, se escuchan muy diferentes a como los recuerdos, ya deben estar muy grandes y guapos, ji, ji ¿Querías decirme algo Mark?

- Amm... Sí, queríamos preguntar si Jon, no está ahí de casualidad. 

- ¡Claro que sí! ¿No les aviso que ya había llegado? 

✒𝓔𝓭𝓾𝓪𝓻𝓭𝓸✒

Sentí una calma en el pecho como nadie más en el mundo, di un fuerte suspiro de alivio, me alegra que Jon, no sea tan valiente en estos casos, si en verdad todo le diera igual, se hubiera ido a otro lado, desapareciendo completamente de la vista de todos, Dios mío, en verdad no puedo seguir creyéndome que al fin supimos donde está, juro que casi lloro de la felicidad. 

- No, tal vez se le olvidó.

- Ese Jony, es todo un olvidadizo, hace un rato, me dijo que se le olvidó su cepillo de dientes.

- Je, sí, es todo un olvidadizo. 

Solo escuchaba como, Mark y la señora, ska, seguían hablando, esa señora siempre me ha caído muy bien, siempre es amable y comprensiva, recuerdo las veces que íbamos a la casa de Jon, siempre nos hacía un delicioso plato de fruta para todos, se sentía como un verdadero hogar estar ahí, no sé por qué, Jon, decía que quería irse de su casa, tal vez era por su padre. 

- hasta luego señora, ska, bonita noche. 

- ¿Qué te dijo? 

- Jon está bien, me dice que Jon, solo se quedara unas semanas con ellos, que solo fue de visita. Tú y yo sabemos que no es así. 

- Esa visita durará menos de lo que él dice, mañana iré por él. 

- Hey, hey. Deberías darle un tiempo. 

- No puedo darle más tiempo, necesito que sepa que en verdad lo siento, hasta ya tenía una carta para él. 

- No lo presiones y tú tampoco te presiones, él te quiere a pesar de todo, y él también sabe con certeza que lo quieres mucho. 

- Pero...- 

- ¡Shu! Escucha, porque no mejor en vez de darle esa carta, preparas tu disculpa para decírselo tú mismo, mientras lo practicas servirá para que todo esto se enfríe un poco. 

-... Está bien. 

- Genial, vamos a casa.