Capítulo 13

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Dos meses después 

✒𝓔𝓭𝓾𝓪𝓻𝓭𝓸✒

Ya han pasado dos meses desde que Jon se fue de casa, en verdad que le echo mucho de menos, todo es muy aburrido y gris desde que él no está en casa, y no es solo cosa mía, también Mark lo nota, hasta decidí trabajar el turno completo desde que tengo la oportunidad, ya que no hay nada que hacer en casa, así que día y noche estoy aquí metido, de menos ya no me dejan solo de guardia también me ponen como suplente del encargado cuando no está y unos de esos días es hoy, solo tengo que darle algunas vueltas a los trabajadores y revisar unos aburridos papeles sobre ropa. 

- Que aburrido está el día... 

Me dije mientras miraba mi teléfono en busca de alguna distracción, revise el chat que tenía con Jon, todos mis mensajes en visto y si me respondía solo era con un sticker de un gato levantando el pulgar, eso me desanimaba un poco, pero aun así no dejaba de mandarle mensajes diarios preguntándole como estaba. 

- Otra vez el visto ... Oh, pero subió un estado. 

Mire el estado, era una foto de él con su padre, Jon se veía un poco obligado en la foto, quisas hasta su padre le rogó para que la subiera, ja, ja. Me da risa de imaginar la escena, sin más la respondí con el siguiente mensaje: "Cada día te pareces más a tu padre, mándale saludos de mi parte :) " 

Sin esperanzas a una respuesta, deje el teléfono de lado, pero me desconcerté un poco al ver que en cuestión de segundos ya tenía una respuesta. Me emocioné demasiado, así fuera el mensaje más seco del mundo, no pude evitar emocionarme. 

- Cállate tarado, dice que también te manda saludos, que haber cuando lo visitas. 

- ¡Ja! Dile que ya luego lo visitaré.  

En eso se me vino algo a la cabeza, tal vez no era lo más correcto, pero necesitaba hacerlo. Solo esperaré pacientemente a que venga mi jefa y depende de lo que diga, decidirá si mi idea se lleva a cabo o no, espero de todo corazón que si se pueda. 

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- Si Eduardo, está bien, puedes faltar un tiempo, pero ten en cuenta que me repondrás todo ese tiempo que no vas a venir. 

- Sí, señora, lo tomaré en cuenta, se lo agradezco tanto. 

- Pero más te vale regresar, eres uno de mis mejores trabajadores. 

- Le prometo que regresaré.  

- Bien, disfruta tu tiempo libre, aprovéchalo. 

- Claro que sí, señora, nos vemos pronto. 

- Adiós, Eduardo. 

¡Si! Carajo, no pensé que funcionaria, me lo merezco sin duda, no había tenido vacaciones en todo el año porque a un gran hijo de puta se le ocurrió irse cuando estaba a punto de tenerlas, pero eso no importa. Ahora solo tengo que ir a casa y empacar algunas cosas para ir con Jon, mi emoción era tan grande que no tarde nada en llegar a casa, probablemente hasta me pase algunos altos, pero que más da.  

- Bien, ¿por dónde empezamos? 

Empacaba algunas cosas en mi maleta, solo lo básico como mi ropa y mis cosas de aseo personal, estaba tan concentrado que no escuche a Mark llegar. Estaba atrás de mí, observándome, recargado desde la puerta de mi habitación.  

- Hola Eduardo.

- ¡Ah! Mark, me asustaste, idiota.  

- ¿Qué haces? 

- Amm... nada, solo empaco mis cosas.

- ¿Por qué? ¿A dónde vas? 

- Con Jon, obvio. 

- Ehhh, y... ¿Él ya lo sabe? 

- No.

- Deberías decírselo.  

- ¿Para qué? ¿Para que me diga que no vaya?, nah, mejor llego de sorpresa y así no podrá rechazarme.  

- No lose Eduardo. No me convence mucho tu idea. 

- Relájate, no pasará nada malo. 

- De menos pudiste haberme dicho antes. 

- Apenas se me ocurrió hoy. 

- ¿Apenas hoy? Mierda, no te lo pensaste ni dos veces. 

- En verdad quiero a Jon de vuelta. 

- *Suspiro* Yo también lo extraño, si te soy sincero. 

- Bueno, pues me voy. 

- Ya no estará nadie en casa, ¿acaso me odian? 

- Ja, ja, ja. Cálmate, pronto estaremos todos juntos de nuevo.  

Mark me llevo hasta la estación de autobuses, es un viaje un poco largo, así que estaría llegando allá por la mañana, ya que pasan de las once de la noche; me despedí de Mark y me deseo suerte con Jon, le di las gracias y solo vi como arrancaba el auto para irse, fui al autobús correspondiente y me subí en él, pero para asegurar pregunte al conductor a donde llevaba el autobús. 

- ¿Este autobús lleva a Edimburgo? 

- Así es. 

- Genial, gracias. 

Mire por la ventana mientras daba un suspiro, estaba nervioso, tenía miedo de que todo esto saliera mal, que no importa cuantas veces me disculpe o cuantas veces intente arreglar las cosas con Jon, me da tanto miedo que nunca quiera regresar a casa, ya da igual si no acepta mis disculpas, lo único que quiero es tenerlo de vuelta, que esté en casa y que de menos pueda verlo y escucharlo, con eso me seria más que suficiente; otra vez esta sensación de hormigueo en todo el cuerpo, no la puedo evitar cada que pienso en él, me lo niego siempre, pero es algo que simplemente no puedo ocultarme más... 

Me gusta Jon. 

Capítulo editado. 

•Perdóname Jon• -Eduarjon- (Eddsworld) EDITANDODonde viven las historias. Descúbrelo ahora