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"Yo no quiero hacer lo correcto, pa' esa mierda yo no tengo tiempo".
-Jen...- jadeó Taehyung mientras Jennie se aferraba a su cuello. El chico colocó las manos sobre el trasero de ella y lo apretó fuertemente estrechándola contra su miembro duro y palpitante.
-Esto está mal- rió la castaña contra sus labios.
-¿Y eso qué? Da igual- rió él también volviéndola a besar.
-¿Y si mejor paramos ya?
-¿Quieres parar?- ella negó. -Entonces no te preocupes por lo demás y sigamos. Sin arrepentimientos Jen- la miró a los ojos.
-Sin arrepentimientos, Tae.
No vas a escuchar un lamento. Pa' esa puta mierda ya no tengo tiempo.
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Kim Taehyung y Jennie Kim eran los hermanastros más unidos que cualquiera haya podido conocer... O al menos eso era lo que los demás veían a simple vista. Nadie imaginaba que detrás de esa fachada de hermanastros inseparables se encontraba una pareja platónica y prohibida que se amaba en secreto, detrás de los ojos de todos.
Todo había comenzado a los doce años, las hormonas se revolucionaron y con ellas el deseo insaciable hacia el otro fueron apareciendo.
Quizás estaba prohibido, quizás estaba mal, pero ellos no eran hermanos y cualquiera que dijera que su amor era imposible solo se dejaba llevar por los prejuicios y la moral estúpida de la sociedad donde vivimos.
Jennie amaba a Tae. Tae amaba a Jennie. De esa manera loca y desmedida que te consume y te nubla los sentidos. ¿Qué de malo podía haber en ello?
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-¿Te gusta?- se estremeció excitada al escuchar la voz de Taehyung en su oreja. -Me deseas ¿verdad?- preguntó mientras le introducía un dedo. –Por eso estás tan húmeda.
-Tae...
-¿Quieres más?- asintió mientras se mordía el labio.
Le sacó la camiseta y le besó los senos mientras se sacaba los pantalones. Jennie se estremeció mientras veía cómo Tae se quitaba la camiseta y la lanzaba al otro lado de la habitación.
–Te voy a follar hasta que grites- se introdujo en ella de una sola estocada sacándole un fuerte gemido de sorpresa y placer.
-Ahh, TaeTae- comenzó a jadear al sentirlo completamente dentro de ella. -Mierda...- jadeó la chica cuando el pelinegro introdujo dos dedos en su trasero. -Ahhh, más Taehyung, más- volvió a introducirse en su vagina y tomó el consolador para seguirla penetrando por detrás.
Taehyung la miró deslumbrado. Estaba más malditamente sexy que de costumbre, sudada, despeinada, exhausta, con la respiración entrecortada y mordiendo las sábanas para no chillar de placer. Al ver que Jennie estaba a punto de correrse, Taehyung aceleró sus movimientos casi con furia haciendo así que la chica explotara en un increíble orgasmo.
-Mierda...
Antes de que muera yo, pienso follarte hasta borrar el límite entre los dos.
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Una mueca de placer se dibujó en su cara al sentir su miembro dentro de la suave y caliente boca de Jennie
-Argh Jen...- tomó su cabeza con las manos y la meneó logrando un ritmo perfecto.
Finalmente se acomodó en el escritorio y rodeó el miembro del chico con sus senos y empezó a bombear de arriba abajo mientras lo observaba intensamente .
-Basta, no me quiero correr así- la acomodó de nuevo y la penetró de golpe ganándose un fuerte gemido por parte de ella.
-Ahhh Taehyung, más... -Empujó la cabeza Jennie hacia atrás pegando su espalda a su pecho para poder besarle y chuparle el cuello.
-Dios...- siseó mientras se corría en la espalda de ella. –Ven aquí- la tomó en sus brazos y se sentó en la silla del escritorio con ella en brazos. La besó, la abrazó y le hizo mimos durante un buen rato.
-¿Seguro que esto no está mal?- preguntó pegándose a él.
-No es correcto, pero ya estoy hasta la mierda de hacer lo que los demás dicen que es correcto. Todos vamos a morir, y no sé si los demás piensan que no, pero yo pienso que antes de morir llegaré a mi propio cielo.
Antes de morirme quiero el cielo.
...
No recuerdo, pero sé que me pidieron un Taennie, así que aquí está.
