Akatsuki No Yona.Erendini. #wattys2019

17. Búsqueda

Kija se adelanto y mirando a su alrededor respiro profundamente, ya tenia la respuesta.

- No esta aquí- aseguró.

Habían caminado ya un par de millas y se adentraban cada vez más en el territorio de la tribu del fuego sin ninguna respuesta favorecedora.

- No va a ser fácil encontrarlo, ¿verdad? - Yoon miro intensamente el mapa que sostenía entre sus manos - habrá que retroceder unas 10 aldeas-

- No podemos ir ahí- dijo hak mientras escudriñaba el mapa- es un campo de entrenamiento para el ejercito de la tribu -añadió.

- Entonces será mejor no ir en esa dirección-.

Hyō se acerco lentamente al peñasco mas cercano mientras las voces de hak y yoon seguían debatiendo su destino, se paro a lado de kija y miro hacia abajo. El paisaje era hermoso y a juzgar por el humo creciente entre los arboles, debajo de ellos había una aldea.

- ¡Ya está!, tendremos que caminar un poco pero ya tenemos las rutas hacia tres posibles lugares- Yoon doblo el mapa y lo metió a su morral- ¡Sigamos!

Precipitándose por el bosque, Yoon los guío entre pequeñas aldeas y pequeñas arboledas, pero en ninguno de ellos hallaron lo que buscaban; el sol se había estado ocultado hacia un rato marcando el final de la tarde y el animo había decaído, éste era el último lugar que les quedaba pero Kija había negado con la cabeza una vez más.

- ¿Aquí tampoco?- Yoon suspiro - es raro, ya pasamos por todos los lugares posibles pero.... no habrá cruzado la frontera, o sí? -yoon dejo flotar la pregunta y no recibió repuesta.

- No estará mal tu nariz serpiente blanca- añadió Hak con tono de burla y casi al instante Kija se giro para arremeter contra él, pero algo llamo su atención. Sentada entre ellos yona acariciaba su tobillo mientras suspiraba por el cansancio.

- Estoy bien- aseguro ella al darse cuenta de su mirada- solo estoy cansada- añadió.

Yoon se acercó a Yona y le tendió un cantimplora -Es sidra, hará que te sientas mejor- se volteó hacía los demás y sugirió- Será mejor que descansemos por ahora-.

Para cuando el cielo era ya oscuro y la luna se podía mirar entre los arboles ya habían logrado poner un pequeña fogata e instalado sus cosas alrededor de ella. Hak y Yona habían ido por mas leña para mantener viva la fogata y Yoon se disponía a cocinar, poniendo justo en ese momento una gran olla llena de agua sobre el fuego. Un poco mas lejos, en un lugar que apenas tocaba la luz de la fogata, Hyō le miraba atenta mientras dejaba caer sus pertenencias de forma descuidada, si algo sabía era que debía ganarse su lugar entre ellos. Así que sin pensarlo mucho, se acerco a Yoon y lo observo con diligencia, teniendo la esperanza de encontrar algo en que serle útil. Después de un rato Yoon no pudo aguantar más su mirada y le asigno una tarea: trozar y limpiar las raíces comestibles que el mismo había coleccionado a lo largo del día y al mirar la expresión satisfecha de la chica, decidió que después de todo lo único que quería era ayudar y no pudo evitar pensar que habría sido más fácil que lo hubiera expresado con palabras.

Hyō se sentó a su lado y con un poco del agua de su cantimplora enjuago las raíces. Para este punto del día, podía asegurar con certeza que ya se había formado una ligera impresión de la personalidad del chico. A pesar de parecer tan joven, incluso un poco más que ella, aquel chico de ojos azules los había guiado por el bosque y no solo eso, si no que se había encargado de recolectar comestibles e ingredientes medicinales. "Es un genio, sin duda" pensó y agito su cabeza afirmando su pensamiento. Hyō le hecho un ultimo vistazo y alejándose un momento de sus pensamientos sacó una de sus dagas, aquella que tenía una empuñadura de arce y la deslizó con destreza por las raíces.