Demond Eyes/ Una historia llena de drama, tragedia y amor. Donde Harumi y Ryûsei, hermanos de sangre y alma, son embarcados a asesinar al demonio que mató a sus padres, y que dejó a Harumi con una terrible maldición en los ojos. Con su destino ya es...
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POV Harumi
Mis manos se movían con rapidez y agilidad. Trataba de quitarle el vaso a Kanao, no era para poder ganarle y demostrarle que era fuerte... Solo quería la medicina, además de que su mirada, aunque siempre sonriera, me ponía nerviosa e incómoda. El líquido recorría mi rostro, por ya cuarta vez.
Esto no había pasado la primera vez que hice este tratamiento, por lo que supuse rápidamente, que fue por lo de ayer. Ese momento, donde descubrí, que no le caía bien. Quería reparar eso, pero aún no tenía las palabras adecuadas para lograrlo...
Yo: Diablos... –no pude agarrar ningún vaso a tiempo.
Aoi: Vamos a tu siguiente etapa Harumi –me ordenó la pelinegra, con algo de extrañeza en su rostro, ante mi falla agilidad.
Me tendió su mano para que pudiera levantarme. Con un cansado suspiro, la tomé y me pude reincorporar, para así, dar comenzó a la siguiente etapa, la cual era mi favorita.
Aoi: ¿Estás bien? Te vez perdida y preocupada –comentó en un susurro
Yo: Descuida Aoi-Chan, solo estoy desconcertada... Es todo. –miré mis pies para que mi rostro no fuera visto por Aoi. Aunque su mirada me pentraba lentamente... –No me mires así. Me pones nerviosa
Aoi: Pero si no me cuentas que sucede Harumi. Estuviste rara en el transcurso de la segunda etapa, no te había pasado eso ayer...–explicó sin quitar la vista de mi– ¿Ocurrió algo ayer? ¿Fueron esos idiotas?
Yo: No son idiotas. Y no, no fue eso...
Aoi: ¡Por favor Harumi, cuéntame! –me sacudió
Yo: ¡Waa, no me sacudas Aoi-Chan! –la sujeto para no caerme– ¿Además, desde cuando te preocupas por mí?
Aoi: E-eh.–se puso nerviosa. Logré ver un ligero sonrojo en sus mejillas– V-vamos a empezar
Una ligera risa no pude contener. Se me hacía muy tierno el que Aoi se preocupara por mi estado de ánimo, eso que no es mucho de mostrar sentimientos, a parte del de enojo. Es como un Inosuke versión mujer... O algo así
El entrenamiento fue duro. Al final perdí ante Aoi y Kanao. Si, estoy algo torpe hoy, y mucho más por las miradas que me lanzaba la callada pelinegra, al empezar el juego.
Debe pensar que soy un fracaso como demonio. O algo peor, que soy un desastre.
Me daba pena y lástima el que todos me vieran con extrañeza hoy. Sobre todo mis amigos. No quería que se preocuparan por mi por cosas insignificantes, pero aún así, quería sus consejos...
