🎴XIII🎴

1.4K 159 48
                                    

Aviso: ¡Leer el comentario que está abajo cuando terminen!

Todo esfuerzo debe empezar por algo duro

Harumi

Capítulo 13: Un poder único...

POV Harumi

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

POV Harumi

El pánico ya se había desvanecido. Ahora, solo quedaban las pocas esperanzas que tenía puesta en mi misma y en Zenitsu.

Espero que funcione, por que si llegara a no funcionar y, si muere... No me lo perdonaría.

Me hice un ligero corte en mi brazo. La sangre no tardó nada en salir, y manchar mi brazo con una pequeña línea del espeso líquido. Ahora venía la parte difícil. El que su cuerpo acepte mi sangre...

Antes de hacerlo, me acordaba de las palabras de Tamayo-San, las cuales me habían dejado confundidas al principio:

"Tu sangre, es especial Harumi. Eres capaz de manipularla a tu gusto, desde convertir a alguien en demonio a matarlo... Pero, hay un poder oculto, que ni yo puedo averiguar cual es, pero es poderoso, al igual que peligroso. Ya que muchos querrán arrebatartelo"

Una y otra vez las palabras rondaban mi mente. Que pasaba si llego a lastimar a Zenitsu en vez de ayudarlo... No sabré la respuesta si no lo intento.

Yo: Vamos, espero que funcione

La sangre ahora goteaba, hasta caer en la boca del rubio. Estas se adentraban por su garganta, lentamente, hasta llegar a lo que es sus órganos.

Yo:Técnica de demonio de sangre, ¡Curación compartida! –grité juntando mis manos.

Un dolor punzante se sintió en todo mi cuerpo, se sentía como si miles de cuchillas te estén atravesando a la vez. Mi respiración era acelerada, pero en ningún momento dejé de juntar mis manos para que la curación se completara.

Yo: ¡Ahg! Tsk, d-despierta, Zenitsu...

POV Omnisciente

La pelinegra terminó rendida por todo el dolor, que no supo cómo, terminó cayendo de la casa flotante al suelo. El gorrión no dejaba de volar alrededor de ella con ojos lagrimososo.

Chuntaro: ¡Pío, Pío!

El pequeño ave, decidió irse lo más rápido posible para buscar ayuda, de alguien que estuviera lo más cerca posible.

Zenitsu empezó a respirar tranquilo, le dolía todo el cuerpo, pero ya no estaba como antes, ahora sus ojos tenían más brillo que antes, y la inflamación de su mano ya no estaba ahí.

No podía levantarse, pero si girar su cabeza. Se asomó con mucho dolor hasta poder ver perfectamente a la pelinegra, quien yacía en el suelo completamente desmayada y con sangre en su brazo y labios.

𝕯𝖊𝖒𝖔𝖓𝖉 𝕰𝖞𝖊𝖘 | Kimetsu No YaibaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora