당신의 귀환 [Tu Regreso] K.SJ

17 (Final)

Soomin- Oh, Jin... Pasame eso por favor...

Susurró tranquila mientras terminaba de pelar algunas frutas para la ensalada que preparaba.

Jin- Amor, debes tomar reposo... Ya sabes que estas en una etapa delicada.. Acuestate y yo termino todo, ¿Si?

Chae- Vamos ma, te acompañaré y bajaré a ayudar a papá ¿Si?

Soomin suspiró derrotada y asintió.

Su embarazo se había complicado al cumplir los 7 meses, dandose cuenta que la posición en la que el bebé permanecía era algo delicada y algo riesgosa para la vida del mismo, sumando que Soomin se había enfermado tambien, teniendo que permanecer hospitalizada por 1 mes, y ahora estaba en su casa, a unas 2 semanas de dar a luz a su precioso hijo, al que había decidido llamar Dohyon, su enfermedad podía volver en cualquier momento y llevarsela si deseaba, lo único que la mantenía tranquila, era que su hijo no lo heredaría, o eso esperaba.

Leucemia.

Jin- ¿Ya se durmió?

Chae- Si, está muy tranquila, acaricie sus cabellos y se durmió... Fue fácil!

Jin rió y abrazó a su hija para ir hasta la sala y ver una película juntos, mientras la madre dormía.

Su relación se había vuelto bastante linda, Jin pasaba cada día en la casa, llegando a mudarse para estar más pendiente de ambas y del bebé en camino.

No había cosa que le emocionara más que pensar en el bebé... Pronto podría tenerlo en sus brazos, verlo crecer, cuidarlo y estar a su pendiente, comprarle cositas y jugar con él... Tambien poder disfrutar de la niñez de su hija ChaeYoung y por sobretodo... De la presencia, el aura, las sonrisas y risas de su linda novia.

Pequeños quejidos y sollozos se escuchaban por la casa, era de madrugada y las contracciones habían empezado. Jin despertó de inmediato y tomó las cosas para llevarlas al auto y volver a subir por su hija, llevandolo dormida hasta el auto y sentarla con su cinturon en el asiento delantero, Soomin iría en el trasero.

El camino al hospital se hacía eterno, era solo contracciones por el momento, pero el parto sería pronto. Se había adelantado 1 semana de la fecha pre-vista, lo cual no era malo, pero Jin no se sentía preparado, tenía una sorpresa para Soomin, y debía hacerlo al llegar al hospital, pues, quería hacerlo antes de que naciera el bebé...

Jin estaba nervioso, Soomin aun seguía con algunas contracciones pero no tenía al bebé. Se encontraba cerca de ella, caminando por la habitación del hospital, tomando su mano para sostenerla si llegaba a pasar algo o se tropesara, pero el momento había llegado. Jin tomo valor y soltó un nervioso suspiro.

Jin- S-Soomin, hay algo que quiere decirte... Pedirte...

Soomin se sentó en la orilla de la camilla, con cuidado para no despertar a su hija, que seguía dormida aun cuando ya había amanecido.

Jin- Eres... Muy especial para mi, me has hecho el hombre más feliz aun sin yo estar presente, sigo debiendote tantas explicaciones que con el tiempo, se iran aclarando, pero ahora, ese no es el punto, quiero estar junto a ti, quiero despertar cada día a tu lado, verte sonreir todo el tiempo, ser ese hombre que este para ti en las buenas y en las malas, no importa en que situación estemos o donde estemos, seremos tu y yo...

Soomin- J-jin, p-para...

Jin se arrodilló y mostró aquel precioso y sencillo anillo de oro blanco con un pequeño diamente, Soomin sentía su corazon ir con rapidez y fuerza, en cualquier momento se saldría de su pecho.

Jin- ¿Te casarías conmigo, Soomin..?