six

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Ahora el apellido de la familia sera Black. Harry ahora será Henry
enjoy :)

Miro hacia el reloj que estaba en la sala de espera. La chica de la recepción limaba sus uñas causando un ruido bastante exasperante a decir verdad. Llevo alrededor de diez minutos sentado aquí tratando de guardarme cualquier comentario pero cada segundo parece más imposible. Luego, hace unos segundos, los gritos de la pareja que estaba dentro comenzaron a incrementar su volumen. Me pregunto cientos de veces porque carajos estaba aquí; ayer juraba que no volvería jamás, pero la respuesta que lanza mi subconsciente siempre es la misma: lo necesito.

De un segundo a otro, la misma pareja de ayer sale de la oficina, aún discutiendo. Suspiro y acaricio mis muslos en señal de nervios. ¿Qué carajos iba a decirle?: "Hola, estoy de vuelta después de salir corriendo como imbécil ayer". O quizás podría simplemente decir un: "Hey, tu marketing es bastante bueno, aquí estoy de nuevo".

¡A la mierda! No tengo porque darle explicaciones. La secretaria me llama para que pase a la consulta. Me levanto, me acerco a la puerta y le doy tres leves golpes a esta, para recibir un "adelante" casi inmediato. Tomo una gran bocanada de aire, alzo levemente mi frente y abro la puerta para luego introducirme al consultorio del psicólogo quien me mira con naturaleza. Me hace un pequeño ademán para que me siente frente a él, lo cual hago.

—Hola, James— me saluda cordialmente y yo sonrío de lado.

—Buenas tardes, señor Hocking— le devuelvo el saludo y este se cruza de piernas. Escucho la música de fondo y relamo mis labios—. Veo que hoy escucha música moderna— comento, él sonríe de lado y toma su libreta junto con su pluma. La música era suave, relajante, pero no era música clásica.

—Así es. Algo un poco más apegado a la época y gustos de mis pacientes, pero con un efecto parecido al de la música clásica— responde. Espero unos segundos ha que me pregunte porque había vuelto, pero el momento parece no llegar. Frunzo levemente el ceño y él se acomoda en su respectiva silla—. Y dime, ¿cómo has estado?— murmura casualmente y yo entrecierro mis ojos. Su posición era segura, denotaba cierta superioridad, la cual odiaba. Relamo mis labios y paso mis brazos por detrás de mi cuello.

—Excelente a decir verdad— admito y este sonríe de lado. Sabía que yo estaba tratando de provocar una pequeña guerra de poderes, en la cual yo las llevaba todas de perder. Estoy aquí por gusto propio, pagándole por brindarme sus servicios, la única persona que pierde soy yo. Igual, el orgullo lo tengo en la frente aún, no agacharé la mirada. No voy a hacerle sentir pena por mi, no voy a ser una víctima, al carajo esas mierdas—. De hecho, creo que ayer fue un gran día.

El doctor Hocking me mira directamente unos segundos, analizando mi rostro y yo le dedico una sonrisa. De un segundo a otro, él apunta algo en su libreta y me mira de nuevo con una sonrisa retadora. Frunzo levemente el ceño.

—Grandioso. Entonces supongo que tengo que volver a hacer la pregunta cliché de: ¿por qué estás aquí?— dice dudoso y yo asiento. Relamo mis labios y siento todo el discurso que había inventado ayer, llegar a mi boca. Trago saliva y suspiro.

—Hay alguien— murmuro y él me mira con atención—. Esta persona de la que te hablo, no es cualquier persona. Es alguien sumamente... especial— susurro. El doctor Hocking simplemente me escucha, me mira directamente y asiente. Sé que a este punto de la conversación no me puedo acobardar de nuevo, ya había comenzado, y se sentía bien hablarlo con alguien en quien confiar—. E-Ella es maravillosa, es simplemente perfecta pero... Es simplemente sinónimo de pecado. No podemos estar juntos y eso me esta matando— suelto y el doctor Hocking asiente levemente y me mira. Yo comienzo a sentir una mezcla de sentimientos en mi estómago, sabía que si no me controlaba, todo lo que estaba pasando por lo cabeza saldría a la luz. Trago saliva y sonrío levemente—. Necesito aclarar mis pensamientos, tener a alguien en que confiar para confesar todo esto sin sentirme juzgado— admito y él asiente.

stepbrotherDonde viven las historias. Descúbrelo ahora