Creo que todos los que me están leyendo lo saben, hoy se celebran 198 años de independencia, casi el bicentenario. Muchos habrán adivinado el día aún sin tocar el calendario por las desfiles patrios o la bandera por todos lados, incluso Google tuvo un lindo detalle al hacernos un doodle.
Sin embargo, a veces no se siente que realmente haya independencia con la opresión constante por parte del gobierno.
Han pasado ya varios años y JOH y sus secuaces se han estado saliendo con la suya, y aunque el pasado viernes 13 de septiembre se llevó a cabo el juicio de Tony Hernández, la Corte de Justicia del Sur Nueva York decidió optar por que los resultados se queden confidenciales entre algunas entidades.
Ser jover en esta era definitivamente no es alentador, no quiero decir que a nuestros padres, abuelos o antepasados la tuvieron mejor o más fácil, porque realmente nunca hubo un período de paz y prosperidad en Honduras, siempre ha habido violencia, incertidumbre y pobreza, pues son cosas que siempre han existido en el mundo, sin embargo sucede que antes se podía sobrellevar mejor gracias a que nuestra gente siempre sabe disfrutar aún en situaciones difíciles
Pero vivir en la época donde el tiempo se acaba y la vida se comienza a extinguir, el calor sofoca y la lluvia inunda, y aún así el gobierno tiene la osadía de mandar a reprimir a aquellos que se oponen a los proyectos que perjudiquen al medio ambiente, realmente es algo intolerable.
He comprendido de que de nada sirve detestar con fervor al presidente si realmente no se hace algo al respecto, creo que de todas formas pronto llegará el fin de su imperio, ¿pero, y después? Siempre va a aparecer otra persona corrupta, y las personas van a seguir en la mediocridad, a menos que de verdad aprendan a razonar, a tener pensamiento crítico, a dejar de engañarse, de ser egoístas, que todos nos unamos y no permitamos que se repita la misma historia.
Tenemos que preguntarnos ¿realmente queremos seguir viviendo de esta manera? ¿Por qué no mejor recurrimos al cambio? No tiene que ser necesariamente radical, puede ser pequeño y lento, pero constante.
Sé que se puede lograr.
Todos somos hermanos, todos nacimos en el seno de nuestra madre Honduras, y los que no, están aquí porque aprendieron a amarla, a disfrutar de sus paisajes, de sus sabores, de su gente.
Sé que hay muchos hermanos que por necesidad o por aprendizaje en están en el exterior, pero no tengo duda de que en el fondo siempre van a recordar con añoranza a su madre patria.
Todos debemos unirnos para hacer una mejor Honduras. No hay verdadero motivo para odiar sin primero dar la oportunidad de conocer a nuestro prójimo y tratar de comprender su situación, pareciera que olvidamos que todos, independientemente de nuestra apariencia o estatus, vivimos en esta tierra que nos ha visto crecer y nos abraza con vientos cariñosos que acarician nuestros cabellos, no permitas que las malas experiencias no te dejen ver la belleza que hay aún en medio de los conflictos, es necesario entender que no hay otra opción que estar informado, pero tienes que seguir viviendo y hacer algo al respecto.
Sentir miedo es razonable, pero todos debemos ser valientes aunque nos cueste, por favor siempre recuerden que cada palabra o acción, por muy pequeña que sea, puede marcar una gran diferencia entre hoy y el mañana.
Les deseo lo mejor a todos ustedes lectores que aún si no sé si los conozco a los llegué a conocer algún día y ni nos demos cuenta, pero quiero que sepas que eres mi hermano y te quiero.
Nunca pierdan la esperanza.
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Honduras
SaggisticaPor guardar ese emblema divino marcharemos ¡Oh Patria! hacia la muerte generosa será nuestra suerte si morimos pensando en tu amor. Defendiendo tu santa bandera en tus pliegues gloriosos cubiertos serán muchos Honduras tus muertos pero todos caerán...