Mi primer Fanfic publicado.
{El hecho de que lo lean es un gusto para mí, y el que les guste, un logro}.
*Los personajes utilizados no son de mi autoría, son propiedad de HASBRO y TAKARA, etc.* A excepción de mis Oc's.
Prisionera de los Decepticon...
Ya cumplí un par de meses en este lugar, y confieso que terminé sintiéndome parte del grupo. Si bien siguen siendo bastante toscos y rudos, por lo menos han aprendido que el trato hacia una dama es muy diferente al que se dan entre ellos como varones.
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He conocido a la mayoría de los Decepticons al servicio de Megatron; no obstante, dentro de un par de días al fin veré cara a cara a Shockwave, pues seré enviada a Cybertron para auxiliarlo en la valoración de la resistencia de algunos materiales conductores y transmisores; así como con unos cálculos muy delicados para aumentar la capacidad y estabilidad de los portales manteniendo un ahorro de energía sustentable. Esto puso algo extraño a mi guardián, quien no para de repetirme lo importante que será que me concentre en el manejo del vehículo y de visualizarme llegando a mi destino; pues de lo contrario podría desvanecerme en otras dimensiones y perderme en la eternidad para siempre (¿acaso está preocupado por mí?). Con esa advertencia me entra mucho miedo y nervios, pero también estoy entusiasmada por la idea de ir al planeta de origen de Soundwave.
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Hablando de orígenes, ayer me atreví a preguntarle cómo era la «reproducción» de los de su especie, y quiénes eran sus padres. Él me respondió que son fabricados de manera individual, y que no tienen padres, sino creadores. Después de eso, yo le expliqué el concepto y proceso de la procreación humana, y me dio la impresión de que se asqueó al saberlo; aunque sospecho que se quedó un poco intrigado, pues se atrevió a frotarme los pechos y el vientre mientras yo descansaba. Me hice la dormida para descubrir hasta dónde se animaría a tocar, pero en el instante que empecé a sentir cosquilleos, por un reflejo involuntario me abracé de sus dedos y se me escapó un quejido bastante agudo. En ese incómodo silencio nos miramos estáticos. Tras el extraño lapso, lo solté; y él simplemente se fue sin decir una palabra. Ha sido el suceso más... «erótico» entre ambos.
*Nota*
Aquel incidente me ha estallado la cabeza con unas preguntas...
