Arcano VI: Los Enamorados

428 63 25
                                        

❖〘•◦•▣•◦•◎•◦✦◦•◎•◦•▣•◦•〙❖

❖〘•◦•▣•◦•◎•◦✦◦•◎•◦•▣•◦•〙❖

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

❖〘•◦•▣•◦•◎•◦✦◦•◎•◦•▣•◦•〙❖

Erase una vez una pareja, en un principio dispar, por ser él un coloso mecánico de metal y ella una humana de carne y hueso; pero a pesar de tan desfavorables diferencias, y tras varias adversidades enfrentadas, por fin ambos concretaban su armoniosa unión; ya que aún cuando ella fuese deseada y galanteada por otros con gran fervor, la fiel dama siempre eligió a su caballero azul, y este agradecido, abandonó a sus impíos camaradas en función de reivindicarse para compartir su vida a su lado. Sin embargo, incluso cuando su compromiso fue aprobado por el bando que protegía a su amada, su antiguo amo y señor recibió el asunto con disgusto, desatándose su ira, pues su servidor más leal y de mayor confianza había desertado a causa del amor; sentimiento que él tanto aborrecía.

     —¡Esa mujer logró despojarme de mi mejor confidente y uno de mis comandantes! —exclamó furioso—. Pagará muy caro esa osadía —afirmó Megatron cerrando los puños.

     —Entonces asumo que tú la ejecutarás. —Se jactó Starscream—. Un tiro de tu cañón neutralizaría sin problemas a esa aberración híbrida que engendraron los Autobots.

     —No... eso sería brindarle misericordia —caviló Megatron—. Ella sufrirá un escarmiento ejemplar y así aprenderá a temerme y a respetarme.

     Decidido, el tirano emprendió un malvado plan en venganza de aquella quien le arrebató, no sólo a su agente estelar, sino también a uno de sus altos oficiales militares. Y avispado por el anterior fracaso en su ostentoso intento por secuestrarla, en esta ocasión él mismo efectuaría la maniobra de un tajo.


❖〘•◦•▣•◦•◎•◦✦◦•◎•◦•▣•◦•〙❖


     Mientras tanto, inadvertida del peligro que se cernía sobre ella, la femme mimaba las bellísimas flores en los jardines de su mansión donde en un ayer viviese como humana. Ahí mismo, en las cercanías, un discreto séquito la custodiaba a petición de su líder, Optimus Prime, quien ahora fungía como su mentor y padre adoptivo.

     El humilde conjunto que velaba por su seguridad lo conformaban Ironhide, Red Alert e Inferno, sumándose a estos su perseverante cortejador y guardaespaldas personal, Thundercracker, y por supuesto, su Conjux, Soundwave.

     No obstante, en medio de esa amenidad, un escuadrón aéreo Decepticon formado por Ramjet, Thrust y Dirge atravesó las nubes del cielo arremetiendo en picada contra los tres Autobots; acto que puso en alerta al trío de celestes.

     —Ustedes protejan a Lunatic, nosotros nos encargaremos de estos granujas —ordenó Ironhide repeliendo las ráfagas enemigas.

     —Aléjense de aquí y pónganla a salvo —añadió Inferno.

𝕰𝖈𝖔 𝖉𝖊𝖑 𝕮𝖆𝖇𝖆𝖑𝖑𝖊𝖗𝖔 𝖉𝖊 𝕮𝖔𝖇𝖆𝖑𝖙𝖔 ~ {𝔖𝔬𝔲𝔫𝔡𝔴𝔞𝔳𝔢  𝔊1}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora