INFIEL TÚ ✔

× 1 × ¿AUN ME AMA?

ELIZABETH:

Inicios de diciembre, en una mansión muy lujosa de Londres

Hoy es un día muy especial de mi vida, hoy es 14 y yo y Thomas cumplimos 6 años de casados. Seis largos años en los que hemos podido vivir juntos y en los que me ha demostrado todo lo que siente por mí. Lo maravilloso que es. 

O bueno.. Fue así. Hasta hace dos años y hoy solo espero que... se acuerde.. de nuestro aniversario.

Había ido a comprar a una de las tiendas más caras de anillos, había notado que él ya no usaba nuestro anillo de bodas, tal vez no le gustaba, así que compré otro. Era realmente hermoso, dorado como el de bodas, tenia unas finas rayitas plateadas brillosas en el medio y se veía espectacular.

Y bueno.. Tal vez hoy, por nuestro aniversario, hubiera algo... No creo que un hombre como él pueda pasar tanto tiempo sin ninguna clase de contacto, ¿no? Lo extrañaba mucho... su piel, sus caricias, sus abrazos y besos, las veces en las que me envolvía entre sus cálidos brazos y me hacia sentir la mujer mas afortunada del planeta. De verdad extrañaba eso.

Nuestros dos últimos aniversarios habían sido un desastre, él ni siquiera se apareció por la casa y aunque le saludé, él nunca respondió, o tal vez la mueca que hacía fuera una respuesta.

Nerviosa entre a su cuarto con la cajita y el anillo en mis manos.

—Eh.. Amor.. — hablé para ser ignorada, él solo me levanta su mirada hacia mi y vuelve a dirigirla hacia la televisión.

—Verás.. Compre algo para ti... — dije algo nerviosa.

—¿Que compraste? — su respuesta mostró lo que era ahora, frío y sin ganas.

— umm.. Esto — le muestro la cajita y él la abre, cuando ve adentro sonríe.

Me siento feliz de ver su sonrisa, esa que muestra unas lineas como paréntesis que le quedan hermosas, significa que le gustó...

— ¿En serio? —suelta. Él ríe. Ríe mucho. A carcajadas. 

Su expresión cambia, su sonrisa toma un lado distinto... ironía... Sarcasmo... Burla.

—¿Amor que pasa?

Aún ríe —Elizabeth, ¡¿En esto te ganas mi maldito dinero?! — su tono de voz me intimida, pero son su palabras las que mas me dañan y no aguanto el llanto.

—Pero.. Amor...

—¡Trabajo tanto para tus estúpidos gustos y cachibaches! ¿Pero esto? ¿Me quieres amarrar mas a ti? ¡¿No te basta con que estemos casados?!

—Solo quería... Festejar nuestro aniversario..

—Estamos casados y aquí termina la cosa. Vete ¿si?. Interrumpes mi partido.

— Amor.. Aun no...

— ¿Ahora que quieres?

Siento que mi rostro arde y me avergüenza decírselo pero lo hago.

—Quería saber si... — me acerco a él nerviosa — ¿Quisieras que hoy... Podríamos... hacer el.. amor?

—Estas en celo o ¿que? — dice en burla — ¿Es que eres ninfomana? 

—No amor... Pero... Había hablado con algunas amigas y me dijeron que... Tenemos 26 años y es una buena edad para tener un bebé..

—¿Estas loca? ¡Nunca tendré un hijo contigo!

Lloré, y cubrí mi rostro con mis manos, me giré firmemente pero débil, y caminé entre sollozos a salir de la habitación, y corro hacia el cuarto de invitados.

Llego y me lanzo a la cama, a sollozar, llorar y querer morir ahí.

Porque cuantas veces quisiera abandonar todo, no puedo, no puedo porque no imagino una vida sin él, porque me acostumbró a quererlo y lo amo.

Aunque me duela amarlo.

Jamás me sentí una chica fea, pero él hace que me sienta horrible, sostuve mi celular y busqué una foto mía.

¿Es que soy tan fea? ¿Es que no lo merezco?

Logro levantarme de la cama y camino hacia la bañera, me meto a la ducha y me siento para luego abrir el grifo, el agua llena la tina poco a poco, solo me recuesto y estiro mis piernas.

¿Aún me ama? Cierro el caño cuando la tina estaba casi llena y vuelvo a sollozar, demasiado, desconsoladamente, mientras mis lágrimas se mezclan con el agua de la bañera.