El día se fue en preparar el desayuno sin descuidar a Andy y que no se metiera nada a la boca. Bañarnos por turnos para que el nene no se quedara solo. Darle otro megabiberon de leche que se tomaba en un suspiro y que en poco mas de cuarenta minutos necesitara otro cambio de pañal. Bones y yo nos turnabamos la preparacion del biberon y todos los menesteres del cuidado del pequeño... pero el cambio de pañal, ninguno de los dos queria hacerlo.
- Sigo insistiendo en que las tareas deberian ser delegadas especificamente para no crearle confusion a Andy.
- ¿Y que yo me encargue del cambio de pañal todas las veces, no?
- ¡Eres tan amable en ofrecerte, Seeley! ¡Me parece excelente idea!
- ¿Que? ¡No! ¡Espera! ¡Yo estaba siendo sarcas...!
Bones cogio al bebe del asiento ubicado en la encimera y se lo llevaba cargado a darle un buen baño mientras iba hablandole por el pasillo.
- Andy, tu papá te va a cambiar el pañal todas las veces que sean necesarias. Yo me encargare de bañarte, cambiarte de ropa y darte de comer.
- ¡Temperance yo no dije...!
- Dale las gracias a Papá, Andy...
El niño me miro con una sonrisa desdentada que me parecio adorable y gorgeo extendiendo sus brazos para que lo levante. Era la primera vez que este pequeño renacuajo hacia eso y me desarmó completamente. Vaya que sabia manipularme... al igual que su madre.
- Quédate con el por favor, voy a preparar su baño.
Asenti y lleve al niño conmigo mientras Bones ingresaba al cuarto de baño. Nos acomode en el sofa para encender el televisor y ver la repetición del partido de los Flyers.
- Bien Andy. Nunca se es demasiado joven para ser un fanático del mejor equipo de Hockey del mundo, así que vamos a ver el partido y te iré enseñando lo básico. Nada complicado... lo suficiente como para que anotes en la red antes de empezar a caminar.
Lo escuchaba conversar con el bebé desde la bañera. Se reía de sus propios chistes malos y Andy reía con el. La risa de mi novio y de mi hijo me llenaba de una sensacion de calidez y pertenencia que no habia sentido desde hace mucho tiempo.
Eran mi familia. Ambos. Y ese pensamiento me hacia sentir completa, tal y como Seeley lo habia dicho. Deje de lado mis miedos acerca de si seria o no una buena mamá. Era claro que tenia una formula de ensayo y error y que nos equivocariamos ambos pero...
Un movil sono desde la encimera, interrumpiendo mi tren de pensamientos acerca de la familia y la amena explicacion de Seeley sobre los rudimientos del Hockey.
- ¡Yo voy, cariño! ¡No te preocupes!
El vampiro se encogió mentalmente y cerró los ojos esperando algún proyectil dirigido hacia el desde el cuarto de baño... suspiro de alivio al ver que nada ocurría mientras cargaba a Andy con una mano y con la otra contestaba el telefono.
- Buenos dias...
- Ejem... ¿no es el telefono de Temperance Brennan?
- ¿Quien lo pregunta?
- El Subdirector del FBI Andrew Hacker.
ESTÁS LEYENDO
De Fin de Siglo
Roman d'amourEl agente especial del FBI, Seeley Joseph Booth, le confiesa un secreto espeluznante e imposible de creer a su compañera, la antropóloga Temperance Brennan. ¿Podrá la hiperracional Dra. Brennan compartimentar algo enteramente sobrenatural?