Capítulo 7

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No tengo noción de a qué hora me dormí, pero lo que sé es que lo hice como nunca. Supongo que el cansancio que tenía gracias a huir de Jagger fue un factor importante para eso. Quizá empiece a ir al gimnasio, probablemente el otro año.

La primera clase del día está aburrida como siempre, lo único que me alegra es que ya solo me quedan dos semanas del semestre, y de recibir economía, la clase que más detesto, tanto así que después de este semestre espero ya no recibir nada relacionado.

Estoy anotando cosas clave en mi cuaderno, sin prestarle atención a lo que escribo. No soy el único que está aburrido. Lianna está concentrada en su teléfono e Isaac está haciendo aviones de papel.

—Luces más distraído de lo normal —dice Lianna cuando se aburre de ver las mismas publicaciones una y otra vez.

—Solo estoy cansado, ayer fue una noche larga —aprovecho la distracción para usarla como pretexto para dejar de anotar.

—¿Anoche? ¿Qué hiciste después del cine? —pregunta la chica con un toque de picardía. Ya quisiera yo haber hecho lo que cree que hice.

—Bueno... digamos que iba para mi casa, pero... no fue así.

Lianna alza una ceja sin decir nada.

No sé si deba confesarle lo de anoche, hay varias maneras de ver esta situación. Primero, que el círculo social de Alex no está tan unido como creíamos. Y la otra es que me creerá un acosador. No lo soy.

—Vi a alguien, caminando solo —continuo—. Era Jagger.

La chica ahora parece confundida.

—Mi edificio queda algo lejos de las hermandades.

—Lo sé, por eso se me hizo raro. En fin, lo seguí y llegó hasta un viejo edificio que creo es de apartamentos.

Trato de darle hasta el más mínimo detalle al momento de describir lo que sucedió en el día anterior. Sus expresiones se pueden resumir en analizar cuidadosamente cada palabra que decía.

—Y entonces salí del basurero cuando se había ido —finalizo, sintiéndome libre de poder compartir el tema.

—Cedric... —ella se piensa un momento lo que va a decir—. ¿Por qué?

No estoy seguro de la expresión que se forma en mi rostro, pero me siento totalmente confundido. No esperaba esa respuesta. ¿Por qué, qué? Eso es bueno, eso es malo, no lo sé con certeza.

Lianna puede llegar a ser más impredecible de lo que pensé. Tenía anticipado una reacción un tanto más emocionada, donde la chica no pudiera contener su ansiedad por hacer algún movimiento en contra de Alex. O que mínimo dijera algo acerca de cuan imbécil es el tipo como para decirle a sus amigos quienes pueden ser sus novias y quiénes no.

—No lo entiendo —sacudo ligeramente la cabeza para tratar de despejar mi mente y captar mejor—. ¿Cuál es tu duda?

—¿Por qué lo seguiste? Era noche, podría haber sido peligroso.

—Lo sé, incluso llegué a considerar que se reuniría con algún grupo de pandilleros o traficantes de drogas.

—Exacto. Es algo de alto riesgo.

No comprendo en su totalidad porque Lianna está tan preocupada ahora, este proyecto ha sido todo idea suya. Esta chica puede llegar a ser muy rara.

—Solo trato de hacer lo que tanto me pides —respondo a modo de queja.

—El chiste es encontrar debilidades de Alex. Ya todo el mundo sabe cuan manipulador puede llegar a ser. Sus amigos no son relevantes, no siempre —ella aclara su garganta. Definitivamente no me está diciendo todas sus razones, pero estoy en una encrucijada, decidiendo si el escandalo se debe al acto en sí o que fui tras de Jagger—. Debemos mantener precaución al intentar meternos en sus asuntos, Tristán tiene razón, ellos son peligrosos. Tienen el dinero y el poder necesarios para hacer lo que les plazca.

AnárquicoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora